La fruta que retrasa el envejecimiento, mejora la circulación de la sangre y protege contra el cáncer

Tener una dieta balanceada rica en frutas y verduras es importante para mantener el buen funcionamiento del cuerpo y evitar el desarrollo de enfermedades como el colesterol alto y la hipertensión.

Por esto, identificar las frutas más favorables para la salud e incluirlas en un plan de alimentación es eficaz para obtener cada uno de sus beneficios, como por ejemplo, las uvas, que en la diversidad de sus presentaciones, se destaca por estar compuesta de antioxidantes y antiinflamatorios.

De acuerdo con el portal de salud Tua Saúde, las uvas están compuestas de resveratrol “una sustancia química que se encuentra principalmente en las uvas rojas”. Los productos elaborados con ellas son el vino tinto y algunos jugos, explica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus, que asegura que pueden ayudar en la pérdida de peso, incluso en la prevención de cáncer.

No obstante, las uvas de color verde son ricas en clorofila, una sustancia que se caracteriza por darle color verde a los alimentos y la plantas, que tiene propiedades de igual manera que la uva roja antiinflamatorias y antioxidantes.

Las uvas combaten el envejecimiento y previenen el cáncer

Como se mencionó anteriormente, otro de los beneficios del consumo de uvas es la reducción de las probabilidades del desarrollo de cáncer, porque los ácidos fenólicos y los flavonoides, funcionan como bioactivos que pueden combatir los radicales libres que deterioran las células del cuerpo, evitando incluso la aparición de arrugas y contrarrestando el envejecimiento prematuro.

Entre las enfermedades a destacar que evita el consumo de uva están el cáncer de piel, próstata y mama, considerados los más comunes, según la Organización Mundial para la Salud (OMS), que señala que el cáncer fue la causa principal de muerte en el 2020, cobrando por lo menos casi 10 millones de vidas.

Además, el consumo de uva -ya sea verde o roja- puede contribuir a la mejora de la circulación, favoreciendo diferentes capacidades cognitivas como la memoria, ya que reduce la inflamación del cerebro, incluso incide en el estado de ánimo de una persona, asegura el sitio web.

También se ven beneficiados los huesos gracias a la vitamina K que la componen, porque participa en el aumento de calcio, mismo que combate la osteoporosis, que según la Clínica Mayo es una enfermedad que afecta los huesos, debilitándolos, causando fracturas por leves movimientos. La entidad explica que estas lesiones son recurrentes en las muñecas, la columna vertebral y la cadera.

Cabe destacar que su efecto antioxidante favorece la salud ocular, evitando la aparición de cataratas, que son “una opacidad del cristalino normalmente transparente” en el ojo, informa la Clínica.

Beneficios de la uva y el vino tinto

La institución de salud también explica que el consumo moderado de vino tinto puede prevenir enfermedades cardíacas. Tal y como se señaló anteriormente, uno de sus componentes más efectivos es el resveratrol (compuesto de la uva) que protege los vasos sanguíneos. Este antioxidante llamado polifenol, que, de acuerdo con la entidad de salud e investigación, contribuye en la salud del organismo.

Alimentos como los arándanos, el maní, tienen una cantidad de resveratrol que puede causar los mismos efectos que el consumo de uvas. Sin embargo, a ciencia cierta, no se conoce hasta el momento si los efectos son los mismos que tiene el resveratrol en la bebida.

Por ejemplo, entre los beneficios que tiene el vino tinto es que ayuda a cuidar las arterias gracias a su efecto antioxidante, ayudando al flujo de la sangre hasta la prevención de la formación de coágulos que se forman por la falta de ejercicio, asegura Mejor con Salud.

En conclusión, es importante destacar que la ingesta de vino debe ser moderada, ya que el alcohol es un factor de riesgo para el desarrollo de cualquier tipo de enfermedades.