Frutos rojos, cerezas, fresas, moras, arándanos, uvas, frambuesas
Las fresas ofrecen una serie de beneficios para la salud. | Foto: Getty Images

SALUD

La fruta que ayuda a prevenir la anemia, el colesterol y el cáncer

Este alimento es rico en vitaminas, minerales y antioxidantes.

6 de septiembre de 2022

La fresa es una de las frutas más conocidas y versátiles, que brinda una importante variedad de beneficios para la salud. Es rica en antioxidantes y minerales, tiene vitaminas C, B2, B3 y ácido fólico, contiene fibra, cerca del 90 % es agua y es baja en azúcar.

Este fruto destaca, además, por sus propiedades diuréticas, antiinflamatorias y depurativas. También gracias a sus flavonoides, ayudan a combatir el estrés oxidativo y el deterioro cognitivo, según asegura una publicación del portal Mejor con Salud, escrita por Daniela Echeverri Castro.

Las fresas son bajas en calorías y contienen buenas cantidades de agua y fibras que ayudan a aumentar la sensación de saciedad entre comidas, además de equilibrar los niveles de azúcar en la sangre, siendo una fruta ideal para utilizar en las dietas para bajar de peso, asegura el portal de bienestar y salud Tua Saúde.

El portal Cuerpo Mente, por su parte, indica que las fresas son especialmente ricas en hierro y magnesio. “En 200 gramos de fresas hay un 17 % de hierro y un 9 % de magnesio. También aporta potasio, calcio, fósforo, manganeso, cobre y silicio, por lo que es un alimento muy indicado en curas de remineralización y en el tratamiento de déficits nutricionales”.

El verdadero problema del colesterol | Carlos Jaramillo

En cuanto a vitaminas, este sitio web, dice que 200 gramos cubren más del 200 % de las necesidades diarias de vitamina C, una tercera parte de la vitamina K, la sexta parte del ácido fólico y cantidades notables de vitaminas del grupo B.

Dadas sus diversas propiedades y compuestos, esta fruta ayuda a prevenir una serie de afecciones de salud. Una de ellas es el cáncer. La fresa contiene una importante cantidad de fitoquímicos bioactivos, como los polifenoles, lignanos y triterpenoides, que tienen propiedades anticancerígenas, ya que actúan contra los daños resultantes del estrés oxidativo y la inflamación, asegura Tua Saúde. De igual forma, ayuda a controlar el crecimiento y desarrollo de células cancerosas.

Un artículo publicado en el medio digital Business Insider indica que la investigación sugiere que estas frutas pueden ayudar a prevenir cánceres como el de mama o el de ovarios, entre otros. “Un estudio encontró que las fresas eran capaces de inhibir células de cáncer de hígado humano, aunque no fue probado en personas, sino en ensayo sobre cultivo”, indica la citada fuente.

Aunque falta mayor evidencia científica, lo que sí es claro es que la elevada carga de antioxidantes de estas frutas hace que sean beneficiosas para el organismo y más si se incluyen en una dieta saludable y acompañada de la práctica de ejercicio regular.

Crunch de frutas: Un desayuno saludable | Jenny Camacho en Postres Saludables - Semana Play

Contra la anemia

Debido a su alto contenido de hierro, las fresas son ideales para evitar que las personas se enfermen de anemia. Además, son ricas en ácido fólico el cual favorece la multiplicación de las células y es clave para la formación de glóbulos rojos y para prevenir, sobre todo, la anemia perniciosa. Esta afección se desarrolla cuando las células del estómago no producen suficiente proteína ocasionando una inadecuada absorción de la vitamina B12.

Ayuda a regular el colesterol

Otro de los beneficios de las fresas es que ayudan a regular el colesterol y los triglicéridos, gracias a su importante contenido de fibra. Según una investigación publicada en International Journal of Environmental Research and Public Health, la fibra ayuda a reducir la absorción del colesterol y triglicéridos.

Es de recordar que los triglicéridos son el tipo de grasa más abundante en el cuerpo. Funcionan como reserva energética, que el organismo consume cuando lo requiere. Si los triglicéridos están muy elevados, la persona puede padecer de enfermedades cardiovasculares. Las calorías consumidas a través de los alimentos y que no se transforman en energía terminan convertidas en triglicéridos.