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Las dos plantas que se deben consumir para mejorar la memoria
Son ricas en antioxidantes que protegen las células de cerebro.
La memoria es una función del Sistema Nervioso Central y es determinante para todo ser humano, pues brinda la oportunidad de registrar, conservar y evocar experiencias y recuerdos.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos la define como el proceso de almacenamiento de información que luego brinda la posibilidad de recordar. La memoria puede ser de corto o largo plazo. La primera, almacena datos por unos pocos segundos o minutos; mientras la segunda, lo hace por un lapso mayor.
La memoria puede afectarse por diversas razones. Por ejemplo, por la continua exposición al estrés y las toxinas del ambiente, así como debido a malos hábitos de vida y de alimentación. Estos factores se relacionan con el cansancio y la disminución del rendimiento mental, independientemente de la edad de una persona.
La dieta es clave para cuidar la salud del cerebro y de paso fortalecer la memoria. Los expertos dicen que es importante consumir todos los grupos de vitaminas, proteínas y minerales; además de evitar la ingesta de productos que pueden ser perjudiciales, como el alcohol o el tabaco.
Esto debe complementarse con la práctica de ejercicio físico de manera regular y también es posible recurrir a la ingesta de algunos productos naturales como las hierbas. Estas son dos de las recomendadas.
Salvia
Esta es una planta que, se dice, ayuda a mejorar la memoria. El portal de estilo de vida unCOMO indica que su consumo protege el cerebro, debido a que actúa como un antioxidante en estas células.
Esto previene el envejecimiento de las mismas, es decir, que contribuyen a evitar que se pierdan funciones cognitivas, pero es importante tener claro que en ningún caso se puede recuperar la memoria que ya pudo haberse dañado. Una de las formas de consumirla es en infusión.
Para elaborar esta bebida solo se requiere de una cucharadita de salvia (cinco gramos) y una taza de agua (250 mililitros). Se pone el agua al fuego y cuando llegue a ebullición se agrega la cucharadita hojas de salvia, se tapa, se deja reposar por unos 10 minutos, luego se cuela y estará lista para beber. Se aconseja tomarla dos o tres tazas durante la semana.
Ginkgo biloba
El portal Cuerpo Mente asegura que esta planta actúa en el cerebro como vasodilatador y protector de los vasos capilares, y se indica sobre todo en personas mayores para combatir o demorar la insuficiencia cerebral y favorecer la memoria y concentración. De igual forma, puede resultar útil para evitar la desorientación y las lagunas mentales.
Para preparar una infusión se requiere de un vaso de agua y cinco gramos de la planta. Al igual que en el caso anterior, se pone el agua al fuego y cuando llegue a ebullición se agrega el ginkgo, se deja reposar tapado, luego se cuela y estará listo para tomar.
¿Cómo estimular y cuidar la memoria?
Los expertos señalan que, en general, todo lo que implique un cambio, un desafío, un aprendizaje para el cerebro es fundamental para su desarrollo y para fortalecer la memoria.
Según la Escuela de Medicina de Harvard una forma de estimular el cerebro consiste en implicar todos los sentidos en diferentes procesos con la idea de que este órgano retenga varios conceptos y caiga en una especie de adivinanza. A través del olfato o incluso el tacto y el gusto, el cerebro es capaz de memorizar e identificar rápidamente las cosas.
Para fortalecer la memoria también es importante relacionarse con los demás. El médico Sanjay Gupta, autor del libro Mantente alerta: construye un cerebro mejor a cualquier edad, señala que conectar con los demás es otro de los ejercicios fundamentales para mantener una buena salud del cerebro y cuida la memoria. Asegura que uno de los secretos de las personas felices es tener buenas relaciones sociales y que ello ayuda a aumentar la capacidad para adaptarse y le pone freno al deterioro cognitivo.
Adicionalmente, la alimentación incide de manera directa sobre la memoria debido al aporte que hace al organismo, que absorbe de ella los nutrientes necesarios para funcionar. La dieta mediterránea, por ejemplo, podría ser clave para mejorarla. Comer mucha verdura, frutas frescas, pescado y cereales ayuda a tener un sistema circulatorio saludable que, a su vez, hace que fluya más oxígeno y los nutrientes lleguen más fácilmente al cerebro.
Por último, hacer ejercicio. Los especialistas señalan que las personas que tienden a ser muy sedentarias o no realizan actividad diaria productiva para su salud son las que más suelen sufrir de pérdida de la memoria, incluso a muy temprana edad.