Vida Moderna
La fruta que fortalece los dientes, los huesos y previene el exceso de grasa en el hígado
El consumo de fruta es fundamental en la alimentación humana, puesto que contienen propiedades saludables para el organismo.
Consumir fruta con regularidad aporta un sin fin de beneficios al cuerpo humano. En concreto, las mandarinas son una opción ideal, ya que además de tener un sabor delicioso, proporcionan beneficios para la salud.
Beneficios de consumir mandarina
Las mandarinas cuentan con muchas propiedades efectivas para el bienestar del cuerpo. Esta fruta cuenta con vitamina C, un suplemento esencial en la formación de los vasos sanguíneos, músculos, cartílagos y colágeno. Además, tiene un alto contenido en agua y una cantidad importante de minerales y vitaminas como la A, B1, B2 y C.
Algunos nutriólogos recomiendan ingerir dos o tres piezas de mandarina al día, ya que ayuda a prevenir resfriados, gripes e infecciones. De hecho, es una fruta imprescindible para muchos deportistas ya que pueden ser beneficiosas después de realizar esfuerzo físico.
Su consumo también contribuye a la absorción del hierro y al mantenimiento de los dientes y los huesos. Otro beneficio que a veces se tiende a olvidar es su capacidad para proteger a las personas de las radiaciones del sol o al humo del tabaco, por lo que el consumo de las mandarinas pueden contribuir a tener una vida más saludable.
Tendencias
Se trata de una sustancia perfecta para el correcto funcionamiento de algunos órganos como los riñones, el corazón, pero también para los músculos, la transmisión nerviosa y el flujo sanguíneo. Cabe destacar que debido a su alto contenido de agua, favorece la estabilización del azúcar en la sangre y a prevenir el exceso de grasa en el hígado.
Entre los muchos beneficios de consumir mandarina, es importante resaltar la capacidad de este alimento para disminuir el colesterol malo y aumentar el bueno, además de contener propiedades anticancerígenas. Por ello, es aconsejable, consumir esta fruta durante los meses de invierno y poco soleados, ya que puede estimular la formación de anticuerpos.
Fruta aliada de las defensas frente a ala gripe
De acuerdo con la medicina tradicional china, la mandarina es consideraba una materia de primer orden para conservar la salud. Teniendo en cuenta, que refuerzan el sistema inmunológico.
Para fortalecer las defensas, es recomendable tomar cuatro mandarinas diarias. Este es un buen complemento antioxidante que estimula las defensas, sobre todo gracias a su riqueza en vitamina C, que ayuda a prevenir gripes y resfriados.
Combate la anemia
El consumo frecuente de vitamina C aumenta la absorción del hierro aportado por otros alimentos vegetales y favorece la producción de glóbulos rojos. Por eso se recomienda a las personas con anemia, un problema especialmente frecuente entre las mujeres en edad fértil.
Refuerza el sistema cardiovascular
Su riqueza en potasio actúa como diurético natural, mientras que flavonoides como la hesperidina protegen las paredes de los vasos sanguíneos, y la pectina ayuda a reducir el colesterol perjudicial (LDL). De esta manera reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Evita el estreñimiento
La mandarina es fuente natural de fibra, que se encuentra en la pulpa blanca que hay debajo de la piel y entre los gajos. Esta sustancia estimula el movimiento intestinal y reduce la absorción de grasas y sustancias tóxicas.
Recomendable para el consumo de embarazadas y deportistas
El ácido fólico y la vitamina C son imprescindibles en los procesos de división celular de los primeros meses de gestación. Adicionalmente, la variedad de nutrientes de esta fruta ayuda a reponer el líquido y los minerales perdidos tras el ejercicio.
Elimina el Ácido Úrico
Por último, el elevado contenido en agua, potasio y ácido cítrico de esta fruta producen un efecto diurético que favorece la eliminación del ácido úrico y sus sales. Además de alcalinizar la orina e inhibir la aparición de infecciones en las vías urinarias.
Vitaminas para fortalecer huesos y dientes
Además de las mandarinas y otras frutas que aportan una serie de nutrientes beneficiosos para los huesos y los dientes, potenciar la cantidad de determinadas vitaminas en el organismo es clave para fortalecerlos. Poe ejemplo, la vitamina D es determinante debido a que le ayuda al cuerpo a absorber el calcio, una de las principales sustancias necesarias para tener huesos fuertes.
Junto con el calcio, la vitamina D contribuye a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que hace que los huesos se vuelvan más delgados y débiles y sean más propensos a sufrir fracturas, explica National Institutes of Health.
Es determinante también para la salud de los dientes, pues además de aumentar la densidad mineral con el calcio, también ayuda a absorber, transportar y depositarlo en los huesos que sostienen estas piezas bucales. Los expertos indican que el 99 % del calcio que existe en el organismo se encuentra en los huesos y dientes y el 1 % restante está en la sangre, en el líquido extracelular y en el tejido adiposo.
Alimentos con vitamina D
Son muy pocos los alimentos que contienen esta vitamina en forma natural. Los productos fortificados con vitamina D aportan la mayor parte la misma. Los pescados grasos, como la trucha, el salmón, el atún y la caballa, así como los aceites de hígado de pescado, se encuentran entre las mejores fuentes naturales de vitamina D.
Ricos en calcio
Entre tanto, la biblioteca médica Medlineplus, indica que las mejores fuentes de calcio son la leche y los productos lácteos. Por eso es recomendable ingerir yogures, quesos y suero de leche. Los adultos deben escoger leche descremada o baja en grasa y otros productos lácteos reducidos en grasa. “El hecho de extraer parte de la grasa no disminuye la cantidad de calcio en un producto lácteo”, asegura este sitio web.
Además de los lácteos, este mineral puede hallarse en otros alimentos como las hortalizas de hoja verde tales como el brócoli, la col rizada, la berza común, la mostaza verde, las acelgas y el bok choy (repollo chino). De igual forma, en el salmón y las sardinas que vienen enlatadas con sus huesos, las almendras, las nueces de Brasil, las semillas de girasol, la tahina (pasta de ajonjolí o sésamo) y las legumbres secas.
Otras vitaminas
Además de la D, hay otras vitaminas que son clave para fortalecer la estructura ósea y los dientes. La vitamina A ayuda a mantener sanas las encías y mineralizar el esmalte dental. También previene la boca seca y ayuda a cicatrizar rápidamente cualquier herida. La mayoría de los alimentos con vitamina A son de color naranja, por lo que es fácil recordar que las mandarinas, albaricoques, calabazas y las zanahorias son potenciales alimentos de vitamina A.
La vitamina K, por su parte, actúa como un escudo ya que ayuda a bloquear las sustancias que descomponen los huesos. Ésta se puede encontrar en verduras de hoja verde, como la col rizada, las acelgas y las espinacas.
Por último, la vitamina C fortalece las encías y las mucosas de la boca. Protege contra la gingivitis, la etapa temprana de la enfermedad de las encías, y puede evitar que los dientes se aflojen. Los cítricos son ricos en vitamina C, pero también puede encontrarse en verduras de hoja verde.