Vida Moderna
Las enfermedades que se evitan con el consumo frecuente de café
Recientes estudios encontraron una posible asociación entre el café y la disminución de la mortalidad.
El café es una de las bebidas más consumidas a nivel mundial, que puede hacer parte de una dieta saludable y, para una inmensa mayoría de personas, su consumo contribuye a la salud del cuerpo humano. Sin embargo, demasiada cafeína puede no resultar tan beneficiosa.
Sumándose a esta recomendación también han salido múltiples estudios que destacan la importancia de la ingesta de esta bebida y, a su vez, revelan los beneficios que trae para la salud cuando se ingiere con moderación.
El sabor, aroma y cantidad de cafeína del café varían de acuerdo con el tiempo de tostado, el tipo de molido y la forma de preparación de los granos, incluyendo el expreso, soluble, colado o descafeinado, que pueden ser consumidos puros o utilizados en preparaciones dulces, como tiramisú o helados, y ensaladas, como salsas.
Los principales beneficios del café para la salud, cuando se ingiere en cantidades moderadas, según la entidad de salud Mayo Clinic, son:
- Prevenir el cáncer: El café contiene cafeína, ácido clorogénico, ácido cafeico y kahweol, antioxidantes que protegen a las células contra los daños producidos por los radicales libres, impidiendo el desarrollo de algunos tipos de cáncer. Asimismo, el café ayuda a disminuir los niveles de estrógeno en el organismo, una hormona relacionada con algunos tipos de cáncer, como el de mama, hígado, colon y endometrio.
- Prevenir la enfermedad de Parkinson: La cafeína es un compuesto presente en altas cantidades en el café, protege las células del sistema nervioso central y estimula la liberación de dopamina, un neurotransmisor que, en bajas concentraciones, aumenta el riesgo de desarrollo de la enfermedad de Parkinson.
- Prevenir la diabetes: El café es rico en antioxidantes, los cuales protegen las células del páncreas y mejoran la función de la hormona insulina, regulando los niveles de glucosa en la sangre y previniendo la diabetes.
La ingesta recomendada para adultos es de 400 mg de cafeína al día, lo que equivale aproximadamente a 4 tazas de 150 ml de café colado. Además, las mujeres que planeen embarazarse, que estén embarazadas o amamantando, deben consumir máximo 200 mg de cafeína al día, lo que corresponde a un total de 2 tazas de 150 ml de café colado.
Por otra parte, los niños a partir de 12 años deben ingerir solamente 100 mg de cafeína al día, es decir, un máximo de 130 ml de café colado. Las personas que padecen de presión alta deben limitar el consumo de café a 200 mg de cafeína al día, lo que equivale a 2 tazas de café colado al día.
¿Cómo preparar café?
El café puede prepararse de varias forma, como colado, en la cafetera italiana, expreso, en la prensa francesa o soluble.
Además de puro, el café también puede consumirse con leche en preparaciones como cappuccino, mocha o macchiato. Esta bebida también puede ser usada en recetas dulces, como pasteles, tiramisú y helados; o preparaciones saladas, como salsas, complemento de pollo o carnes.
Contraindicaciones del consumo en exceso de café
Los niños menores de 12 años de edad no deben consumir café, así como personas con enfermedades como reflujo, úlceras y gastritis deben evitar esta bebida, ya que la cafeína puede irritar la mucosa del estómago.
El consumo de café debe ser evitado por aquellos que sufren de insomnio, ansiedad, zumbido de oídos y laberintitis, ya que puede empeorar los síntomas.
Además, no es recomendable beber café con otros alimentos que contengan cafeína, como té verde, guaraná, mate o chocolate, ya que el exceso de cafeína puede causar palpitaciones, náuseas, deshidratación, además de causar dependencia a largo plazo.