Salud
Tres frutas que alivian las várices y mejoran la circulación de la sangre
Las várices son una condición médica que afecta a muchas personas en todo el mundo.
Las várices son venas dilatadas y retorcidas que pueden aparecer en las piernas y otras partes del cuerpo. Esta condición puede ser más que una preocupación estética, ya que pueden causar incomodidad, dolor e incluso problemas de salud más graves si no se tratan adecuadamente.
Causas y factores de riesgo
Las várices se desarrollan cuando las válvulas dentro de las venas no funcionan correctamente, lo que causa una acumulación de sangre y presión en las venas. Esto puede estar relacionado con factores genéticos, cambios hormonales, obesidad, falta de actividad física y estar de pie o sentado durante largos periodos. Según la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular (SEACV), las várices también pueden ser causadas por trastornos como la insuficiencia venosa crónica.
Consecuencias de las várices
Además del aspecto visual, las várices pueden causar dolor, hinchazón, picazón y sensación de pesadez en las piernas. En casos más graves, las várices pueden dar lugar a complicaciones como úlceras en la piel y trombosis venosa profunda.
El papel de las frutas en el alivio de las várices
Una dieta rica en frutas y vegetales puede ser beneficiosa para aquellos que padecen várices. Algunas frutas en particular pueden ofrecer propiedades que ayudan a mejorar la circulación sanguínea y reducir la inflamación, lo que puede aliviar los síntomas de las várices. Según la Fundación Española del Corazón, frutas como las fresas, las naranjas, las uvas y los cítricos en general son ricos en vitamina C y antioxidantes, que pueden ayudar a fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos y mejorar la circulación.
- Cítricos. Las frutas cítricas como las naranjas, las mandarinas y el kiwi son ricas en vitamina C y antioxidantes, que pueden contribuir a fortalecer los vasos sanguíneos y mejorar la salud vascular.
- Uvas. Las uvas contienen resveratrol, un antioxidante que se ha asociado con la mejora de la circulación y la reducción de la inflamación.
- Fresas. Las fresas son ricas en compuestos llamados antocianinas, que tienen propiedades antiinflamatorias y pueden ayudar a aliviar la hinchazón y el dolor asociados con las várices.
Si bien las frutas por sí solas no son una solución mágica, incorporar una dieta saludable rica en frutas y vegetales puede contribuir al bienestar general y brindar beneficios para la salud vascular. Si se experimentan síntomas graves de várices, es importante buscar la opinión de un profesional médico para un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Cinco ejercicios para reducir el dolor por las varices
Para reducir el dolor asociado con las várices, es importante incorporar ejercicios que promuevan la circulación sanguínea y fortalezcan los músculos de las piernas.
- Caminar. El simple acto de caminar puede ser altamente beneficioso para mejorar la circulación y reducir el dolor de las várices. Según la American Heart Association, caminar regularmente puede ayudar a tonificar los músculos de las piernas y promover el flujo sanguíneo. Se recomienda comenzar con caminatas de 30 minutos al día, cinco días a la semana, y aumentar gradualmente la intensidad y la duración.
- Ciclismo. El ciclismo es otro ejercicio de bajo impacto que puede ayudar a aliviar el dolor de las várices. Según un estudio publicado en el European Journal of Applied Physiology, el ciclismo mejora la circulación en las extremidades inferiores y fortalece los músculos de las piernas. Se puede realizar ciclismo en una bicicleta estática o al aire libre, ajustando la intensidad y duración según el nivel de condición física.
- Elevación de piernas. Este ejercicio simple y efectivo ayuda a reducir la presión en las venas de las piernas y a mejorar la circulación. Hay que acostarse boca arriba y elevar las piernas hacia arriba, apoyándolas contra una pared o utilizando una silla. Mantener esta posición durante 10 a 15 minutos varias veces al día. Según el National Health Service (NHS), el ejercicio de elevación de piernas puede aliviar la hinchazón y el dolor causados por las várices.
- Estiramientos de pantorrillas. Los estiramientos de pantorrillas pueden ayudar a mejorar la flexibilidad muscular y reducir la tensión en las venas afectadas por las várices. Un estiramiento común consiste en pararse frente a una pared, colocar las manos en ella y dar un paso hacia adelante con una pierna. Mantener la pierna trasera estirada y flexionar la pierna delantera hasta sentir un estiramiento en la pantorrilla. Mantener la posición durante 30 segundos y repetir con la otra pierna. El NHS recomienda realizar estiramientos de pantorrillas regularmente para aliviar el dolor.
- Nadar. La natación es un ejercicio de bajo impacto que ejerce poco estrés en las articulaciones y mejora la circulación sanguínea. Según la American Heart Association, nadar y realizar ejercicios acuáticos pueden ayudar a fortalecer los músculos de las piernas y a aliviar el dolor de las várices. Aconseja nadar estilo libre, espalda o realizar ejercicios acuáticos, como aqua aeróbicos, durante al menos 30 minutos, varias veces a la semana.