Salud
Estos son los riesgos para la salud de utilizar el celular en el baño
Muchas personas pasan mucho tiempo el baño usando su teléfono.
Los teléfonos celulares se han encargado de transformar nuestro estilo de vida. Estos dispositivos tecnológicos son parte esencial del día a día de cada persona, ofreciendo conectividad para mantenernos en constante comunicación con nuestro entorno social, interactuar con amigos, familia y pareja, así como informarnos.
Además, en estos dispositivos se pueden almacenar todo tipo de datos de nuestra vida profesional y personal.
Desde que apareció el celular, este ha venido ganando más protagonismo en la vida cotidiana de las personas, razón por la que un mayor uso supone nuevas rutinas y hábitos que, si bien, entregan resultados debido a ocupaciones laborales, académicas o de relacionamiento social, también significan riesgos para la salud.
Este hábito ha llevado a que las personas desarrollen una dependencia a la tecnología, a tal punto de usar los dispositivos móviles en rutinas cotidianas, como ir al baño, ya sea para aprovechar ese momento, responder mensajes y comunicarse con amigos y seres queridos, o simplemente por distraerse y pasar el tiempo mientras salen del baño.
Tendencias
Lo que muchas personas no saben es que esta práctica puede ser nociva y llegar afectar la salud, debido a los gérmenes que hay alrededor del baño y que se pueden impregnar en la pantalla del dispositivo. Según Gerba, profesor de microbiología, y Kelly Reynolds, profesora de salud ambiental, ambos de la Universidad de Arizona, los baños están cubiertos de gérmenes, patógenos y bacterias entéricas del tracto intestinal, que provienen principalmente de la materia fecal.
Por ello, es importante prestar atención a las superficies en las cuales se deja el celular mientras se está en el baño. Por ejemplo, cuando se mueve la perilla del inodoro, pequeñas partículas de agua que contienen orina y heces, pueden llegar a salpicar el escusado y otros muebles donde con frecuencia se apoya el celular. Así mismo, los gérmenes que se impregnan al celular puede transmitir salmonella, E.coli, estreptococo, hepatitis, gastroenteritis, norovirus y otras enfermedades diarreicas.
Varios estudios de la Universidad de Arizona aseguran que nueve de cada 10 teléfonos tienen un microbio causante de alguna enfermedad, y el 16 % de ellos contiene materia fecal.
Ronald Cutler, microbiólogo de la Universidad Queen Mary de Londres, también señala que los teléfonos se calientan un poco, dándole a las bacterias un ambiente cálido y agradable. De esta manera, si la gente come cosas dulces y después manipula el teléfono, está dándole un mejor hogar a las bacterias.
Pero más allá de los peligros de esta práctica, utilizar el móvil en un baño o sentados en el retrete también supone una pérdida de tiempo. Una encuesta que se realizó en Estados Unidos a 2.000 personas, destacó que un 25 % de los hombres prefieren estar sentados en el baño para usar el móvil. Además, el 59 % de hombres y mujeres admitieron que chatean, el 45 % envía correos y casi el 33 % cogen el teléfono si reciben llamadas. La respuesta más repetida (80 %) es que la gente utiliza el móvil en el baño porque no tiene nada mejor que hacer.
Las nuevas posturas que se adoptan para manipularlo, la dependencia de estos aparatos y el pasar horas frente a las pantallas son algunos de los factores que ponen en riesgo; esto ha quedado en evidencia con el paso de los años y la aparición de algunas enfermedades que, aunque ya existían, se dispararon con el auge de los dispositivos móviles.
Diferentes expertos han señalado que el uso constante de estos elementos está asociado con problemas en el cuello, el túnel del carpo, obesidad, estrés, enfermedades visuales o insomnio. Esta necesidad de vivir conectados se le atribuye principalmente a las redes sociales, debido a que son el principal canal de comunicación entre los internautas. Especialmente, se ha notado una creciente de esta problemática en las generaciones más jóvenes que se rigen por las tendencias que circulan en internet.