Estos son los hábitos que no conocía y que aceleran el envejecimiento

Envejecer es una parte natural de la vida y con ella vienen las líneas de expresión, las canas, la pérdida del cabello y otras marcas que estarían en contra de la vanidad. Los efectos que generan el paso del tiempo se deben aceptar con dignidad, sin embargo, existen ciertas actividades que ayudan a que el envejecimiento sea prematuro.

Aceptar que el tiempo pasa y con él, quedan huellas en el cuerpo que son difíciles de quitar, pero no se puede huir de lo inevitable. Para evitar esa frase reconocida que dice que ‘los años no vienen solos’ es importante que se evalúen ciertos hábitos del estilo de vida que, sin saberlo, ayudan a que se pueda envejecer más pronto.

Consumir cierto tipo de alimentos o bebidas, una vida sedentaria y malos hábitos pueden hacer que la edad se refleje más en unos que en otros. Este listado le hará saber qué tanto está por envejecer pronto.

No consumir frutas y verduras

Si bien este tipo de alimentos son ricos en vitaminas E, C y betacaroteno, además de su gran fuente de fibra, ayudan a combatir los efectos de los radicales libres gracias a su gran concentración de antioxidantes, lo cual también los hace prevenir la formación de células cancerígenas.

Aumentar la ingesta de este grupo alimenticio ayuda a prevenir síntomas de envejecimiento, ya que aportan nutrientes e hidratación para el organismo.

Alimentos tóxicos

Sin duda alguna estos son los alimentos a los cuales se está expuesto, tanto por cantidad como por elección. Las personas muchas veces prefieren elegir la comida procesada, con grasas, con azúcar alta, fritos o embutidos por su practicidad y por el afán en que la sociedad vive. Sin embargo, este tipo de comida es la que más daño le hace al organismo, no solo en cuanto a que ayuda a generar una vejez prematura, sino que en vez de alimentar sacia el hambre de manera vacía, es decir, puede dar sensación de llenura pero no aporta nada positivo al organismo.

En estos alimentos se encuentran toxinas que provocan un mal funcionamiento metabólico del cuerpo humano, generando así, la creación de radicales libres y el envejecimiento prematuro de las células.

Dormir mal

No precisamente se hace referencia a la postura o posición que se tome a la hora de descansar. Si bien este en un periodo de tiempo en el que el cuerpo se recupera y recarga, hacerlo de manera continua es la mejor manera de prevenir el envejecimiento prematuro. Normalmente la rutina del sueño debe durar en promedio de 7 a 8 horas para que el organismo descanse y se renueve, de no ser así, un cerebro que sigue en actividad y sin descanso muy probablemente acelerará el envejecimiento de las capacidades cognitivas y por ende del organismo.

La obesidad

De acuerdo al estudio dirigido por Sylvia Santosa, profesora asociada de Salud, Kinesiología y Fisiología Aplicada en la Facultad de Artes y Ciencias, de la Concordia University, Canadá, el sobrepeso conlleva a adquirir enfermedades potencialmente mortales, por lo que “acelera el envejecimiento del sistema inmune al enfocarse en diferentes células inmunes, y esa reducción de peso posterior no siempre revertirá el proceso”.

Exposición al sol

Si bien es prudente exponerse al sol para mantener los niveles apropiados de vitamina D, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por su sigla en inglés), la exposición al astro no debe realizarse entre 10:00 a. m y 4:00 p. m. ya que en este lapso de tiempo la emisión de rayos UV es muy agresiva, siendo este el principal causante del cáncer de piel.

Además, estar mucho tiempo al sol hace que la piel se reseque y envejezca de manera pronta. Cabe mencionar que a la hora de recibir los rayos del sol hay que mantenerse bien hidratado, usar bloqueador y aplicarse crema humectante tras la exposición.