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Limonada de té verde para perder peso: así se puede preparar
Tiene poderosos agentes antiinflamatorios. Por eso, además de contribuir a reducir medidas en la zona del vientre, ejerce un control sobre los procesos de inflamación del organismo.
Sin duda, el té verde es una de las infusiones más apetecidas por las personas que buscan bajar de peso. Sin embargo, son pocas las que conocen los beneficios de prepararlo como una limonada.
Esta es una bebida con compuestos antioxidantes, vitaminas y minerales, que apoyan la función metabólica para combatir el exceso de peso. Tanto el té verde como el limón se distinguen en todo el mundo por sus propiedades desintoxicantes y diuréticas. Por eso, ayudan con la eliminación de los desechos retenidos en el cuerpo, según el portal Mejor con Salud.
Un estudio publicado en International Journal of Molecular Medicine señala que ambos cuentan con poderosos agentes antiinflamatorios. Por eso, además de contribuir a reducir medidas en la zona del vientre, ejercen un control sobre los procesos de inflamación del organismo.
El té verde contiene un poderoso antioxidante, conocido como galato de epigalocatequina (EGCG), que contribuye a la reducción de grasa, colesterol y triglicéridos, afirma una investigación publicada en Molecules.
Además, cuenta con una elevada concentración de polifenoles, antioxidantes que estimulan la función hepática para reducir el exceso de grasa. También, gracias a su contenido en pectina, prolonga la sensación de saciedad y frena el deseo insaciable de ingerir exceso de calorías.
El té verde puede contribuir a la pérdida de peso gracias a la teína, que no es más que la cafeína que esta planta contiene y que es considerado un excelente quemagrasas, gracias a su efecto termogénico, lo cual quiere decir que acelera el metabolismo celular, aumenta la temperatura corporal y ayuda a eliminar el tejido adiposo, según el portal GastroLabWeb.
Limonada de té verde
Ingredientes:
- 1 litro de agua.
- 2 limones.
- 4 bolsas de té verde.
- 2 cucharadas de miel pura orgánica (50 g). Opcional.
- 1 cucharada de jengibre fresco (10 g).
Preparación:
- Incorporar el litro de agua en una olla y poner a hervir a fuego alto.
- Mientras tanto, lavar bien los limones y rallar un poco de su cáscara para agregarla en la olla. Reservar el jugo.
- Dejar que la infusión de cáscara de limón hierva cinco minutos a fuego bajo.
- Pasado este tiempo, retirar del fuego y agregar las bolsas de té verde y el jengibre.
- Tapar bien y esperar que repose otros diez minutos.
- Luego, agregar el jugo de limón y la miel de abejas.
- Llevar la limonada a la nevera durante dos horas, o hasta que esté bien fría.
- Cuando esté lista, pasarla por un colador y consumirla.
Te verde con menta
El té verde, junto con la menta, añade un gran efecto calmante que disminuiría la ansiedad por comer y contribuiría con la salud del sistema digestivo.
Ingredientes
- 1 vaso de agua (250 ml).
- 1 cucharada de té verde (10 g).
- Menta fresca (unas cuantas hojas).
- Opcional: miel (1 cucharadita).
Preparación
- Calentar el agua y, cuando llegue a ebullición, agregar el té verde y la menta.
- Dejar a fuego bajo cinco minutos y, a continuación, retirar y esperar a que repose.
- Cuando esté a una temperatura apta para el consumo, pasarla por un colador y, por último, endulzar con una cucharadita de miel.
- Se recomienda consumir con moderación.
Bebida refrescante de té verde
Ingredientes:
- 2 tazas de agua.
- 1 cucharada de matcha orgánico.
- 2 cucharadas de miel.
- Jugo de un limón.
- Ralladura de un limón.
- ½ rama de canela.
- Hielo y menta al gusto.
Preparación:
- En una cacerola colocar las dos tazas de agua y la ralladura de limón, revolver hasta que hierva y agregar la ½ rama de canela. Apagar el fuego.
- Añadir la cucharada de matcha y reposar por cinco minutos. Retirar la rama de canela y dejar enfriar.
- Agregar el jugo de limón y las cucharadas de miel, revolver hasta obtener una mezcla homogénea.
- Mantener en el refrigerador por dos horas o agregar hielo al gusto.
Recomendación: se debe consultar al médico tratante antes de consumir el té verde, ya que cada organismo es distinto.