Frutas ácidas: ¿cuáles son sus propiedades y beneficios para la salud?

Las frutas son alimentos infaltables dentro de una alimentación balanceada, debido a que garantizan la obtención de micronutrientes esenciales para el organismo, como las vitaminas y minerales. Como parte de una comida equilibrada, pueden estimular la actividad cerebral, contribuir al mantenimiento del estado físico y fortalecer el sistema inmune.

Este grupo se destaca por su variedad de sabores, colores, texturas y propiedades dentro de la cocina, por lo que se pueden integrar de múltiples formas a lo largo del día. Las frutas se pueden clasificar de acuerdo con algunas características comunes que comparten, como por su color, en el caso de los frutos rojos; o su sabor, como sucede con las frutas ácidas o cítricos.

Se ha encontrado que este último tipo puede tener diversos beneficios para el ser humano, por ser fuentes principales de vitamina C, un micronutriente vital. De acuerdo con la Oficina de Suplementos Dietéticos de los Institutos de Salud de los Estados Unidos, este compuesto ejerce una tarea determinante en el organismo, gracias a su cualidad antioxidante, la cual contribuye a mitigar el daño provocado por los radicales libres en la estructura celular.

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Según explican desde el portal Medical News Today, mantener un nivel adecuado de oxígeno es necesario para que las células del cuerpo puedan cumplir con sus tareas y regenerarse. No obstante, cuando se encuentra en cantidades elevadas, el oxígeno puede propiciar la oxidación de las células y acelerar el deterioro natural del cuerpo.

Es posible decir que la vitamina C tiene una función protectora, ya que también ayuda a reforzar el sistema inmune. Por otra parte, estas frutas cítricas pueden favorecer la formación de colágeno, un componente que utiliza el cuerpo para preservar la buena condición de la piel, como detallan desde los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos.

Hacen parte de la familia de las frutas ácidas: la piña, la naranja, la fresa, el kiwi y el tamarindo.

Piña

De acuerdo con la guía de alimentos del portal Cuerpo Mente, la piña es una fruta refrescante, caracterizada por su sabor entre dulce y ácido. Se recomienda como parte de una alimentación sana gracias a su aporte de nutrientes esenciales, como la vitamina C, componentes del complejo B, la vitamina A y el potasio.

Su consumo se asocia con beneficios para eliminar las toxinas del organismo, debido a que estimula del trabajo del hígado, por su efecto depurativo.

Fresa

La fresa es uno de las frutas comunes dentro de la alimentación, por su facilidad para integrarla y su sabor que es del agrado de muchas personas. Según indica la Fundación Española de la Nutrición, en esta frutilla proveniente del continente europeo se encuentra una cantidad considerable de vitamina C, así como otros componentes con cualidad antioxidantes, como los flavonoides. Por estas propiedades, es idónea para combatir la oxidación del organismo.

Tamarindo

Menos popular en la alimentación cotidiana es el tamarindo, si se le compara con la piña y la fresa. Sin embargo, eso no quita que tenga propiedades consideradas bondadosas para el organismo. Como detalla el portal de salud Tua Saúde, esta fruta es fuente de micronutrientes, como el magnesio, el fósforo, el calcio, la vitamina C, la vitamina A y compuestos antioxidantes.

Por su composición nutricional, se le atribuyen efectos positivos para ralentizar el deterioro natural provocado por el envejecimiento, regular los niveles de colesterol y glucosa en el torrente sanguíneo, así como favorecer el sistema inmune.

Al tratarse de frutas que se caracterizan por su acidez, se sugiere evitar su consumo en personas que padezcan de afecciones que se caractericen por la irritación del aparato digestivo, como la gastritis.