VIDA MODERNA
Lactancia: todo lo que se debe saber acerca de la mastitis
Esta es una inflamación que surge en los senos a causa de una infección.
La mastitis es una inflamación (hinchazón) en el seno que generalmente es causada por una infección que se produce en el tejido mamario por diferentes organismos. La infección aparece por el sobrecrecimiento de bacterias que producen sustancias que taponan los conductos por donde se drena la leche del pecho.
Según explican los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, “la mastitis comúnmente afecta a las mujeres que está amamantando (mastitis asociada con la lactancia). Pero esta puede ocurrir en las mujeres que no están en período de lactancia y en los hombres”.
¿Cómo saber si se padece de mastitis?
La mastitis se puede reconocer por tener la zona del pecho endurecida, roja, caliente y dolorosa al tacto. Algunas veces va acompañada por malestar general y fiebre.
Es importante evitar y tratar las obstrucciones de zonas del pecho y para ello, es muy útil el masaje antes y durante la toma, el vaciado regular y completo del pecho y variar periódicamente las posturas en las que se amamanta.
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En caso de que se presenten algunos de estos signos, se debe acudir al médico de manera inmediata, por lo que es necesario recoger muestras para cultivo de la leche y tomar antibióticos y probióticos.
Se recomienda tener en cuenta los factores que pueden desencadenar una mastitis, para poder controlarla a tiempo. Algunos de estos son:
- Presencia de grietas en el pezón.
- Retención de leche o drenaje incompleto de la mama.
- Tratamiento con antibióticos durante el embarazo, parto o postparto.
- Cambio abrupto (disminución) en la frecuencia de las tomas.
- Uso de sujetadores inapropiados o muy apretados (con aros) o tener una posición incorrecta al dormir.
¿Se puede amamantar al bebé si se tiene mastitis?
Según la Dra. Blanca Garrido García, neonatóloga del Servicio de Pediatría del Hospital de Manises, no existe ningún impedimento para la lactancia en caso de presentar mastitis.
“Ni le podemos transmitir la infección ni la leche pierde sus cualidades nutricionales. Si el bebé no quisiera tomar del pecho afectado, es importante la extracción de leche usando técnicas de extracción manual o extractores mecánicos. La leche extraída puede darse al bebé sin problema alguno”, afirma la especialista.
Algunas recomendaciones para tratar la mastitis
En caso de una mastitis, lo más importante es actuar cuanto antes. Lo primero que hay que hacer en las primeras 24 horas es realizar una extracción frecuente y eficaz de la leche. Además, es crucial consultar al médico especialista para iniciar el tratamiento adecuado.
Aquí se mencionan algunas recomendaciones para tratar esta inflamación.
- Aplicación de frío en la zona afectada: nunca se debe aplicar calor, ya que facilita la proliferación de las bacterias y aumenta la inflamación.
- Tratamiento con antiinflamatorios: ayudará a bajar la fiebre (en caso de mastitis aguda) y a disminuir la inflamación.
- Uso de probióticos específicos para la lactancia.
- Antibióticos: si las medidas anteriores no resuelven o mejoran el cuadro de mastitis, hay que acudir a un médico para que establezca un tratamiento con antibióticos durante 10 o 14 días.