Flujo femenino: esto es lo que hay que saber para evitar sorpresas

El flujo es algo natural del cuerpo femenino, pues incluso algunos expertos en la materia han comparado el fluido con la saliva de la boca, si esta falta, es porque claramente algo no está del todo bien.

Según el portal Hello Clue, la secreción vaginal tiene que ver con “cualquier fluido no menstrual que salga de la vagina, y con ello, se habla del flujo cervical, el fluido de excitación y la lubricación”.

¿Cuál es su función?

Tiene que ver con un flujo que acompaña la zona íntima del sexo femenino durante el ciclo del mes. Se producen por las células del cuello uterino y es posible que genere algún tipo de cambios, es decir, a veces puede ser cremoso, pegajoso, seco, húmedo y con olor.

Funciona para apoyar la fertilidad. Favorece la entrada de los espermatozoides en el cuello del útero y lleguen al óvulo durante la ovulación, según HC. Este flujo debe cambiar para permitir el paso de los espermatozoides y de paso, los protege de la acidez vaginal, agregan.

Así las cosas, se trata de una secreción del cuerpo que no tiene mayor complicación y debe verse como algo normal. Según Medical News Today las mujeres tienden a producir casi una cucharadita, o 4 ml, de flujo blanco o transparente todos los días.

En el portal de la revista Mi bebé y yo, los especialistas afirman que ‘’las bacterias que se eliminan a través del flujo vaginal no son todas malas, sino que hay bacterias beneficiosas que invaden la vagina e impiden que las bacterias patógenas se multipliquen, así se puede resumir porque el flujo vaginal es muy húmedo y es porque está compuesto de agua, moco y células del organismo’'.

La recomendación es hacer un monitoreo del flujo, es decir, si se nota un cambio en el olor, color y la consistencia, es probable que haya una infección, que se tenga un desequilibrio bacteriano o también, se puede evidenciar un cáncer de cuello uterino, así que se debe tomar muy en serio la revisión matutina.

Rafael Duque, ginecólogo, sexólogo y escritor bogotano, indicó a la revista Fucsia que “la secreción debe ser vista como algo natural, ya que las vaginas lubrican. En los momentos en los cuales hay ovulación puede haber un aumento del moco cervical que hace que se vea como una especie de flujo filante”.

El especialista manifestó que sí que es verdad que “hay que fijarse en los fluidos que producen mal olor, un color diferente y aquellos que producen rasquiña, debido a que si no tienen esas características, quiere decir que no es una secreción patológica, sino que son flujos completamente normales. De hecho, el que la vagina tenga una lubricación normal indica que hay una buena salud”.

¿Cuáles son los tipos de flujos vaginales que existen?

En ese sentido, es importante saber que esta secreción femenina avisa sobre el estado de salud, por lo que es importante analizarlo muy bien e identificar, cuál de todos los tipos de fluidos que hay son normales y cuáles más bien te alertan de que algo está sucediendo con tu zona íntima.

Los siguientes son los tipos de secreciones que se pueden distinguir, de acuerdo con Vaico Medical:

• Flujo blanco (aparece antes del periodo)
• Flujo tipo clara de huevo (indica que es MUY FÉRTIL)
• Flujo acuoso (un flujo normal y saludable)
• Flujo transparente y elástico (suele ser normal.)
• Flujo cremoso (indica que se acerca la ovulación)
• Flujo pegajoso (fluido saludable)
• Flujo amarillo o verde (indica infección vaginal)
• Flujo gris verdoso y espumoso (indica una infección de transmisión sexual o de una infección llamada vaginosis bacteriana)
• Flujo marrón o con sangre (el flujo marrón puede ser un síntoma de embarazo cuando el flujo rojo o incluso marrón no es intenso)
• Flujo grumoso (indica infección vaginal por hongos)