La falta de esta vitamina puede generar cansancio y fatiga

Algunos pacientes suelen presentar cansancio y fatiga sin razón aparente, cuando esto sucede es pertinente determinar qué puede estar influyendo en la aparición de estos síntomas y validar si hay una enfermedad o deficiencia de alguna vitamina y nutriente detrás.

La vitamina D es un compuesto que no es producido de manera natural por el cuerpo y debe obtenerse por medio de la alimentación; sin embargo, hay alimentos que la contienen, pero en bajas cantidades bajar, es por esto que la manera más óptima de adquirirla es por medio de la exposición al sol, de esta manera el organismo logra producirla de manera natural.

Este nutriente es fundamental para que el cuerpo pueda absorber de manera correcta el calcio, lo que indica que su carencia puede conducir a una pérdida progresiva de densidad ósea y provocar enfermedades que afectan a los huesos.

La carencia de este compuesto no solo puede afectar la salud del los huesos, sino que también puede generar cansancio y debilidad en el paciente que no cuenta con los niveles adecuados de esta sustancia dentro de su organismo.

Para determinar la cantidad de vitamina D de una persona y saber si tiene una deficiencia o no, el profesional puede tomar una muestra de sangre para validar si los síntomas y las somnolencias están relacionados con la carencia de este nutriente.

Síntomas de deficiencia de vitamina D

Según la biblioteca de salud y medicina de los Estados, Medline Plus, la deficiencia de vitamina D es muy común y afecta alrededor del 60 % de la población adulta. Cuando esto sucede, el profesional de la salud suele recetar suplementos o vitaminas que contengan este compuesto.

El portal de salud, belleza y cuidado personal Hogar Manía menciona cuáles son los síntomas de la deficiencia de este compuesto. Antes de consumir este nutriente por medio de un suplemento hay que contar con la aprobación de un profesional de la salud y este debe determinar antes de formularlo si hay una carencia de esta vitamina o no.

• Fatiga y cansancio: niveles bajos de este compuesto suelen generar que el paciente se siente cansado y fatigado con frecuencia, incluso si ha dormido bien. Este también pude ser el síntoma de enfermedades que están relacionados con la glándula tiroidea, por ende hay que consultar con un profesional de la salud para que se sepa a ciencia cierta que está detrás del síntoma.
• Dolor en los huesos y pérdida ósea: los pacientes que tienen carencia de vitamina D suelen presentar afecciones en los huesos tales como debilidad y dolor en la zona. “Cuando los niveles de vitamina D no se regulan, se produce una pérdida ósea progresiva. Sufren mayor riesgo de pérdida ósea las personas con edad avanzada, en especial las mujeres, las cuales son propensas a sufrir fracturas”.

• Ser propenso a las infecciones: la vitamina D mantiene el sistema inmune fuerte y alerta ante el ataque de cualquier virus y bacteria, al hacer un déficit, las personas suelen enfermarse con mayor frecuencia, sobre todo de afecciones que afectan al sistema respiratorio.
• Las heridas cicatrizan de manera lenta: las personas que tienen insuficiencia de vitamina D suelen dura más del tiempo previsto para sanar una herida luego de una caída o cortadura.
• Ser más propensos a padecer de depresión: “la vitamina D es conocida mundialmente como la vitamina de la felicidad. Y diversos estudios han demostrado que existe una estrecha relación entre los valores bajos de vitamina D y la depresión”.

Alimentos que contienen vitamina D

• Los pescados grasos como la trucha, el salmón, el atún y la caballa aportan vitamina D.
• También los aceites de hígado de pescado, el hígado, la yema de huevo y el queso contienen cantidades pequeñas de esa vitamina.
• Además, los champiñones aportan algo de este componente y algunos productos lácteos, como la leche de almendra.