Vida Moderna
Hígado graso: cinco remedios caseros para aliviarlo
Antes de ingerir algún remedio, un especialista lo debe autorizar.
Cuando se consumen alimentos o productos de grasas dañinas, algunos órganos suelen acumular toxinas y diferentes sustancias que afectan al organismo. En esta línea, estos elementos malos se suelen retener, en su mayoría, en el colon y el hígado.
Este último -normalmente- contiene algunas cantidades bajas de grasa. Sin embargo, cuando esta sustancia se acumula, se genera una enfermedad a la que se le denomina esteatosis hepática o más conocida como el hígado graso.
Dentro de las muchas funciones que cumple este órgano está la digestión de los alimentos, el almacenamiento de energía y la eliminación de toxinas, por ello, su cuidado es clave para el buen funcionamiento del organismo.
Según el portal Healthline, cuando se acumula demasiada grasa en el hígado puede dañarlo y crear cicatrices. En casos graves, esta cicatrización es posible que ocasione insuficiencia hepática. Cuando este padecimiento se da en una persona que bebe mucho alcohol, se conoce como enfermedad del hígado graso por alcohol.
Tendencias
Las investigaciones sugieren que ciertas afecciones de salud, los genes, la dieta y el aparato digestivo podrían hacer a la persona más propensa a desarrollar este padecimiento cuando no está relacionado con la ingesta de alcohol.
El hígado graso se puede aliviar con algunos remedios caseros que aconseja consumir el portal especializado Tua Saúde:
1. Té verde. “Algunos estudios demuestran que el té verde, conocido científicamente como Camellia sinensis, posee compuestos fenólicos en su composición, como la epigalocatequina, que tiene propiedades antioxidantes, ayudando a disminuir el colesterol malo y los triglicéridos, que pueden acumularse en el hígado y empeorar el grado de hígado graso”, explica el portal.
2. Té de cardo mariano. “Esta planta contiene propiedades astringentes, facilitando la digestión y estimulando el apetito, aliviando síntomas como pérdida de apetito, mareo y vómitos causados por esta enfermedad”.
3. Jugo de melón y menta. “La menta es una planta medicinal muy utilizada para tratar problemas digestivos, ya que posee sustancias amargas que ayudan a revitalizar la salud del hígado y de la vesícula, aliviando síntomas como mareos y la hinchazón abdominal. Además de esto, cuando se añade el melón, resulta en un jugo muy refrescante y sabroso que ayuda a mantener hidratado al organismo. Conozca algunos beneficios del melón para la salud”.
4. Té de fenogreco. El fenogreco “contiene un aminoácido conocido como 4 -hidroxiisoleucina, que permite disminuir los valores de glucosa, colesterol y triglicéridos en la sangre. Por lo que es posible potenciar el efecto del tratamiento médico, aliviando más rápido los síntomas”.
5. Té de albahaca con romero. “El té de albahaca con romero es rico en ácido ursólico y ácido carnósico que tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antiadipogénicas, reduciendo la acumulación de grasa en el hígado”, concluye el portal.
Productos que afectan la salud del hígado
El portal Salud 180 precisa que los siguientes alimentos son agentes dañinos para la salud del hígado, como por ejemplo:
- La sal: la OMS señala que el “elevado consumo de sodio (...) contribuye a la hipertensión arterial y aumenta el riesgo de cardiopatía y accidente cerebrovascular”, lo que no significa que se elimine su consumo, sino que se reduzca. Cuando la presión arterial es alta aumentan las probabilidades de tener hígado graso.
- Bebidas alcohólicas: una de las principales funciones del hígado es descomponer el alcohol que se ingiere; sin embargo, estas sustancias son perjudiciales y alteran su estructura, causando inflamación, asegura Medline Plus.
- Comidas chatarras: el consumo excesivo de este tipo de comidas es perjudicial para el organismo, y por ende, para el hígado, por el tipo de grasas y pocos nutrientes que contienen, lo que ocasiona que este se cargue. Además, estos alimentos inciden en el incremento de los triglicéridos.
- Alimentos azucarados: el azúcar es importante para el cuerpo, no obstante, este se puede obtener de forma natural y no artificial, ya que el segundo puede dañar las células del cerebro, explica el Instituto Nacional del Cáncer. El cuerpo necesita azúcar porque de éste, obtiene energía.