CIENCIA
¿Guantes y zapatos? Qué se sabe sobre las fuentes de infección por covid-19
Al inicio de la pandemia, los expertos recomendaban desinfectar todas las superficies, pero hoy la ciencia está mostrando cuáles son las verdaderas fuentes de propagación.
En un comienzo, y ante el desconocimiento sobre el coronavirus, muchos fueron a extremos y recomendaron minuciosas medidas de seguridad como desinfectar todas las superficies, además del lavado de manos. Era lógico, pues el temor por la transmisión de este virus desconocido era enorme. Y ante la ignorancia era mejor ser precavidos.
De hecho, los hospitales y hoteles han gastado miles de millones de dólares en el mundo para hacer limpieza exhaustiva de estas superficies. Pero hoy, 9 meses después de pandemia, la ciencia está mostrando con estudios cuáles son las verdaderas fuentes de infección.
Según Monica Gandhi, una profesora de medicina de la Universidad de California, el tema de las cerraduras de la puerta ya pasó y la evidencia muestra que el virus, en términos generales, no es tan potente en las superficies como para enfermar a la gente. Por lo tanto, Ghandi dice que el riesgo no está en las superficies, sino en estar cerca a alguien con el virus, pues estas personas botan gotitas de la infección de su nariz y boca sin saber que lo están haciendo".
Además de esto, una investigación hecha por el microbiólogo Emanuel Goldman demostró ese punto al examinar estudios de laboratorio con muestras de coronavirus en superficies. El trabajo demostró que el virus no era tan infeccioso en estos lugares y por lo tanto esa fuente de contagio resultó ser muy baja. Algunos investigadores incluso trataron de cultivar el virus de estas muestras y no lo lograron, por lo que concluyeron que las transmisión a través de contacto con estas superficies es menos frecuente que los escenarios reales de contacto con otros infectados.
Sobre usar guantes, algunos expertos dicen que podría hacer más mal que bien en la protección. Estos juegan un papel crucial en clínicas y en las unidades de cuidado intensivo donde se trata a pacientes severos de covid-19. En estos lugares el uso de ropa especializada para evitar el contagio es una regla. Pero en situaciones cotidianas como salir a la calle no. De hecho ni la OMS ni el CDC en Atlanta lo recomiendan a la gente en su vida diaria. La posibilidad de contagiarse por la ropa también es considerada como baja según la Universidad de Johns Hopkins.
Otra cosa es si un familiar en su casa tiene covid-19. En esta situación las medidas de seguridad sí deben extremarse. Lo mismo sucede cuando alguien en la casa trabaja en un hospital. En dichos casos lo mejor es que su ropa de trabajo y sus zapatos estén desinfectados al entrar a un lugar que no ha sido expuesto con el virus.
En el asunto relacionado con la toma de temperatura, que será una medida clave en los colegios, algunos expertos han expresado que no es una medida que por sí sola sea contundente. Nathaniel Beers, médico pediatra del Children’s National Hospital en Washington, que también ha ayudado a asesorar las guías en este sentido, señala que “pensar que se ha hecho suficiente por solo tomar la temperatura solo da una falsa seguridad en las escuelas”.
En conclusión, los expertos reiteran que las medidas que más evitan el contagio son la distancia social de por lo menos un metro, aún en espacios abiertos, el lavado de manos frecuente o el uso de gel en caso de que no estén cerca de un lavamanos y el ponerse el tapabocas bueno, que cubra boca y nariz. Como lo han dicho muchos expertos, eso es lo más cercano a una vacuna por ahora.