VIDA MODERNA

“La maternidad está muy lejos de ser perfecta”: el pódcast con las claves para sobrevivir

Camila Wills lidera un pódcast que cuenta historias de lo que viven las mujeres en la maternidad. “Escuchar historias reales, de mamás reales, para mamás reales, creo que nos ayuda a entender que todas hemos llorado alguna vez dentro del baño, y que sin lugar a dudas, todo pasará y todo estará bien”, dice.

14 de enero de 2021
Camila Wills Podcast De Madre
Camila Wills Podcast De Madre | Foto: Camilo Ponce De León

SEMANA: De Madre es un pódcast que cuenta historias muy humanas de cómo se vive la maternidad. ¿Cómo le surgió la idea de generar este espacio?

Camila Wills: Hablando de historias, esta es una historia un poquito larga…. Porque antes del Pódcast De Madre, nació Madre: la comunidad. Yo soy periodista y mamá de dos: Martín y Guadalupe. Y hace un año decidí dejar el periodismo para crear una comunidad de maternidad, pues vi la necesidad de generar un espacio que estuviera cien por ciento dedicado a las mamás, ya que todo lo que nos ofrecen siempre es para nuestros hijos, clases de pintura, clases de estimulación, de natación, pero para nosotras, nada. Así que decidí capacitarme como Doula (mujer que acompaña el embarazo, parto y posparto) y como educadora perinatal, y así crear Madre, un espacio para nosotras, en donde hay talleres, encuentros, acompañamiento y lo más importante: apoyo. Y así fue como a principios del año pasado lancé este espacio por instagram @madrecolombia.

SEMANA: ¿Y el pódcast cómo surgió entonces?

Camila Wills: Luego surgió la idea del pódcast, cuando Pablo un amigo, director de Akorde Podcast, me oyó hablando de la maternidad y me dijo que él tenía la idea de hacer un pódcast para las mamás, que si me le medía…y pues no lo pensé dos veces. Era un sueño: El periodismo y mi comunidad de madres en un mismo espacio. Así empezó, al principio, hablaba yo sola, temas de maternidad, pero me di cuenta que hacía falta algo, contar una historia…contar historias de mamás reales, historias que merecen ser contadas y escuchadas.

Camila Wills Podcast de Madre
Camila Wills Podcast de Madre | Foto: Camilo Ponce De León

SEMANA: Hay una idea muy idílica de lo que es ser mamá, y sin embargo, muchas mujeres viven ese momento en coyunturas muy difíciles. ¿Siente que ayuda contando esas historias en donde no todo fue rosa?

Camila Wills: Absolutamente. La maternidad que nos han mostrado en los cuentos y las películas nos ha llevado a pensar que así debe ser y no, la maternidad está muy lejos de ser perfecta. Si bien, sí es un estado hermoso y el sueño de muchas mujeres, en donde la mayoría es muy feliz y todo es perfecto, para muchas otras no fue así. Hay mamás que han quedado embarazadas cuando no lo esperaban, otras que han perdido seres queridos estando embarazadas, otras en las que todo en su vida es perfecto pero sienten que la maternidad las cambió para mal. Escuchar historias reales, de mamás reales, para mamás reales, creo que nos ayuda a entender que todas hemos llorado alguna vez dentro del baño, y que sin lugar a dudas, todo pasará y todo estará bien.

SEMANA: ¿Cómo busca las historias para su pódcast?

Camila Wills: Eso es lo más lindo de todo, no las busco, nos hemos encontrado. La primera vez si puse un post en algún grupo en Facebook preguntando si había mamás por ahí con una historia diferente de vida que mereciera ser contada. El post tuvo más de cien comentarios, unas historias hermosas, de las cuales he tenido algunas. Otras, han sido mujeres que he conocido por algún motivo y que tienen historias de vida y de maternidad tan conmovedoras que les pido sean contadas para que muchas mujeres la conozcan y sepan que no están solas.

SEMANA: El último episodio de De Madre es muy conmovedor, la historia de Eugenia Gómez quien perdió a su esposo Alejandro Pizano a los cuatro meses de embarazo. Ella nunca había hablado. ¿por qué buscarla para De Madre?

