Vida Moderna
Fatiga crónica: los alimentos que ayudan a reducirla de manera natural
La fatiga crónica es común en quienes tienen entre 40 y 60 años.
El síndrome de fatiga crónica o encefalomielitis miálgica (SFC/EM) es una enfermedad grave y de larga duración que afecta a muchos sistemas del cuerpo, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
No obstante, señaló que no se conoce la causa del síndrome de fatiga crónica, pues puede haber más de una causa y es posible que dos o más desencadenantes trabajen juntos para causar la enfermedad.
Además, cualquier persona puede tener síndrome de fatiga crónica, pero es más común en quienes tienen entre 40 y 60 años y por lo general, las mujeres adultas lo presentan con mayor frecuencia que los hombres adultos.
De hecho, los investigadores están buscando entre estas posibles causas:
Lo más leído
- Infección: aproximadamente una de cada diez personas que desarrollan ciertas infecciones, como el virus Epstein-Barr y la fiebre Q, van a desarrollar SFC/EM. También se han estudiado otras infecciones, pero no se ha encontrado ninguna causa.
- Cambios en el sistema inmunitario: la SFC/EM se puede desencadenar por cambios en la manera en que el sistema inmunitario de una persona responde al estrés o la enfermedad.
- Estrés mental o físico: muchas personas con SFC/EM han estado bajo estrés mental o físico intenso antes de enfermarse.
- Producción de energía: la manera en que las células dentro del cuerpo obtienen energía es diferente en las personas con SFC/EM que en las personas sin esta afección. No está claro cómo esto está relacionado con el desarrollo de la enfermedad.
Adicional, las personas de raza blanca son más propensas que otras razas en ser diagnosticados con el síndrome, pero muchas personas con síndrome de fatiga crónica no han sido diagnosticadas.
Así las cosas, indicó que los síntomas del síndrome de fatiga crónica pueden incluir:
- Fatiga severa que no mejora con el descanso.
- Problemas para dormir.
- Malestar o fatiga post-esfuerzo, donde sus síntomas empeoran después de cualquier actividad física o mental.
- Problemas con pensar y concentrarse.
- Dolor.
- Mareos.
Dicho lo anterior, el portal Ideas Consejos reveló los alimentos que ayudan a reducir la fatiga crónica de manera natural:
1. Carnes. La ingesta recomendada de este alimento es de 3-4 raciones a la semana.
2. Avena. Tiene nutrientes importantes para el organismo, como calcio, zinc, cobre, fósforo, hierro, magnesio, potasio, sodio y vitaminas B1, B2, B3, B6 y E.
3. Nueces. Tienen antioxidantes, minerales como el sodio, potasio, fósforo, hierro, zinc, magnesio, calcio y Vitaminas B y E. Además, ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares y son antiinflamatorias.
4. Cacao. Contiene hierro, potasio, fósforo, selenio, folatos y niacina.
5. Aguacate. Es fuente de ácidos grasos monoinsaturados, ácidos grasos insaturados, potasio y vitaminas C, E y B.
6. Pastas. Es una buena fuente de vitaminas H, E, vitaminas del grupo B (tiamina, riboflavina y piridoxina), hierro, magnesio y potasio
7. Semillas de chía. Aportan antioxidantes, proteína, ácidos grasos como omega-3 y 6, calcio, hierro, y magnesio.
8. Lentejas. Las lentejas son ricas en vitamina B, magnesio y zinc.
No obstante, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) revelaron que no hay una cura o un tratamiento aprobado para la encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica, pero algunos de los síntomas pueden ser tratados o manejados y el tratamiento puede dar alivio de esos síntomas a algunos pacientes, pero no a otros.
Por ende, Medline Plus indicó que algunos tratamientos incluyen una combinación de lo siguiente:
- Técnicas de manejo del sueño.
- Medicamentos para reducir el dolor, la molestia y la fiebre.
- Medicamentos para tratar la ansiedad (ansiolíticos).
- Medicamentos para tratar la depresión (antidepresivos).
De todos modos, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.