Vida Moderna
La hierba aromática que equilibra el colesterol y baja el azúcar en la sangre
La salvia ofrece una variedad de aplicaciones para la salud, convirtiéndola en un tesoro en cualquier hogar.
Entre las maravillas del reino vegetal destaca la salvia, con sus flores de un radiante violeta y su aroma característico que la hace inconfundible. La revista Elsevier relata que es originaria del Mediterráneo y forma parte de la familia de las lamiáceas, compartiendo espacio con el orégano, la albahaca y la menta.
La versatilidad de la salvia la ha convertido en una aliada en la cocina, la cosmética y en la medicina natural. Precisamente, esta última función le da su nombre, que proviene de las palabras latinas “salus” y “salvare”, que significan salud y salvar, destacando sus bondades para el cuerpo.
Una sola cucharada de salvia, equivalente a 1 gramo, según el portal Nutrición y Farmacia, contiene los siguientes nutrientes:
- Energía: 3,15 kcal
- Proteínas: 0,11 g
- Grasas: 0,13 g
- Fibras: 0,4 g
- Carbohidratos: 0,61 g
- Vitamina K: 17,15 mg
- Vitaminas B6: 2,69 mg
- Calcio: 16,5 mg
- Magnesio: 4,28 mg
- Hierro: 0,28 mg
Examinemos en detalle las propiedades medicinales de esta planta. En el mundo de la medicina tradicional, la salvia ha encontrado su lugar. A medida que se comprenden sus beneficios para la humanidad, su valor como planta medicinal sigue creciendo.
1. Alivio de los síntomas de la menopausia: gracias a sus propiedades termorreguladoras, la salvia puede controlar las terminaciones nerviosas de las glándulas sudoríparas. Para el portal Nutrición y Farmacia, es una opción para las mujeres en la menopausia que luchan con sofocos y sudor excesivo, aliviando estos síntomas y otros indicios de la deficiencia de estrógeno.
2. Poderoso antiinflamatorio: tanto la Agencia Europea del Medicamento como la Cooperativa Científica Europea de Fitoterapia respaldan el uso de la salvia para tratar inflamaciones bucales y de garganta, como gingivitis y faringitis. Se utiliza en forma de gárgaras para tratar problemas bucofaríngeos como anginas y dolores de muelas.
3. Mejora la digestión: la salvia es un remedio natural para la acidez estomacal, la hinchazón abdominal, las flatulencias, los vómitos y los dolores estomacales de la gastritis o hernias de hiato.
4. Regula los niveles de glucosa en la sangre: gracias a sus propiedades hipoglucemiantes, la salvia puede ayudar a los pacientes diabéticos a mantener controlados sus niveles de glucosa. Sin embargo, siempre es prudente buscar la orientación médica antes de su consumo.
Además de los beneficios mencionados, el portal Mejor con Salud afirma que la salvia es conocida por su acción antiinflamatoria, propiedades antisépticas, antiespasmódicas, analgésicas, antibióticas y expectorantes. También tiene un efecto relajante y ansiolítico, además de actuar como antioxidante.
Cómo incorporar la salvia
En la cocina, su aroma encantador y su sabor robusto la convierten en un complemento ideal para asados, salsas de tomate y sopas. En el ámbito de la medicina, sus usos son aún más diversos según lo expone el portal Nutrición y Farmacia:
- Infusión de salvia: ideal para eliminar toxinas, aliviar problemas hepáticos, indigestión y acidez estomacal. Se recomienda después de las comidas.
- Aceite de salvia: puede ser un aliado para curar cortes o lesiones en la piel, regular el pH, cuidar la tonicidad y elasticidad de la piel, y tratar inflamaciones.
- Té de salvia: los beneficios del té de salvia están vinculados a sus propiedades astringentes, antisépticas y antiinflamatorias, haciéndolo eficaz para aliviar las molestias de garganta y calmar la tos.
- Complementos alimenticios: muchas mujeres recurren a suplementos de salvia para aliviar los síntomas menopáusicos.
El uso de la salvia está en aumento debido a sus numerosos beneficios. Sin embargo, es importante recordar que, aunque sea natural, es sabio consultar a un profesional de la salud para considerar sus ventajas y desventajas en su situación personal.