Las cuatro plantas que reducen en poco tiempo los dolores musculares

Los dolores musculares son una complicación frecuente entre las personas, ya sea por una mala postura, la vejez o cualquier otra razón. Una molestia en las articulaciones se puede presentar sin previo aviso y afectar el día de las personas.

Por suerte, la medicina natural es una de las mejores aliadas a la hora de tener complicaciones de esta índole. Las hierbas cuentan en la mayoría de los casos con propiedades antiinflamatorias, por lo que pueden devolverle la correcta movilidad a las articulaciones y así evitar el desarrollo de los diferentes tipos de artritis.

Las dolencias en las articulaciones pueden ser desde leves hasta graves, por lo que cualquiera que sea el nivel de dolor, siempre es importante acudir ante un especialista de salud para tener un diagnóstico y dar con la raíz del problema. De igual forma, los especialistas pueden validar o no el uso de plantas medicinales.

En la medicina natural, las alterativas de plantas medicinales son inmensas, por lo que hay algunas en concreto que se destacan para aliviar las dolencias de las articulaciones. Los expertos de Heathline se pusieron en la tarea de buscar las mejores frente a este asunto.

La primera es el aloe vera, la cual es una de las hierbas más famosas de la medicina natural y está disponible en diferentes presentaciones, tales como pastillas, polvo, geles y hojas.

El aloe vera tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que es recomendada a la hora de tratar quemaduras de sol y dolor en las articulaciones. Cuando se consume de forma oral, no hay riesgo de indigestión; dado que no tiene efectos gastrointestinales negativos.

Algunos investigadores han sugerido que tomar aloe oral puede ayudar a aliviar el dolor de la osteoartritis. Por si fuera poco, este producto también reduce los niveles de la glucosa, lo cual hace que sea positivo para la diabetes.

En la medicina tradicional hay otra planta llamada boswellia, conocida también como incienso. ¿Para qué sirve? Resulta que el ácido proveniente de esta planta cuenta con efectos inflamatorios, lo cual hace que pueda combatir con eficiencia para mejorar el dolor, funcionamiento y eliminar la rigidez ocasionada por la artritis.

La dosis de hasta un gramo al día de incienso parece ser segura, pero dosis altas pueden afectar el hígado. Está disponible en tabletas y cremas tópicas. Por lo tanto, es importante no sobrepasar las porciones mínimas de consumo.

La uña de gato es otra hierba antiinflamatoria que puede reducir la inflamación ocasionada por las molestias en las articulaciones. Al igual que los ejemplos anteriores, la planta cuenta con propiedades antiinflamatorias, pero se destaca por reforzar el sistema inmune.

No obstante, la ingesta de la uña de gato no puede ser a la ligera, sino que se debe tener en cuenta las porciones. Un exceso acarrea en náuseas, mareos, presión arterial baja y dolor de cabeza. Además, es importante impedir mezclar la hierba con anticoagulantes, medicamentos inmunodepresores o en pacientes con tuberculosis.

Por último, la cuarta planta por excelencia que combate la rigidez de las articulaciones es el eucalipto. Una particularidad de esta hierba radica en que es bastante accesible, lo cual permite que sea una apuesta fácil a la hora de eliminar el dolor en poco tiempo.

Las hojas de esta planta contienen taninos, los cuales ayudan a reducir con la inflamación y dolores relacionados con la artritis. Ya sea como tónico o tomado como una infusión, el eucalipto ayuda en gran medida. Sin embargo, no está de más tener certeza en que no generará efectos alérgicos.