Fruta para equilibrar el colesterol en el cuerpo y prevenir enfermedades renales

Una alimentación equilibrada es clave para mantener un cuerpo saludable y disminuir el riesgo de padecer diferentes enfermedades. La Organización Mundial de la Salud enfatiza en la importancia de incluir diversos tipos de alimentos para tener una dieta sana y que el cuerpo obtenga todos los nutrientes necesarios.

Las frutas son un tipo de alimento necesario para la salud integral de las personas. La OMS recomienda incluir al menos 400 gramos para garantizar una ingesta diaria suficiente de fibra dietética. Existe una lista larga de las que pueden agregarse a al rutina diaria, dentro de ellas se destaca la manzana.

Esta fruta es muy popular por su sabor particular. Suele consumirse en su estado original y en jugo. Algunas personas eligen añadirlas a sus batidos, ensaladas, bowls y diferentes tipos de preparaciones.

Este alimento tiene efectos positivos para la salud de las personas, especialmente para los riñones. “La manzana es uno de los iconos de la dieta sana. Entre otros motivos porque posee una fibra llamada pectina. Esta sustancia puede ayudar a reducir algunos factores de riesgo de daño renal como los niveles altos de azúcar en la sangre y colesterol”, explica el portal web El Español.

La Vanguardia reseña el contenido nutricional de esta fruta por 100 gramos:

• Calorías: 52
• Grasas totales: 0,2 g
• Colesterol: 0 mg
• Sodio: 1 mg
• Potasio: 107 mg
• Hidratos de carbono: 14 g
• Proteínas: 0,3 g

La manzana es una opción saludable para incluir en la alimentación diaria. Es una aliada perfecta para quienes están en un proceso de pérdida de peso, pues al comerla, se obtiene un efecto saciante, que ayuda a evitar a comer de más.

“Según destaca el European Journal of Clinical Nutrition, uno de los fitoquímicos de la manzana es la quercetina, que permite prevenir los problemas cardiovasculares, las enfermedades inflamatorias como la artritis, el asma y hasta las contracturas musculares. La manzana, a su vez, tiene ácidos como el tartárico y el málico, que ayudan a digerir mejor las grasas que consumimos. Por ello se aconseja comer esta fruta como postre luego de una ingesta copiosa, ya sea al mediodía o por la noche. Además, la manzana sacia nuestro apetito y evita que comamos de más”, explica La Vanguardia.

Para saber con qué frecuencia consumirla y recibir mayor información se recomienda consultar a un nutricionista, para obtener asesoría profesional.

Ideas para merendar

Algunas personas no saben qué comer para merendar durante el día. Para ello, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades brindan algunos ejemplos, donde se pueden incluir frutas:

Alrededor de 100 calorías o menos

• 1 manzana mediana (72 calorías).
• 1 banana mediana (105 calorías).
• 1 taza de habichuelas verdes (ejotes) al vapor (44 calorías).
• 1 taza de arándanos (83 calorías).
• 1 taza de uvas (100 calorías).
• 1 taza de zanahorias (45 calorías), de brócoli (30 calorías) o pimientos (30 calorías) con 2 cucharadas de hummus (46 calorías).

Papaya

Esta fruta tiene efectos positivos en las funciones del estómago y el intestino. Asimismo, ayuda a aliviar diferentes trastornos, debido a sus propiedades antiinflamatorias. De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Queensland (Australia) “en general, tanto los extractos de plantas estudiados como los fitoquímicos de la papaya que se han investigado son prometedores como posibles objetivos farmacológicos para las enfermedades inflamatorias.”

La papaya es una de las frutas aliadas para los pacientes diabéticos. De acuerdo con Mejor con salud, las enzimas que posee el jugo preparado con esta fruta contribuyen al bienestar del metabolismo y al óptimo funcionamiento del páncreas en la regulación de la glucosa en la sangre.