Camila Wills: Sí, efectivamente la historia y la entrevista más conmovedora que he hecho en mi vida. Si la oyeron se dan cuenta que no pude contener las lágrimas desde el minuto uno, hasta que se acaba. Desde que empecé con mi pódcast y con el tema de las historias, supe que Eugenia en algún momento debía contar lo que le pasó. Tuve la fortuna de conocer a Alejandro desde el colegio, pues era muy amigo del papá de mi hijo. A Eugenia no la conozco personalmente, pero desde que Alejo falleció le escribí un mensaje por Instagram diciéndole cuánto lo sentía y que tenía todo mi corazón, mi apoyo y mi solidaridad. Desde siempre lo que más me estremeció de toda esta historia, era que estuviera embarazada. Yo no podía creer que alguien tuviera que pasar por un duelo tan fuerte, tan repentino y tan atroz, en el momento que se supone, es el más feliz de la vida.

SEMANA: ¿Y cómo llegaron a concretar el pódcast?

Camila Wills: Desde ese día que le escribí a Eugenia quedamos siempre en contacto virtual (por redes sociales) y pude ver cómo se iba transformando su vida, cómo esa mujer tan valiente había podido sobrellevar semejante dolor. Vi cuando nació María Del Mar, la vi crecer, cuando llegó Jose su nuevo amor, cuando se comprometió. Y todas estas fotos que ella subía mientras contaba los nuevos sucesos de su vida, los acompañaba de unos textos escritos con tanto amor, con tanta verdad, con tanta sensibilidad. Me enamoré de su historia como de su valentía y no dudé un segundo en preguntarle si podíamos grabar el pódcast y de una me dijo que sí. Ella fue súper abierta desde el segundo uno, con lo cual estoy supremamente agradecida porque confió en mí de una manera que me sorprende hasta hoy. Ese día yo me encerré en el clóset de mi hijo (mi estudio casero) y grabamos su historia durante un poco más de una hora, fue el miércoles antes de su matrimonio. Cada minuto fue muy conmovedor y creo que el reflejo de todo puede oírse en ese episodio que ha tenido cientos de descargas, de hecho, más que todos los episodios juntos en la vida de mi pódcast.

SEMANA: En otra oportunidad usted habló con una mujer que había sido abuela a los 31. ¿Qué le llamó la atención de esa historia?

Camila Wills: ¡Todo! Me parece sacada de la ficción. La historia es así, Daniela, con la que hablé, fue abuela a los 31 años, porque ella fue mamá adolescente y su hijo, que tiene 16 acaba de ser papá. Además, su mamá también la tuvo a ella muy joven, la señora es bisabuela a sus 48! Toda una familia de mamás adolescentes, eso me llamó la atención. Pues más allá de ser divertido y de querer oír cómo puede uno llegar a ser abuela a los 32, lo que más me llamó la atención fue poder contar que en la maternidad no siempre se puede planear y no todo sale como uno quiere. La familia de Daniela ha repetido la historia tres veces, y aunque no fue fácil, salieron adelante siempre, con trabajo, apoyo y amor. Esta historia decidí contarla porque sé que muchas veces creemos que la vida de un adolescente termina si se hace mamá, o papá antes de tiempo. Yo creo que no. Yo estoy convencida que nuestros hijos nos escogen en el momento que debemos convertirnos en padres.

SEMANA: Hay otros temas de los que pocas personas hablan hoy, pero que son muy frecuentes. Por ejemplo, usted ha hablado con mujeres que no son madres, pero que congelan óvulos para serlo más adelante. ¿Cree que esa es una tendencia creciente?

Camila Wills: Sí, efectivamente hay muchos temas que son tabú, que debemos empezar a hablarlos con la naturalidad que merecen. Una mujer puede y debe ser mamá, como mejor le parezca. Si cree que debe congelar sus óvulos porque no se siente preparada todavía, si por el contrario ya lo está y no tiene pareja y decide buscar un donante, si quiere adoptar o si simplemente deja que pase cuando tenga que pasar. Todas las opciones son válidas y precisamente eso es lo que intento siempre hablar en mi comunidad y en mi pódcast.

SEMANA: ¿Cómo es su historia de madre?

