Vida Moderna
Las siete cosas que no debe hacer si toma café en las mañanas: afectan la energía y el equilibrio hormonal
Una experta en salud digestiva realizó una serie de recomendaciones antes y después del consumo de esta popular bebida.
Uno de los hábitos más placenteros en las mañanas es tomar café, pero hay investigaciones que evidencian la importancia de saberlo hacer. Abigail Hueber, una experta en salud digestiva, explicó en el portal especializado Well+Good las prácticas que se deben tener en cuenta antes y después de digerirlo para que no afecte el estrés, el equilibrio hormonal y la energía.
Beber café recién levantado, por ejemplo, puede afectar la liberación de cortisol, es decir, una sustancia que ayuda al cuerpo a responder al estrés.
“El cortisol es una hormona importante que deseamos que se libere por la mañana, pero el golpe de cafeína con el estómago vacío puede provocar una liberación excesiva de cortisol y desencadenar una respuesta de estrés innecesaria que puede afectar negativamente nuestro intestino, nuestras hormonas, nuestras glándulas suprarrenales y nuestra energía”, sustentó Abigail Hueber.
Por otra parte, aunque beber café puede poner amarillos los dientes, la recomendación no es cepillarlos inmediatamente, como hacen algunos, dado que puede ser todavía más perjudicial.
Tendencias
A continuación, algunas recomendaciones recogidas por Well+Good:
Antes de beber café en las mañanas:
- Tomar la primera taza de café hora y media después de levantarse: “Tomarse un descanso en el consumo de cafeína durante los primeros 90 minutos ayuda a promover un equilibrio más óptimo de la respuesta de despertar del cortisol y puede incluso brindar un mejor apoyo a nuestros niveles de energía a lo largo del día”, explicó la experta en salud digestiva.
- Que el café no sea lo primero: otra sugerencia de Hueber es comer alimentos ricos en fibra y proteínas antes de probar esta bebida. “No hacerlo puede desencadenar la inflamación y generar fluctuaciones a lo largo del día, lo que disminuye la energía”, comentó.
- No hacerlo antes de ejercitarse: por la cafeína, tomar esta bebida antes de ejercitarse puede generar ansiedad durante la sesión.
- Antes que el café, un baño de sol: la especialista explicó que no solo el café permite comenzar el día con toda la energía. De hecho, recomendó ingerirlo después de tomar el sol. “Exponerse a la luz natural durante la primera hora después de despertarse es una forma importante de mantener un equilibrio hormonal óptimo”, expuso.
Después de beber café en las mañanas:
- Cepillarse los dientes, pero no inmediatamente: lo sugerido por Abigail Hueber es cepillarse 30 minutos después, dando espera a que los dientes se remineralicen.
- Hidratarse: antes de beber café no solo es importante comer algo, sino hidratarse con bebidas ricas en minerales. “Me refiero principalmente al potasio y al sodio, los cuales ayudan a dirigir el agua hacia donde sea necesario en el cuerpo para una hidratación óptima”, agregó la experta.
- Orinar: sí, el café genera ganas de orinar, entonces la recomendación es ir al baño antes de salir a trabajar.
Café con sal, una tendencia
Aunque la tendencia es que al café, por ser amargo, se le añada azúcar, edulcorante o crema, hay una nueva tendencia que ha comenzado a tomar fuerza en el mundo.
Se trata de añadirle sal al café. Y aunque es una tendencia que se ha venido abriendo paso, tiene una razón de ser y tiene que ver con la salud.
Añadir sal a una taza de café parece algo extraño, pero de acuerdo con varios expertos trae unos beneficios que deben ser tenidos en cuenta y que fueron descubiertos recientemente, aunque es una técnica que ya lleva varios años como costumbre de culturas de la Europa antigua.
Esta combinación se recomienda, en especial, para las personas que desarrollan actividades físicas extenuantes o que son amantes de entrenar su cuerpo, no solo para neutralizar el amargor.
El chef estadounidense Alton Brown se dio a la tarea de investigar la relación entre el café y la sal. En su estudio logró determinar que las papilas gustativas detectaron primero lo salado que lo amargo del café.
Eso significa, en términos químicos, que los iones de sodio disminuyen la amargura del café y también acentúan su sabor, entre otros beneficios.