Vida Moderna
Glucosa alta: la fruta que ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre
El contenido en fibra de la papaya ayuda a regular la glucosa, la insulina y los lípidos.
Desde hace mucho tiempo se pensaba que comer algunas frutas de sabor dulce (como la banana, el mango, la papaya y otras) no era recomendable en caso de padecer diabetes, lo cierto es que comer papaya y otras frutas sí puede resultar beneficioso para la salud, con o sin diabetes.
Científicamente, está comprobado que “consumir esta fruta natural es muy beneficioso para la salud”. Estos alimentos no solo aportan fibra sino también múltiples nutrientes.
Además, es cierto que cuando se tiene diabetes no es recomendable consumir la fruta en forma de zumo, por ejemplo, ya que así su aporte cambia.
¿Cómo entender mejor la diabetes?
La diabetes es una enfermedad crónica que se manifiesta cuando el páncreas deja de producir insulina por completo o en las proporciones necesarias para metabolizar los azúcares consumidos.
La insulina permite la conversión de la glucosa de los alimentos ingeridos en energía para realizar las actividades cotidianas.
De acuerdo con el portal Mejor con Salud, “si la glucosa no es absorbida por las células para ser utilizada como energía, se acumula en la sangre y produce la hiperglucemia, es decir, niveles elevados de glucosa en la sangre”. Y si esta situación se prolonga en el tiempo puede provocar daños en diversos órganos y tejidos.
Beneficios de comer papaya
Es común escuchar que se debe evitar todo tipo de frutas, porque contienen azúcar y puede resultar contraproducente para quienes padecen de esta enfermedad. No obstante, las frutas y la papaya en particular si puede ser ingerida al natural ayudará a contrarrestar los efectos de la diabetes. Una de estas justamente es la papaya debido a que:
- Es rica en vitaminas A, C, E y algunas del complejo B.
- Contiene papaína, una enzima que favorece todo el proceso digestivo.
- Es rica en minerales como magnesio, calcio y fósforo.
- Contiene fibra soluble y antioxidantes.
Investigaciones publicadas en el portal diabetessincontrol.com indican que “la papaya es una fruta que puede contribuir con el bienestar de algunos tipos de diabetes, pues su contenido de fibra ayuda a regular la glucosa, la insulina y los lípidos”.
Adicionalmente, en un estudio realizado en ratones, se llegó a la conclusión de que la pulpa de papaya tiene cierto efecto benéfico en el control de la glicemia de animales hiperglicémicos, debido a la importante reducción en el nivel de glucosa en sangre en estos animales.
Al mismo tiempo, se observó una importante reducción en el peso corporal en animales normoglicémicos que reciben la pulpa de la papaya.
Comer papaya ayuda a obtener antioxidantes
La papaya es una fruta que contiene vitamina C, la cual interviene en varios procesos importantes, como la formación de colágeno y la absorción de hierro. Además, favorece la resistencia a las infecciones.
No altera los niveles de glucosa en la sangre
Aunque es una fruta de sabor dulce y su nivel de azúcar no es tan bajo como la manzana, comer papaya es buena idea siempre que cuides el tamaño de las porciones. Lo más recomendable es que estas sean:
- Porciones pequeñas (que no excedan de una taza).
- Consumidas durante la mañana para tener suficiente tiempo para quemar la energía.
- Acompañadas de alguna proteína como yogur o queso para reducir las posibilidades de presentar hipoglucemia.
Ayuda a satisfacer el apetito
Al ser una fruta rica en fibra soluble, ayuda a las personas a tener una sensación de saciedad con una porción razonable. Esto es perfecto para los diabéticos que sufren de antojos constantes.
Al incluir papaya después del almuerzo o como desayuno, la persona obtiene la sensación de saciedad por más tiempo. Esto ayudará a evitar la tentación de buscar alimentos que carecen de nutrientes o elevan el nivel de glucosa de manera rápida.