Sexualidad
Las enfermedades de transimisión sexual: conozca sus síntomas
Soldado avisado no muere en guerra. Muchas de las ETS pueden tratarse. y de ahí la importancia de conocerlas y, mejor aún, prevenirlas.
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), o infecciones de transmisión sexual (ITS), generalmente se adquieren por contacto sexual. Estas se dan por diferentes organismos entre los que están las bacterias, virus o parásitos y pueden transmitirse de una persona a otra por la sangre, el semen o los fluidos vaginales y otros fluidos corporales. Según el portal Medlineplus, a veces pueden transmitirse a través de otro contacto físico íntimo. Esto se debe a que algunas ETS, como el herpes y el VPH, se transmiten por contacto de piel a piel.
Pero en ocasiones, además, estas infecciones pueden transmitirse de forma no sexual, como de madre a hijo durante el embarazo o parto, o a través de transfusiones de sangre o agujas compartidas.
Según la clínica Mayo las enfermedades de transmisión sexual no siempre presentan síntomas. Es posible contraer enfermedades de transmisión sexual de personas que parecen estar perfectamente sanas y que ni siquiera saben que tienen una infección. Es por eso que pueden pasar desapercibidas hasta que ocurren complicaciones o hasta que se diagnostica una pareja.
Por eso resulta importante conocer los síntomas cuando estos se presentan para no solo acceder a un tratamiento sino también para evitar el contagio de la misma a su pareja.
Tendencias
Entre los principales signos y síntomas que pueden indicar una infección de transmisión sexual están:
- Llagas o protuberancias en los genitales o en la zona oral o rectal
- Dolor o ardor al orinar
- Secreción proveniente del pene
- Flujo vaginal inusual o con olor extraño
- Sangrado vaginal inusual
- Dolor durante las relaciones sexuales
- Dolor e inflamación de los ganglios linfáticos, particularmente en la ingle, aunque a veces más extendidos
- Dolor en la parte inferior del abdomen
- Fiebre
- Erupción en el tronco, las manos o los pies
Estos síntomas pueden aparecer unos días después de la exposición, o pueden pasar años antes de que la persona presente algún problema perceptible. Todo depende de cada individuo y su organismo, según los expertos. Algunas ETS pueden diagnosticarse durante un examen físico o mediante el examen microscópico de una llaga o líquido extraído de la vagina, el pene o el ano. Los análisis de sangre pueden diagnosticar algunos tipos de ETS.
Ante estos síntomas lo ideal es acudir a un médico. Pero también la persona debe hacerlo si es sexualmente activa, ha practicado sexo sin condón y podría haber estado expuesta a una infección de transmisión sexual.
Muchos expertos sugieren que las personas vayan al médico cuando inician su actividad sexual o a partir de los 21 años. E incluso antes de comenzar a tener relaciones sexuales con una nueva pareja. Esto es porque estas enfermedades se pueden prevenir con el uso correcto de condones de látex, aunque el riesgo no se elimina por completo. La forma más confiable de evitar una infección es no tener sexo anal, vaginal u oral.
Hay más de 20 tipos de ETS, entre las que están clamidia, herpes genital, gonorrea, VIH y sida, VPH, ladillas, sífilis y tricomoniasis. Según Medlineplus, la mayoría de las ETS afectan a hombres y a mujeres, pero en muchos casos los problemas de salud que causan pueden ser más graves en mujeres. Si una embarazada tiene una ETS, puede causarle graves problemas de salud al bebé. Algunas de ellas, como las causadas por bacterias o parásitos, se pueden tratar con antibióticos pero no existe cura para las ETS causadas por un virus, como sucede con el VIH o el Herpes. Sin embargo, es posible que los medicamentos pueden ayudar con los síntomas y reducir su riesgo de propagar la infección.
SEgún la Organización Mundial de la Salud (OMS) Cada día, más de un millón de personas contraen una infección de transmisión sexual y se estima que anualmente, unos 376 millones de personas contraen alguna de estas infeccones: clamidiosis, gonorrea, sífilis o tricomoniasis .