Vida Moderna
Fatiga crónica: los síntomas a los que se debe prestar atención
El dolor muscular y la dificultad para recordar son algunas de las señales de esta afección.
La fatiga crónica es una enfermedad grave que a largo plazo puede afectar a muchos sistemas del cuerpo e influye en la capacidad de las personas para desarrollar sus actividades habituales.
Esta afección puede perjudicar a cualquiera, sin embargo, suele ser más común en personas de 40 a 60 años, en las mujeres y, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), es más diagnosticado en personas de raza blanca.
La fatiga crónica también es conocida como encefalomielitis miálgica y aún no se han probado científicamente las causas que la provocan, de hecho, algunos expertos indican que esta enfermedad puede ser el resultado de una combinación de varios factores.
En cuanto al diagnóstico, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que no es posible hacerlo con una sola prueba, por lo que el especialista puede solicitar una serie de exámenes para descartar otro tipo de afecciones que pueden tener síntomas similares.
Tendencias
Dichos síntomas pueden variar dependiendo de cada persona y su gravedad puede cambiar de un día para otro, repentinamente. Algunos de ellos son:
1. Dolor de garganta: si la frecuencia de este dolor aumenta, puede tratarse de encefalomielitis miálgica.
2. Empeoramiento de los síntomas al ponerse de pie o incorporarse: estas personas suelen sentirse aturdidas, mareadas, débiles o a punto de desmayarse al ponerse de pie o incorporarse. Incluso, podrían tener cambios en la visión, como ver borroso o ver puntitos.
3. Agrandamiento de los ganglios linfáticos: este síntoma se detecta cuando al palpar los ganglios linfáticos del cuello y las axilas, hay dolor.
4. Agotamiento extremo: las personas con encefalomielitis miálgica no se sienten cansadas como los demás individuos, normalmente, la fatiga no es el resultado de hacer actividad inhabitualmente difícil y no era un problema que se tuviera antes, si no, que apareció con la enfermedad.
5. Problemas de memoria o concentración: la mayoría de personas con fatiga crónica tienen dificultad para pensar rápido, recordar cosas, poner atención a los detalles, o pensar con claridad.
6. Dolor de cabeza: ya sean nuevos o que empeoren si ya se padecían, suele ser una señal de fatiga crónica.
7. Dolor muscular: el dolor que sienten las personas con esta afección no suele ser causado por una lesión. También es posible que repercuta en las articulaciones.
8. Problemas para dormir: quienes padecen fatiga crónica podrían no sentirse mejor o menos cansadas, incluso después de haber dormido toda la noche. Algunas personas pueden tener dificultad para conciliar el sueño o para permanecer dormidas.
Cabe resaltar que si bien no hay cura para esta enfermedad, hay algunos remedios naturales que pueden ayudar a aliviar los síntomas, los cuales se recomienda consumir luego de haber consultado con el médico de cabecera.
Lo anterior debido a que hay productos –así sean naturales– que pueden interactuar con algunos medicamentos y causar efectos negativos en la salud. El portal de nutrición y bienestar UnComo reseña dos remedios naturales para calmar los síntomas de la fatiga crónica, descritos a continuación:
- Equinácea: la ingesta de la equinácea puede ayudar a mermar la fatiga crónica, permitiendo que la persona tenga mayor disposición para llevar a cabo sus actividades diarias. Dos cucharadas de esta planta en un vaso con agua caliente serán suficientes para preparar una infusión de esta.
- Gingseng: es una plata reconocida por ser una fuente de energía y vitalidad, de ahí que recomienden su consumo para darle manejo a la fatiga crónica. Una infusión de gingseng 10 minutos antes de las comidas será suficiente para que ayude a calmar la sintomatología.