La grave enfermedad que produce la ausencia de esta vitamina en el cuerpo

La vitamina B12, que pertenece a uno de los 8 tipos que pertenecen al complejo B, es un nutriente importante para el organismo, especialmente para el metabolismo de las proteínas, la formación de glóbulos rojos en la sangre y el mantenimiento del sistema nervioso central.

De acuerdo con Mayo Clinic, la deficiencia de este componente puede causar varios síntomas negativos en el organismo, debilidad muscular, problemas intestinales, daño en los nervios y trastornos del estado de ánimo. Además, puede provocar una anemia.

“La vitamina B-12 (cobalamina) tiene un papel esencial en la formación glóbulos rojos, el metabolismo celular, la función nerviosa y la producción de ADN (las moléculas dentro de las células que llevan información genética)”, indicó inicialmente.

Luego, la entidad sanitaria añadió: “Los adultos mayores y las personas con afecciones del tracto digestivo, que afectan la absorción de nutrientes, también son susceptibles a la deficiencia de la vitamina B12″.

National Heart, Lung and Blood Institute, de igual manera, indicó que la anemia es una enfermedad que se desarrolla cuando la sangre produce una cantidad inferior a la normal de glóbulos rojos sanos, los cuales contienen una proteína llamada hemoglobina, que transporta oxígeno desde los pulmones a todas las partes del cuerpo.

Adicionalmente, las personas que tienen una alimentación vegetariana tienen un riesgo alto de padecer esta deficiencia. Asimismo, la cantidad de vitamina B12 que necesita cada persona varía de la etapa de la vida en la que se encuentre.

Lactantes (IA)

• 0 a 6 meses: 0.4 microgramos por día (mcg/día)
• 7 a 12 meses: 0.5 mcg/día

Niños (CDR)

• 1 a 3 años: 0.9 mcg/día
• 4 a 8 años: 1.2 mcg/día
• 9 a 13 años: 1.8 mcg/día

Adolescentes y adultos (CDR)

• Hombres y mujeres de 14 años en adelante: 2.4 mcg/día
• Mujeres y adolescentes embarazadas: 2.6 mcg/día
• Mujeres y adolescentes lactantes: 2.8 mcg/día

Síntomas de la anemia por falta de vitamina B12

• Cansancio frecuente.
• Palidez de la piel, encías y en la parte interna del ojo.
• Falta de apetito.
• Problemas de memoria o dificultad para concentrarse.
• Ganas de comer cosas que no son comestibles, como ladrillos o tierra.
• Mareos.
• Alteración de los latidos cardíacos, en algunos casos.
• Falta de disposición.
• Dolor de cabeza constante.
• Debilidad de las uñas y el cabello.

Cuando estos síntomas se presentan, el cuerpo no produce suficientes glóbulos rojos, los cuales contiene hemoglobina, una proteína rica en hierro que ayuda a transportar el oxígeno de sus pulmones al resto de su cuerpo.

Es importante que en caso de contar con alguna de estas dolencias se consulte a un doctor los más pronto posible, para trabajar en estos factores de riesgo y evitar esta deficiencia.

Finamente, es de gran relevancia no autodiagnosticarse ni automedicarse. No es recomendable consumir suplementos multivitamínicos sin la supervisión de un profesional, ya que se puede poner en riesgo la salud.

Los expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) señalan varios consejos que pueden ayudar a tener una alimentación saludable. Es importante visitar a un nutricionista y seguir las instrucciones y el plan de comidas señalado.