Vida moderna
Glucosa alta: ¿además de la diabetes, qué otros problemas de salud pueden causarla?
Es importante consultar a un doctor en caso de tener alguna de estas afecciones.
La glucosa es importante para el funcionamiento del cuerpo humano, pues la principal fuente de energía. Esta se obtiene en la alimentación diaria. Los Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades explican cómo se convierte en energía:
- “El páncreas libera insulina cuando su nivel de azúcar en la sangre aumenta después de comer.
- La insulina funciona como una llave que permite que el azúcar en la sangre entre a las células del cuerpo para que estas la usen como energía.
- Cuando los niveles de azúcar e insulina en la sangre son altos, el hígado absorbe azúcar y la almacena como glucógeno. El hígado puede convertirlo otra vez en azúcar cuando sea necesario para tener energía”.
Aunque la glucosa es valiosa para el organismo, los niveles elevados son perjudiciales para la salud, pues se incrementa el riesgo de padecer diabetes. Esta es una enfermedad que puede causar diferentes complicaciones de salud, incluyendo amputación de miembros, ceguera, entre otros.
Es importante tener una dieta balanceada para evitar estos niveles fuera de los rangos normales. Asimismo, existen diferentes factores que pueden contribuir a tener niveles elevados de glucosa. Es clave consultar periódicamente a un doctor para revisarlos, ya que esta afección no suele presentar síntomas.
Según explica Medine Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, los “niveles altos de glucosa en la sangre también pueden ser causados por otras enfermedades que afectan los niveles de insulina o glucosa en la sangre, como problemas con el páncreas y glándulas suprarrenales”.
Otras afecciones también pueden causar niveles demasiados bajos de glucosa, como enfermedad del hígado. “Sin tratamiento, niveles bajos de glucosa en la sangre demasiado severos pueden causar problemas de salud graves, incluyendo convulsiones y daño cerebral”, agrega la Biblioteca.
Diabetes
El páncreas produce una hormona llamada insulina, que actúa como una llave que permite que el azúcar en la sangre entre a las células del cuerpo para que estas la usen como energía.
En los pacientes diabéticos, su cuerpo no produce una cantidad suficiente de insulina o no puede utilizar adecuadamente la insulina que produce. Cuando no hay suficiente insulina o las células dejan de responder de forma positiva a la insulina, hay demasiada azúcar en el torrente sanguíneo y, con el tiempo, esto puede causar problemas de salud graves, como enfermedad del corazón, pérdida de la visión y enfermedad de los riñones.
Existen diferentes tipos de diabetes:
- Diabetes tipo 1: este tipo de diabetes es la menos común. Se puede presentar en cualquier edad, pero la suelen padecer, por lo general, niños, adolescentes o adultos jóvenes. Se caracteriza por una producción deficiente de insulina, el cuerpo no produce o produce en cantidades mínimas.
- Diabetes tipo 2: este tipo de diabetes es el más usual. Por lo general, se presenta en la edad adulta (sobrepeso), sin embargo, en la actualidad se presenta cada vez más en los niños. En esta enfermedad el cuerpo es resistente a la insulina y no la usa como debería.
- Diabetes gestacional: este tipo de diabetes aparece en el embarazo. Esta enfermedad aumenta el riesgo de que se presenten complicaciones en parto. Al mismo tiempo de que la madre y el hijo presenten diabetes de tipo 2 en un futuro.
¿Cuáles son los factores que afectan los niveles de glucosa en la sangre?
Según explican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, hay diferentes de las que pueden afectar los niveles de azúcar en el torrente sanguíneo:
- Tener dificultad para dormir: no poder descansar por falta de sueño puede hacer que disminuya la eficacia del organismo respecto al uso de la insulina. De acuerdo con los expertos, una noche de falta de sueño puede afectar los niveles de glucosa.
- No desayunar: además de ser perjudicial para la salud del cuerpo en general, saltarse el desayuno puede aumentar estos valores en la sangres, después el almuerzo y la cena.
- Tomar café: aunque esta bebida ayuda a tener energía para el día, tomar café, incluso sin endulzante aumenta el azúcar en algunas personas que son sensibles a la cafeína.
- Estar deshidratado: es vital tomar al menos ocho vasos de agua al día para mantener el cuerpo hidratado. Cuando hay poca agua en el organismo, hay una mayor concentración de azúcar en la sangre.