Camila Wills: Cuando tenía 17 años, me hice mamá, por primera vez, de Martín. Como se imaginan, fue absolutamente inesperado. Yo estaba en el colegio y el papá también. Sin embargo, contamos con la fortuna de tener unas familias absolutamente amorosas, que nos apoyaron desde el inicio, hasta hoy. No fue un camino fácil, pero tampoco puedo decir que fue imposible, al contrario, ser mamá joven es divino. Crecí al lado de mi hijo, trabajé desde que lo tuve para darle lo que podía y siempre he intentado ser su mejor ejemplo. Vivimos con mis papás hasta que el cumplió 6 años, luego me casé y tuve a Guadalupe a los 27. Es decir, mis historias de madre tienen una diferencia de 10 años. Cada una con sus altos y sus bajos, con retos, enseñanzas inimaginables pero siempre con la felicidad más grande de verlos crecer y convertirse en seres llenos de cualidades. Hoy Guadalupe tiene 4 años y medio y Martín 14. Hace 6 meses nos vinimos a vivir a Barranquilla para darles la vida que siempre soñamos, descalzos y en donde puedan crecer más tranquilos y sin tantos afanes.

SEMANA: ¿Qué cosas le habría gustado saber cuando estuvo embarazada por primera vez?

Camila Wills: Muchas cosas, y la segunda vez también. Normalmente nos dejamos llevar de lo que no es tan importante, como pensar en un cuarto espectacular para el bebé, o comprarles el mejor coche…Y nos olvidamos de lo verdaderamente importante: que estamos creando vida. Me hubiera gustado haber aprovechado más mi embarazo, tomarle más fotos a mi panza, hacer rituales de bienvenida, guiarme por mi instinto, sacar más la mamífera que soy, disfrutar el proceso semana a semana, descubrir el por qué de mis cambios físicos y emocionales, saber qué me iba a encontrar cuando naciera, por qué me iba a sentir como me sentí. Tantas cosas que no nos cuentan y nadie nos enseña.

SEMANA: ¿Cosas cómo cuáles?

Camila Wills: También me hubiera gustado haberme preparado más para un parto respetado, saber que el único dueño del tiempo es el bebé, que es quién debería decidir cuándo nacer, nadie más. Saber qué intervenciones deberían hacerme y cuáles no. Vivimos en un país en donde las intervenciones innecesarias abundan y los médicos las hacen porque así lo aprendieron en la universidad. Pero después de convertirme en Doula y en educadora perinatal entendí que cuando un parto se desencadena de manera 100% espontánea, sin medicamentos, sin inducciones, sin forzar nada, es muchísimo más llevadero y amable con el bebé y con la mamá.

Camila Wills lidera el podcast De Madre que cuenta historias de lo que significa ese importante momento de la vida.
Camila Wills lidera el podcast De Madre que cuenta historias de lo que significa ese importante momento de la vida. | Foto: Camilo Ponce De León

SEMANA: ¿Y con los bebés pequeños?

Camila Wills: Lo mismo que en el embarazo, me hubiera gustado haber aprovechado cada etapa más, sin tantas ganas de pasar a la siguiente. Es decir, normalmente queremos que el tiempo pase rápido. Cuando estamos embarazadas, queremos que llegue el momento del nacimiento pronto, cuando nace el bebé, no vemos la hora de que siga la noche derecho, que se siente, que gatee, que camine…Le metemos tanta presión al tema, nos metemos tanta presión a nosotras, entre las mismas mamás, que se nos olvida disfrutar el instante, disfrutar la etapa en la que está nuestro bebe, pues por más caótica y agotadora que parezca, como todo en la maternidad, pasará y no quedará más que en un recuerdo.

SEMANA: Ser madre además de una bendición, también es muy difícil. ¿Qué es lo más difícil?

Camila Wills: El posparto sin lugar a dudas. Nadie toca ese tema, solo la palabra causa miedo. Y no, debería hablarse del posparto como se habla del embarazo, tanto o más. Del embarazo lo conocemos todo, desde el principio de los días, de hecho, conocemos tanto de él, que precisamente por eso se ha des-“mamiferizado” tanto, alejándolo de lo natural. Pero cuando ese bebé nace, creemos que ahí se acaba todo, y no…hasta ahora está empezando, y de eso nadie nos habla. Claro, nos hablan de los “cuidados del recién nacido” de cómo limpiarle el ombligo, cómo bañarlo, cómo alimentarlo, pero de cómo nos vamos a sentir y por qué nos sentimos así, nadie. Ah bueno, del posparto nos hablan de cómo recuperar la figura, cómo hacer para desinflamar el abdomen en tiempo récord y cuál es la mejor faja para lograrlo. Pero de ahí a lo realmente importante, ninguna persona lo mencionó en los nueve meses que acaban de pasar.

