La verdura que purifica la sangre, limpia el hígado y evita infecciones urinarias

El rábano es un buen aliado del hígado y la vesícula, gracias a los glucosinolatos, lo que ayuda a mejorar la expulsión de grasas y toxinas del cuerpo.

En concreto, se caracteriza por tener propiedades diuréticas, lo cual combate la retención de líquidos y estimula la mucosa del estómago para una mejor digestión, según el portal GastrolabWeb, en su sección de salud.

Por otra parte, un estudio de la Universidad Tecnológica de Jawaharlal Nehru (India) señala que los rábanos casi no contienen calorías. Media taza de ellos aporta sólo 12 calorías.

Este alimento es ideal en las dietas para adelgazar, gracias a su alto contenido en potasio que lo convierte en un potente diurético, factor que ayuda quemar grasas. Además, revitaliza las funciones del hígado, encargado de emulsificar las grasas (desaparecerlas antes de que se peguen a los tejidos), según el portal Salud180.

Según un estudio publicado en Toxicological Research, el extracto enzimático de rábano puede disminuir significativamente el daño hepático por agentes tóxicos. Los hallazgos se han encontrado tanto en pruebas in vitro como in vivo.

El efecto se ha estudiado con mayor profundidad en animales. Por ejemplo, un estudio divulgado en la revista Nutrients indicó que la hortaliza puede incidir de forma positiva en el daño hepático inducido por paracetamol. Se cree que lo hace a través de la inhibición del estrés oxidativo y la apoptosis. De manera general, sus extractos se han utilizado para abordar las complicaciones hepáticas asociadas con la inflamación.

Por si fuera poco, esta verdura ayuda con la prevención de infecciones en vías urinarias debido a que actúa como antibacteriano para cuidar los riñones y evita problemas en el tracto urinario. Es por ello que los rábanos pueden ser recomendados para personas con problema de riñones, según el diario El Universal, en su sección de salud y bienestar.

Un estudio divulgado en Nepal Medical College Journal informó que el consumo regular de rábano puede afectar de manera positiva la excreción urinaria de oxalato de calcio.

Lo interesante de este hecho es que se reporta a partir de un ensayo clínico efectuado con personas. Otro trabajo publicado en Phytotherapy Research sugirió que el rábano negro puede ser de gran ayuda en la prevención de cálculos biliares de colesterol.

Batido de rábano y tomate de árbol

Ingredientes:

• Dos tomates de árbol (con cáscara).
• Dos rábanos (con cáscara).
• Medio vaso de agua.

Preparación:

• Cortar los vegetales en trozos y colocarlos en el vaso de la batidora junto con el agua.
• Luego licuar hasta lograr una mezcla homogénea y tomar en ayunas durante nueve días.
• Hay que tener en cuenta que se debe complementar este batido con media hora de actividad física diaria, además de llevar una alimentación equilibrada para que los resultados sean efectivos.

Jarabe de rábano y limón

Ingredientes:

• 3 limones.
• 2 rábanos picantes.
• 1 trozo de raíz de jengibre.
• 3 cucharadas de miel (75 g).
• 1 cucharada de canela molida (10 g).

Preparación:

• En primer lugar, lavar bien el rábano y el jengibre y luego cortarlos en pequeños trozos.
• Una vez troceados, ponerlos en la licuadora y agregar el zumo de los tres limones.
• Batir a velocidad rápida y agregar la cucharada de canela y la miel.
• Procesar bien todo, hasta conseguir una mezcla homogénea, y verter en un recipiente de cristal hermético.
• Se puede almacenar en el refrigerador.
• Se recomienda consumir una cucharada antes de hacer ejercicio. Así el cuerpo tendrá un extra de energía para activarse.

Batido de rábano y piña

Ingredientes:

• 4 rábanos medianos.
• 1 rebanada de piña.
• 1/2 taza de agua.
• 1 cucharada de miel.

Preparación:

• Lavar muy bien los rábanos y partirlos por la mitad, pasarlos a la licuadora junto con la piña cortada en cubos, incluyendo el corazón de la fruta, el agua y la miel; batir todo hasta obtener una mezcla homogénea.
• Este licuado se puede tomar con o sin colarlo.
• De la misma manera se puede utilizar un extractor de jugos, y si se prefiere, eliminar la miel que sirve solo como endulzante.
• Se recomienda tomar este jugo en la mañana en ayunas y después tomar un desayuno balanceado, además de beberlo cuatro veces por semana y durante un mes para ayudar al organismo a desintoxicarse.