Cerebro
Expertos descubren que después de los 40 años, lo ideal es dormir siete horas y no ocho
Los problemas de sueño pueden tener diferentes causas, desde genéticas hasta cerebrales.
Los científicos de la Universidad de Fudan, en China, han descubierto que el número de horas ideal para dormir después de los 40 años es de siete y no de ocho. Con ese tiempo de descanso, dicen, la persona logra recuperarse del trajín del día. Con menos o con más tendrá capacidad reducida de atención, de recordar cosas nuevas, de solucionar problemas y de tomar decisiones asertivas.
Estas siete horas también resultaron traer beneficios en la salud mental, pues quienes duermen en este lapso reportan menos síntomas de depresión y ansiedad que quienes reportan más o menos horas de sueño. El dato es importante porque, a medida que avanza la vida, las personas sufren de problemas de sueño que tienen una diversidad de causas, desde genéticas hasta la arquitectura del propio cerebro. El artículo fue publicado en la revista Nature Aging.
Mascotas
Personalidad canina
Muchos piensan que las razas caninas generan rasgos de comportamiento. Así, los golden retrievers son vistos como juguetones y afectuosos, mientras los pitbulls, como hostiles y agresivos. Pero en un nuevo estudio publicado en Science, un grupo de científicos mostró que la raza de un perro no es buen predictor de su conducta. Dicen que la mayoría de las tendencias de comportamiento en las razas de perros son anteriores a la crianza moderna.
Para demostrarlo, encuestaron a los dueños de más de 18.000 perros en el Arca de Darwin, una iniciativa científica comunitaria en las que las personas pueden informar sobre los hábitos y actuaciones de sus mascotas. Les hicieron más de 100 preguntas relacionadas con temas que iban desde el tamaño y el color de un perro hasta su sociabilidad y estilo de vida.
Los investigadores concluyeron que la raza explica solo el 9 por ciento de la variación de comportamiento entre diferentes perros. Algunos rasgos que parecen estar conectados con la raza son probablemente remanentes de la crianza ancestral que se centró en funciones como la caza o el pastoreo.
CIFRA
En los próximos 50 años, el cambio climático impulsará a miles de virus a saltar de una especie de mamífero a otra, según un estudio publicado en Nature. La mezcla de virus entre animales puede aumentar el riesgo de que uno salte a los humanos y cause una nueva pandemia, según los investigadores.
Salud física
¡A caminar rápido!
Un nuevo estudio reveló un vínculo claro entre el ritmo de marcha y la edad biológica. Investigadores de la Universidad de Leicester encontraron que una vida de caminatas rápidas podría conducir a tener una edad biológica 16 años más joven. Los científicos estudiaron datos genéticos de los participantes y descubrieron que caminar más rápido, independientemente de la cantidad de actividad física, estaba asociado con telómeros más largos.
Los telómeros son las “tapas” al final de cada cromosoma que contienen secuencias repetitivas de ADN, las cuales protegen al cromosoma de cualquier daño. Tenerlos largos ha sido un marcador biológico de salud. Este estudio es uno de los primeros de su tipo en comparar datos genéticos con velocidades de caminata, basadas en mediciones reales gracias a los dispositivos portátiles que monitorizan la actividad física. El trabajo fue publicado en Communications Biology.
Covid
Problemas cognitivos
Científicos de la Universidad de Cambridge encontraron que el covid severo puede envejecer el cerebro hasta 20 años, lo que equivale a perder 10 puntos de coeficiente intelectual (CI). Para el estudio, los expertos tomaron una muestra de 46 personas de 41 años en promedio que fueron admitidas por covid en Gran Bretaña, de las cuales 16 recibieron ventilación mecánica.
Tras someterlas a pruebas de razonamiento y solución de problemas, notaron que el covid deja esa huella cognitiva negativa que dura meses en sanar. Estudios anteriores ya habían encontrado un hallazgo similar.
Es posible que la infección viral directa sea causante de este fenómeno, pero los expertos señalan que es más probable que sea por el suministro inadecuado de oxígeno o sangre al cerebro, el bloqueo de vasos sanguíneos grandes o pequeños debido a la coagulación y hemorragias microscópicas. Sin embargo, la evidencia emergente sugiere que el mecanismo más importante puede ser el daño causado por la propia respuesta inflamatoria del sistema inmunológico del cuerpo.