La especia medicinal que disminuye el colesterol y ayuda a aliviar los síntomas de la artritis

La cúrcuma es una especia de color naranja, conocida por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. De acuerdo con el portal Healthline, la curcumina es el principal componente activo de esta especia.

La cúrcuma ayuda a prevenir enfermedades como el cáncer. Asimismo, se demostró en un estudio de Oxidative Medicine and Cellular Longevity que tiene un importante efecto en reducir la probabilidad de padecer enfermedades relacionadas con la inflamación cerebral, como el alzhéimer y la demencia.

En cuanto a su consumo, se recomienda que sea en forma de té, ya que a través de esta infusión se aprovecha más la curcumina y, de acuerdo con el portal Mejor con Salud, se pueden obtener los siguientes beneficios para la salud del organismo. Sin embargo, antes de ingerirla, lo mejor será consultar con un profesional de la salud.

Disminuye el colesterol

El colesterol es una sustancia que le permite al cuerpo producir células sanas. No obstante, cuando se eleva, se corre el riesgo de que se formen depósitos en los vasos sanguíneos. Esto puede generar problemas cardiacos y accidentes cerebrovasculares.

Según Nutrition Journal, la cúrcuma disminuye los niveles de colesterol y triglicéridos en pacientes con este problema, debido a su efecto cadioprotector.

Alivia los síntomas de la artritis

En un estudio publicado por Springer Plus, señala que la curcumina podría ser eficaz para reducir los dolores en pacientes con osteoartritis. Esta afección se produce cuando el cartílago se va deteriorando de manera gradual, provocando así daños en el hueso.

¿Cómo preparar el té de cúrcuma?

Ingredientes:

• Dos tazas de agua (400 ml).
• Una cucharada de cúrcuma (6 gr).
• Miel (opcional).
• Jengibre (opcional).

Preparación:

• Verter las dos tazas de agua en una olla y colocarla a fuego alto.
• Una vez esté hirviendo, bajar la temperatura a fuego medio bajo.
• Acto seguido, añadir la cucharada de cúrcuma y revolver bien.
• Añadir dos rebanadas de jengibre.
• Dejar por diez minutos a fuego lento.
• Colar en un recipiente.
• Añadir una cucharada de miel y consumir.

Tres mascarillas de cúrcuma para lucir una piel sana

Los cambios en el clima, la exposición a la luz solar y la polución ambiental son agentes nocivos que afectan la salud de la piel. Por esta razón, es importante revisarla de manera permanente y tomar diversas medidas para su cuidado y protección.

Una de las mejores formas de cuidarla es bebiendo suficiente agua a lo largo del día, pues el cuerpo necesita reponer los líquidos que pierde, por lo que la recomendación es tomar entre dos y tres litros diariamente. Este líquido ayuda a que el organismo funcione bien.

La alimentación es clave para nutrir e hidratar la piel. Las proteínas, vitaminas y minerales que aportan los alimentos permiten cuidarla desde adentro y evitar posibles afectaciones.

Asimismo, muchos acuden a mascarillas naturales. Por ejemplo, el portal Cocina Vital da a conocer tres a base de cúrcuma, debido a sus efectos antiinflamatorios y antioxidantes.

Cúrcuma y menta

Ingredientes:

• Una cucharada de cúrcuma en polvo.
• Dos cucharadas de infusión de menta.

Preparación y modo de uso:

• Agregar los dos ingredientes en un recipiente.
• Revolver hasta obtener una pasta.
• Aplicar la mascarilla y dejarlo actuar durante 30 minutos.
• Enjuagar con agua tibia.
• Utilizar tres veces por semana.

Cúrcuma y miel de abeja

Ingredientes:

• Una cucharada de cúrcuma en polvo.
• Dos cucharadas de miel de abeja.

Preparación y modo de uso:

• Agregar los dos ingredientes en un recipiente.
• Revolver hasta obtener una mezcla homogénea.
• Aplicarlo sobre la piel y dejar reposar por 20 minutos.
• Enjuagar con agua tibia.
• Aplicar tres veces por semana.

Cúrcuma y aceite de coco

Ingredientes:

• Tres cucharadas de aceite de coco.
• Una cucharada de cúrcuma en polvo.

Preparación y modo de uso:

• Agregar los dos ingredientes en un recipiente.
• Revolver hasta obtener una pasta.
• Aplicar la mascarilla y dejar reposar por 15 minutos.
• Enjuagar con agua a temperatura.
• Repetir el proceso una vez a la semana.