Vida Moderna

Glucosa alta: el fruto seco que ayuda a regular el azúcar de manera natural

Las personas con diabetes deben mantener una dieta balanceada rica en frutos secos y verduras.

27 de julio de 2022
Tanto la diabetes de tipo 1 como de tipo 2, pueden causar problemas graves en la salud.
Tanto la diabetes de tipo 1 como de tipo 2, pueden causar problemas graves en la salud y es necesario estar monitoreando los niveles de azúcar en el cuerpo. | Foto: Getty Images

El azúcar o la glucosa es importante para el buen funcionamiento del cuerpo humano. Sin embargo, en exceso puede significar un riesgo para la salud. Debido a que esta se puede obtener a través de la alimentación diaria, los expertos manifiestan la necesidad de mantener una dieta saludable.

La glucosa alta incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades como la diabetes, una de las principales causas de ceguera, insuficiencia renal, ataques cardíacos, derrames cerebrales y la amputación de miembros inferiores.

La diabetes es una enfermedad que se conoce por generar niveles altos de glucosa en la sangre. Esto ocurre debido a que el páncreas no logra producir insulina, la hormona encargada de transportar la glucosa a las células del cuerpo para usarla como energía.

Los síntomas de la diabetes pueden ser: ir muchas veces al baño, presentar encías rojas o inflamadas, tener hambre constantemente, sentirse cansado, tener sed, perder peso sin razón alguna, dificultad de cicatrización en llagas y tener una visión borrosa.

Por ello, especialmente las personas que padecen de diabetes, deben mantener una alimentación balanceada, rica en verduras, legumbres, frutas y lejos de las grasas saturadas, bebidas azucaradas y alimentos con azúcares refinados.

En ese sentido, el portal especializado en diabetes Frutas para diabéticos, reseña que las avellanas son unas semillas saludables para los pacientes con esta enfermedad. Esto debido a que son ricas en vitaminas, minerales, fibras y proteínas. Además, posee flavonoides que previenen el envejecimiento prematuro, y aportan grasas monoinsaturadas que protegen la salud del corazón.

De acuerdo con una investigación de la Universidad de Toronto, las avellanas y frutos secos ayudan a mantener control sobre la diabetes, por lo que es necesario ingerir media taza al día. Cabe señalar que se debe consultar previamente con un doctor antes de consumir ese tipo de preparaciones.

Las personas con diabetes deben hacerse monitoreos constantes de los niveles de glucosa. Foto: Getty images.
Las personas con diabetes deben hacerse monitoreos constantes de los niveles de glucosa. Foto: Getty images. | Foto: Foto: Getty images.

El portal web Mejor con Salud destaca los beneficios de dos especias para regular la glucosa en la sangre y contribuir a la gestión de la diabetes.

Canela

Según este sitio web, la canela es una especia que puede ayudar a regular la diabetes tipo 2. Esto se debe a que “puede ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre porque se reduce la absorción de glucosa después de la comida”. Es importante que antes de consumirla para este propósito se consulte con un médico previamente.

Jengibre

El jengibre es una especia utilizada para la preparación de infusiones, comidas y postres. De acuerdo con Mejor con Salud, esta raíz también puede ayudar a combatir la diabetes tipo 2, además de sus propiedades analgésicas, antiinflamatorias y digestivas para el cuerpo humano.

Vegetales de hoja verde

Las verduras como la espinaca, acelga y lechuga contienen un alto nivel de nutrientes, en especial magnesio, potasio y vitamina K. Además, su baja cantidad de calorías los hace un grupo de alimentos básicos para tratar la diabetes.

Huevos

El consumo regular de huevo puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas. Además, la sensibilidad de la insulina mejora y los niveles de colesterol bueno aumentan. Lo importante a la hora de consumirlos es no sustraer la yema, pues es allí, donde hay más nutrientes.

Pescado graso

El pescado es una proteína magra y saludable que contiene un tipo de grasa llamada omega 3 que puede ayudar a proteger el corazón, un órgano expuesto entre las personas con diabetes.