Salud

La hierba que regula la presión arterial alta, mejora la circulación y ayuda a desinflamar

Mantener una hidratación adecuada es esencial para que el organismo funcione bien.

15 de noviembre de 2022
El té de tila es una fuente de colágeno y vitamina C. Foto: Getty Images.
El té de tila es una fuente de colágeno y vitamina C. | Foto: Foto: Getty Images.

“La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias al ser bombeada por el corazón. La presión arterial es más alta cuando el corazón se contrae, bombeando la sangre, y se denomina presión sistólica. Cuando el corazón está en reposo, entre latidos, la presión arterial baja y es llamada presión diastólica”, explican desde la Fundación Española del Corazón.

Por su parte, la circulación es el proceso mediante el cual el corazón bombea la sangre de una persona alrededor del cuerpo. A medida que la sangre circula, distribuye oxígeno y nutrientes a las células y elimina los desechos, por lo que resulta vital para cualquier persona. Una mala circulación puede desembocar en diferentes enfermedades.

Asimismo, es frecuente que muchas personas se sientan inflamadas o hinchadas y en ocasiones esto se presenta como consecuencia del agrandamiento de órganos, de la piel u otras partes del cuerpo, normalmente ocasionado por la acumulación de líquidos en los tejidos, pero también puede ser la respuesta a alguna infección por bacterias, hongos o virus.

Según la comunidad médica, todas las personas deben prestarle atención a las condiciones anormales de las tres características mencionadas anteriormente porque, a partir de estas, se pueden presentar otras afecciones graves para la salud.

Con respecto a lo anterior, el portal Gastrolab recomienda el consumo de una hierba, en especial que ayuda regular la presión arterial alta, mejora la circulación y ayuda a desinflamar.

En este sentido, la planta en cuestión es la tila y cuando se consume en té, favorece la reducción de la presión arterial, especialmente en los casos en que es sistólica. También, gracias a su efecto relajante, hace lento el ritmo cardíaco, lo cual mejora la circulación sanguínea.

Además, gracias a que el té de tila es rico en flavonoides, esto ayuda a contrarrestar los radicales libres y favorece la desinflamación de distintos tejidos.

Presión arterial alta: prevención y tratamiento

Si ya se ha recibido un diagnóstico de hipertensión, el paso a seguir consiste en consultar al médico sobre qué cambios en el estilo de vida se deberían adoptar, así mismo, determinar si es necesario consumir algún medicamento.

La Organización Mundial para la Salud (OMS) destaca que reducir la hipertensión previene infartos, accidentes cerebrovasculares y daños renales, además de otros problemas de salud.

En ese sentido, detalla las siguientes recomendaciones para prevenir eventuales problemas de presión arterial:

  • Reducir la ingesta de sal (a menos de 5 g diarios).
  • Consumir más frutas y verduras.
  • Realizar actividad física con regularidad.
  • No consumir tabaco.
  • Reducir el consumo de alcohol.
  • Limitar la ingesta de alimentos ricos en grasas saturadas.
  • Eliminar/reducir las grasas trans de la dieta.

Respecto a cuáles hábitos adquirir para controlar la hipertensión y evitar complicaciones de salud, la OMS sugiere reducir y gestionar el estrés, medir periódicamente la tensión arterial y tratar otros trastornos que pueda presentar la el paciente.

Causas por las que se sufre de hipertensión arterial:

Respecto a los motivos de la hipertensión, existen varios factores que pueden afectar la presión arterial. Por ejemplo:

  • La cantidad de agua y de sal presentes en el cuerpo.
  • El estado de los riñones, el sistema nervioso o los vasos sanguíneos.
  • Los niveles hormonales.

Medline Plus, la Biblioteca de Medicina de EE. UU., también recoge que las personas son más propensas a desarrollar problemas de presión a medida que se envejece. Esto ocurre porque los vasos sanguíneos se vuelven más rígidos con la edad.

La hipertensión arterial, además, aumenta la probabilidad de sufrir un accidente cerebrovascular, un ataque cardíaco, insuficiencia cardíaca, enfermedad renal o muerte prematura.