La bebida que ayuda a fortalecer los huesos y el sistema inmunológico

Puede que algunos hayan escuchado del kéfir, pero puede que otros tantos no y aún no tengan conocimiento de los múltiples beneficios que tiene este producto sin lactosa que cada vez toma más fuerza.

Para los que no lo conocen, la Asociación de Intolerantes a la lactosa lo explica de la siguiente forma: “Es una bebida de leche fermentada hecha con ‘granos’ de inicio, que en realidad son una combinación de bacterias y levaduras que interactúan con la leche para hacer una bebida ligeramente fermentada que incluso las personas intolerantes a la lactosa pueden beber. Se puede hacer de cualquier tipo de leche, como cabra, oveja, vaca, soja, arroz o coco”.

Según explica dicho portal, los granos de kéfir de leche tienen una mezcla “simbiótica microbiana de bacterias del ácido láctico y levaduras en una matriz de polisacáridos y proteínas”.

Hablando un poco de su origen, el mencionado portal expone que esta bebida ha sido utilizada durante millones de años en diferentes partes del mundo. Su nombre viene “de la palabra turca keyif , o ‘sentirse bien’, kéfir proviene de las montañas del Cáucaso de Europa del Este”.

“Se cree que los pastores de ovejas fermentaron accidentalmente la leche en sus matraces de cuero. La potencia y los poderosos efectos de la mezcla pronto se extendieron por las tribus y luego fueron recogidos por médicos rusos, quienes se enteraron de sus legendarios beneficios curativos y los utilizaron para ayudar a tratar enfermedades como la tuberculosis en el siglo XIX”.

La ventaja de los que son intolerantes a la lactosa lo puedan consumir no lo es todo, pues esta bebida que sabe como a yogur, pero no es yogur, tiene numerosas propiedades que ayudan para diversas afecciones que se pueden padecer por diversas razones.

El mencionado portal, que hace parte del LIGN que por sus siglas en inglés es la Lactose Intolerance Global Network, expone que el kéfir tiene:

“Muchos compuestos y nutrientes, como la biotina y el folato, que ayudan a poner en marcha su sistema inmunológico y proteger sus células. Contiene grandes cantidades de probióticos kéfir, las fuerzas especiales del mundo microbiano”.

“Una cepa probiótica de kéfir en particular que es específica de kéfir solo se llama Lactobacillus Kefiri , que ayuda a defenderse contra bacterias dañinas como la salmonela y la E. Coli . Esta cepa bacteriana, junto con varias otras, ayuda a modular el sistema inmunológico e inhibe el crecimiento de bacterias dañinas”, expone la LIGN.

Otras de las cosas que lo hace único es “un polisacárido insoluble llamado kefiran que ha demostrado tener propiedades antimicrobianas, que pueden combatir la cándida. Kefiran también ha demostrado la capacidad de reducir el colesterol y la presión arterial”.

Además, posee propiedades como magnesio, calcio, vitamina K2, la vitamina B12, la biotina, enzimas o folato.

El kéfir ayuda a fortalecer los huesos y el sistema inmunológico

Uno de los grandes beneficios es que puede ayudar a prevenir enfermedades como la osteoporosis. Esta se entiende, según Medline Plus, como “una enfermedad que adelgaza y debilita los huesos. Sus huesos se vuelven frágiles y se quiebran fácilmente, especialmente los de la cadera, espina vertebral y muñeca. En Estados Unidos, millones de personas padecen osteoporosis o están en alto riesgo debido a baja densidad ósea”.

Debido a sus propiedades, el kéfir tiene un alto contenido de calcio y de la vitamina K2 que puede ayudar a fortalecer los huesos y prevenir el deterioro de los mismos.

Por otro lado, entre sus beneficios aparece que puede fortalecer el sistema inmunológico debido a nutrientes. De acuerdo con Medline, el “sistema inmunitario es una compleja red de células, tejidos y órganos. Juntos ayudan a su cuerpo a combatir infecciones y otras enfermedades”.

El kéfir tiene nutrientes como la biotina y su alto contenido de prebióticos fortalece el cuerpo y lo ayuda a combatir enfermedades.