SEMANA: ¿Se refiere a la depresión y otras tantas cosas que viven las madres?

Camila Wills: A la depresión, pero a muchas más cosas. Por ejemplo, es tan invisible la mamá cuando nace el bebé a veces que cuando llegan a visitarnos –si la pandemia lo permite- caemos en estado de shock cuando nos damos cuenta que saludan primero al bebé, preguntan cuánto pesó, cuánto midió, qué tan redonda está su cabeza, cómo le quedó su primera pinta. ¿Y a la mamá? ¿Quién le preguntó a la mamá como se sintió en su parto? ¿Cómo se siente hoy? ¿Le duele algo? ¿Está feliz? ¿Fue todo tal y como lo soñó? Así que sí, sin lugar a dudas creo que del posparto hay que empezar a hablar y mucho. Hay que empezar a normalizar un tema del que sufren el 15 % de colombianas actualmente.

Hay que empezar a normalizar que llorar después de convertirse en madre no necesariamente quiere decir que estamos en depresión, pues existen también los “Baby blues” que es esa sensación de tristeza, sin razón aparente, en donde las únicas culpables son las hormonas que se mueven sin parar dentro de nosotras. Hay que empezar a normalizar que no todas nos enamoramos de nuestros bebés la primera vez que los vemos, que podemos tardar horas, días o semanas, así como le pasa al papá. Hay que empezar a normalizar que está bien sentirse feliz después de parir, pero sí que hay que normalizar que llorar también está bien.

SEMANA: Muchas madres sienten, en especial en esta cuarentena, que están fracasando. ¿Cómo salir de ese sentimiento?

Camila Wills: Si este confinamiento y toda la pandemia ha sido un reto enorme para todas, para las mamás, ha sido el aprendizaje más grande de sus vidas. Y ese sentimiento de fracaso o tristeza profunda creo que nos aqueja a todas. No por el hecho de creernos malas madres, sino porque nadie quiere ver crecer a sus hijos con limitaciones. Nunca, ni en un millón de años, nos imaginamos que nuestros hijos estarían casi un año, o no sabemos cuánto, sin ver a sus amigos, a sus abuelos, sin seguir con la rutina que para ellos era normal. Nunca nos imaginamos ver a nuestros hijos con un tapabocas para que estuvieran seguros. Pero solo quiero decirme a mí y a las mamás que me leen, que no hemos fracasado, en absoluto.

SEMANA: ¿Cómo ha sido ser mamá en medio de la pandemia?

Camila Wills: Ser mamá en medio de una pandemia, es y será siempre recordado por todos como uno de los actos más lindos y llenos de amor que podamos recordar. Hemos sido no solo mamás de tiempo completo, sino profesoras, psicólogas, recreacionistas, músicas, chefs, enfermeras y un sinfín de profesiones que cada mamá tendrá en su lista. Hoy, que podemos empezar a ver la luz al final de este largo túnel, que vemos cada vez más cerca el volver a la vida que conocimos, debemos hacer solo una cosa: agradecer. Agradecer porque la vida nos dio la oportunidad de ver crecer a nuestros hijos, nos dio de golpe la oportunidad de estar junto a ellos 24/7 como tanto quisimos, nos dio la oportunidad de aprender a enseñarles. Mañana, cuando esto solo sea un recuerdo, añoraremos una vez más estos momentos, así que otra vez recuerdo la importancia de valorar cada momento, de valorar cada etapa.

SEMANA: ¿Qué viene para De madre, el pódcast?

Camila Wills: En este nuevo año vienen historias divinas en un pódcast De Madre, próximamente, podrán oír la historia de una mamá de corazón y no de sangre, la historia de un papá que sin una mamá en la tierra se merece todos los aplausos, de una mamá que el mismo día de su parto perdió a su ser más querido. Seguiré trayendo todas las Historias que sean necesarias para que sepamos que no somos las únicas que tenemos problemas, que si ellas pudieron seguir adelante, nosotras también y que así la maternidad no siempre sea color de rosa, siempre será maravillosa.