Economía
‘Los nuevos medicamentos aumentan la expectativa de vida de los colombianos’
Un experto en econometría de la Universidad de Columbia encontró el gran impacto que tiene la introducción de medicamentos innovadores en el aumento del tiempo de vida. Este es el caso de Colombia.
La esperanza de vida en Colombia siempre ha ido en aumento. Solo en el periodo entre 1990 y 2015 este índice aumentó 5,9 años, pues al nacer los colombianos pasaron de tener una probabilidad de vida de 68 años a 74,2 en promedio. Siempre se ha dicho que ese aumento tiene que ver con variables sociales como el acceso a infraestructura necesaria para tener buen acueducto y alcantarillado, pero también por el aumento del ingreso per cápita y el nivel de educación de la población. Incluso, se podría pensar que esto sucede porque la gente es más feliz y se sabe que existe una correlación entre felicidad y bienestar.
Sin embargo, según Frank Lichtenberg, profesor de la facultad de negocios de la Universidad de Columbia, la que más impacto tiene de todas es la innovación farmacéutica, es decir, las medicinas nuevas introducidas al país, hayan sido hechas o no en el país. Su tesis es que mientras mayor sea el número relativo de medicamentos lanzados para tratar una dolencia en un país, mayor es el descenso de la mortalidad prematura posterior para la enfermedad en la cual se introdujeron dichas terapias.
Para demostrarlo tomó el periodo comprendido entre 2003 y 2015 y analizó 39 enfermedades de ocho países de Latinoamérica, incluida Colombia, donde hubo 476 nuevas drogas, lo que significa que en estos 33 años se introdujeron 15 drogas al año. “Es una cifra similar a Chile y menor que la de Argentina pero mucho mayor que la de Venezuela”, dice el experto. En general se observó que el aumento de 10 por ciento en el número de medicamentos lanzados da como resultado una reducción de 3,9 en el número de años de vida potencial perdida antes de los 55 años. También se estableció que cada década de innovación farmacéutica redujo la cantidad de años de vida potencial perdida antes de los 70 años por causas naturales en más de 142 para 2013.
Lea también: Medicamentos a la medida
Pero al mirar en profundidad se observa que entre los dos países con números de drogas similares, no siempre se trata de los mismos medicamentos y en el caso de Chile y Colombia, hay diferencias para las 7 enfermedades que se estudiaron. Por ejemplo, en cáncer de próstata, hubo tres medicamentos más lanzados en Colombia que en Chile, pero en otras, como cáncer de mama hubo más nuevos medicamentos lanzados en Chile. “Mi hipótesis fue que esencialmente hay un gran declinar en la mortalidad en Colombia para cáncer de próstata y un declinar más bajo para mortalidad de cáncer mama”, explica el experto.
Aunque el estudio no miró la calidad de vida por falta de datos, Lichtenberg ha realizado este mismo tipo de trabajo en Europa en donde encontró que entre más grande el número relativo de drogas para una enfermedad particular en un país, mayor es la calidad de vida del paciente con esa enfermedad.
Aunque muchos pueden argumentar que esto se debe a mayor crecimiento económico y a mayor ingreso, lo que hace que la gente pueda acudir a tiempo al médico para recibir los cuidados necesarios, Lichtenberg sostiene que la razón es la innovación biomédica, pero en especial las nuevas drogas. Esta hipótesis, sin embargo, tiene detractores, pues muchos hoy consideran que la mayoría de nuevas drogas son metoo, que no se debe confundir con el movimiento de mujeres acosadas sexualmente. Se les llama así porque tienen una estructura química muy similar a otras que ya están en el mercado y no parecen ser mejores que las que ya existen. Sin embargo, según Lichtenberg, otra cosa dicen los estudios económicos. “Hay mucha literatura que señala cómo, en general, los nuevos productos son mejores que los viejos. Un iPad hoy es mejor que el primero. Se mejora la calidad de aeroplanos y automóviles y esto también aplica a las drogas”, dijo a SEMANA.
Le podría interesar: Medicamentos biológicos: un universo por explorar
Muchos economistas como él argumentan que el crecimiento económico siempre ha estado jalonado por el descubrimiento de nuevas ideas. “Estamos mejor hoy que nuestros ancestros porque se han inventado cosas. No es por tener más tierra sino por descubrir nuevas cosas y eso es lo que promueve el crecimiento económico”, dice el científico. Aunque es difícil medir la producción de ideas, en el campo farmacéutico es posible gracias a que cada droga es una.
Con la longevidad sucede lo mismo. En Estados Unidos la expectativa de vida en 1900 era 47 años y hoy es de 78 años, lo que implica un aumento de 30 años en un siglo. Lichtenberg ha demostrado con estudios que tienen en cuenta enfermedades específicas como el mieloma múltiple, un tipo de cáncer para el cual no hubo una nueva droga en 25 años, es decir entre 1973 y 1999. Sin embargo, la aparición de cinco nuevos medicamento innovadores marcó una gran diferencia pues desde entonces “incrementó la supervivencia por esta enfermedad dramáticamente”.