La semilla que mejora la circulación, evita los coágulos y ayuda a adelgazar

Las semillas son un alimento clave para incluir en las dietas diarias, debido a que brindan una serie de beneficios al organismo. Aportan nutrientes, vitaminas y minerales que ayudan a prevenir el desarrollo de enfermedades.

Muchos de estos productos ayudan a bajar el colesterol y las grasas, aportan fibra que permite una buena digestión y asimilación de otros nutrientes. Además, contribuyen a absorber mejor los ácidos grasos saludables y actúan como antioxidantes.

Su ingesta se vuelve cada vez más popular, pues son un complemento perfecto en un sinnúmero de preparaciones gastronómicas. Hacerlas parte de distintas recetas es una buena decisión si se quiere lograr no solo una interesante riqueza en sabores, texturas y aromas, sino beneficios para la salud.

Las opciones son diversas y la linaza se ha consolidado como una de las más apetecidas. La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos asegura que esta diminuta semilla destaca por su riqueza en fibra, vitaminas, minerales, proteínas, grasas vegetales saludables y antioxidantes, que ayudan a prevenir el daño celular.

La linaza es una importante fuente de fibras solubles e insolubles que ayudan a mantener las deposiciones regulares y a prevenir el estreñimiento. Las semillas de linaza también son una buena fuente de: vitaminas B1, cobre, fósforo, magnesio y manganeso.

Se puede consumir en forma de aceites o de semillas, ya sean enteras o molidas. De cualquier forma que se utilice, su incorporación a la dieta trae beneficios saludables. Los expertos en nutrición recomiendan la linaza molida debido a que es más fácil de digerir. La semilla entera puede pasar por el intestino sin digerirse, lo cual significa que el cuerpo no aprovechará todos los beneficios, dicen especialistas del instituto Mayo Clinic.

Linaza para la circulación

Una de las muchas bondades que le ofrece este alimento al organismo es que ayuda a mejorar la circulación sanguínea y a evitar la formación de coágulos. Sus ácidos grasos poliinsaturados ayudan a la formación de la membrana celular, a aumentar el colesterol bueno y reducir el malo, lo que deriva en beneficios para el sistema cardiovascular.

Información de revista Mejor con Salud, escrita por Katherine Flórez, indica que la linaza es una fuente vegetal de ácidos grasos omega 3 y mucílagos, por lo que consumirla con regularidad resultaría beneficioso no solo para controlar el colesterol, sino también los triglicéridos.

Estos lípidos, especialmente el colesterol, cuando está en niveles elevados pone en riesgo la salud del corazón, debido a que se forman depósitos grasos en los vasos sanguíneos. Con el tiempo, estos depósitos crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias. A veces, pueden romperse y formar un coágulo que causa ataques cardíacos, de ahí la importancia de la linaza para evitar esas afecciones.

Además, según el portal de estilo de vida unCOMO, su consumo regular disminuye la viscosidad de la sangre, lo que favorece una mejor circulación sanguínea, previniendo la formación de trombos.

Buena para bajar de peso

Por su riqueza en fibras vegetales, es una de las mejores aliadas para las dietas tendientes a adelgazar. Sus propiedades ayudan a tener una mejor digestión, mejoran el metabolismo y proporcionan sensación de saciedad.

Según una revisión de estudios publicada en Obesity Reviews, citada por la revista Mejor con Salud, en una publicación escrita por Carolina Betancourth, el consumo de semillas de linaza tendría un efecto positivo en la pérdida de peso, en especial en pacientes con sobrepeso y obesidad.

Al parecer, la fibra que contiene este alimento mejoraría los procesos digestivos e incrementaría la saciedad, lo que hace que el consumo de calorías disminuya. “Los efectos aparecen luego de una intervención a largo plazo (más de tres meses), y se manifiestan cuando se asume una rutina de ejercicio y dieta”, indica la citada fuente.

El consumo de linaza también es favorable para regular el tránsito intestinal, a la vez que tiene propiedades antiinflamatorias y diuréticas, lo que también resulta favorable para bajar la grasa abdominal.

¿Cómo consumir la linaza?

Según el portal Salud 180, una de las formas de consumir la linaza es en agua. Se agrega una cucharada de este producto a un vaso de agua, se deja reposar unas cuantas horas y se bebe una vez al día. La citada fuente dice que progresivamente se puede incrementar la cantidad de semilla a consumir y tomarla dos veces al día. Sin embargo, es importante tener muy presente su gran aporte de fibra que puede generar efectos diversos dependiendo del organismo.

También se puede agregar a panqueques u otras mezclas de productos horneados, batidos de frutas, yogur o cereales, sopas y ensaladas.