Vida Moderna
Leche y avena: así se pueden preparar para reducir el acné y las arrugas
Estos alimentos poseen grandes beneficios y cualidades para el cuidado de la piel. Sin embargo, al combinarse pueden potenciar, en mayor medida, sus propiedades.
Los signos de la edad en la piel y la aparición de espinillas son factores que, en muchos casos, afectan a las personas. Con el paso del tiempo se han creado varias prácticas naturales para combatir estos ‘problemas’ en el rostro.
Desde luego, cada persona tiene un tipo diferente de piel y de ello depende la efectividad de la aplicación de mascarillas que previenen las arrugas y el acné. Es por ello que, según expertos, muchas de estas imperfecciones aparecen cuando la piel se obstruye y está sucia, sin dejar a un lado variables como el estrés, cambios hormonales, bacterias y demás los cuales también pueden influir en la aparición de estos cambios faciales.
Es importante acudir con un profesional, pues se puede tratar de un problema que no solo abarca la salud de la piel sino que puede impactar al organismo. Por otro lado, existen varios alimentos como la leche y avena que son utilizados para cuidar la piel y mitigar la aparición de arrugas y espinillas.
En ese sentido, a pesar de que las mascarillas con alimentos carecen de sustento científico, la experiencia por parte de quienes las han utilizado dan sustento para dar a conocer una nueva forma de combatir algunas imperfecciones en el rostro. Sin embargo, estos métodos no sustituyen tratamientos dermatológicos.
De acuerdo con el portal web Mejor con salud, la avena es uno de los cereales más beneficiosos para el cuerpo; tiene vitaminas, minerales y fibra que funcionan muy bien en el organismo por lo que se ha considerado como un elemento extra para el cuidado de la piel.
La Revista India de Dermatología, Venereología y Leprología ha dado a conocer algunas propiedades que caracterizan a la avena como un superalimento, además, señala las propiedades relacionadas con la piel al mencionar que combate el prurito (sensación extrema de rascarse), trata la dermatitis atópica (inflamación de la piel que causa comezón), combate infecciones virales, reduce erupciones provocadas por el acné y protege la piel contra los rayos ultravioleta.
En concordancia con lo anterior, la textura de la avena desprende las células muertas e impurezas de la piel, de allí que sea considerada como un alimento efectivo para el tratamiento o cuidado del rostro.
Por otro lado, la leche además de ser una bebida rica en vitamina A, también ha sido utilizada para el cuidado de la piel y quemaduras. Según un estudio publicado en en la Revista Internacional de Dermatología, el ácido láctico que tiene la leche actúa como hidratante; por esta razón este líquido, al utilizarse en cuidados dermatológicos, podría suavizar la piel sensible.
Asimismo, si se combina la leche con otros productos esta podría actuar como un exfoliante que elimina células muertas y residuos que usualmente se acumulan en la piel, como en el rostro, provocando acné.
Como se ha mencionado, la avena y la leche poseen grandes beneficios, propiedades relacionadas con el cuidado de la piel y de forma separada actúan efectivamente. Sin embargo, al unir estos alimentos con la creación de una mascarilla se potencian mucho más sus cualidades.
Mascarilla de avena y leche
Ingredientes: media taza de leche (125 ml) y dos cucharadas de avena (2 gr).
Preparación y aplicación:
- Mezclar la avena y la leche en un bowl o recipiente de forma constante hasta obtener una combinación, un poco sólida, en forma de pasta.
- Limpiar el rostro con abundante agua y jabón de preferencia personal.
- Aplicar la mascarilla en cantidades equivalentes por todo el rostro, evitar aplicarla cerca de los ojos. Esta mascarilla también se puede utilizar en el cuello.
- Dejar actuar durante cinco o diez minutos, si se percibe ardor o efectos secundarios se debe quitar inmediatamente.
- Lavar el rostro con agua fría.