Vida Moderna

Fruta que reduce el colesterol y previene el riesgo de enfermedades

La Organización Mundial de la Salud recomienda cinco porciones de 80 gramos de frutas al día.

22 de junio de 2023
Frutas
La OMS recomienda incorporar frutas en la dieta saludable. | Foto: Getty Images

El colesterol es una sustancia cerosa, similar a la grasa, que el cuerpo necesita para gozar de buena salud, pero en las cantidades adecuadas, pues los niveles poco saludables de colesterol pueden dar lugar a una enfermedad llamada colesterol en la sangre, de acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos.

Además, explicó que los niveles elevados de colesterol LDL o “malo” hacen que se acumule placa, depósitos de grasa, en los vasos sanguíneos y esto puede provocar un ataque al corazón, un derrame cerebral u otros problemas de salud.

El colesterol alto puede provocar un ataque cardíaco.
El colesterol alto puede provocar un ataque cardíaco. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Asimismo, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, indicó que los factores que pueden aumentar el riesgo de tener niveles de colesterol son:

  • Mala alimentación. Comer demasiada grasa saturada o grasas trans puede dar lugar a niveles de colesterol poco sanos.
  • Obesidad. Tener un índice de masa corporal (IMC) de 30 o más aumenta el riesgo de tener colesterol alto.
  • Falta de ejercicio. El ejercicio ayuda a aumentar el HDL del cuerpo, que es el colesterol “bueno”.
  • Tabaquismo. Fumar cigarrillos puede bajar el nivel de HDL o colesterol “bueno”.
  • Alcohol. Beber demasiado alcohol puede aumentar el nivel de colesterol total.
  • Edad. Incluso los niños pequeños puede tener niveles de colesterol poco sanos, pero es mucho más común en las personas de más de 40, ya que a medida que se envejece, el hígado puede cada vez menos eliminar el colesterol LDL.

Ahora bien, para conocer los niveles de colesterol hay que realizar un examen de sangre y si los niveles salen altos hay que tener cambios en los hábitos y una recomendación del portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, es consumir papaya, ya que “por tener buenas cantidades de fibras, la papaya reduce la absorción de grasas producidas de los alimentos a nivel del intestino, disminuyendo los niveles de colesterol total, previniendo enfermedades, como aterosclerosis e infarto”.

papaya
La papaya es una fruta muy conocida por sus propiedades. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Información nutricional por 100 gr de papaya

  • Agua: 90,40 %
  • Energía: 45 kcal
  • Carbohidratos: 91 g
  • Proteína: 0,6 g
  • Grasas: 0,1 g
  • Fibras: 2,3 g
  • Magnesio: 22,1 mg
  • Potasio: 126 mg
  • Vitamina A: 135 mcg
  • Carotenos: 810 mcg
  • Licopeno: 1,82 mg
  • Vitamina E: 1,5 mg
  • Vitamina B1: 0,03 mg
  • Vitamina B2: 0,04 mg
  • Vitamina B3: 0,3 mg
  • Folato: 37 mcg
  • Vitamina C: 68 mg
  • Calcio: 21 mg
  • Fósforo: 16 mg
  • Magnesio: 24 mg
  • Hierro: 0,4 mg
  • Selenio: 0,6 mcg
  • Colina: 6,1 mg

Respecto al consumo, Tua Saúde indicó que “la recomendación mínima diaria de frutas es entre dos a tres porciones, lo que corresponde entre 160 a 240 g de papaya por día”.

Además, esta fruta se puede consumir de diferentes formas como, por ejemplo, “fresca, deshidratada o en forma de jugos, batidos y ensaladas de frutas”.

La papaya tienen propiedades antibacterianas o antiinflamatorias. Foto: Getty images.
La papaya tienen propiedades antibacterianas o antiinflamatorias. | Foto: Foto: Getty images.

Ahora bien, para obtener los beneficios mencionados anteriormente, la papaya debe ser consumida en conjunto con una dieta equilibrada y saludable que debe incluir al menos 400 g (o sea, cinco porciones) de frutas y hortalizas al día; menos del 10 % de la ingesta calórica total debe ser de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria debe proceder de grasas y se deben consumir menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.

De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.