Salud
Los beneficios de la soja para reducir la glucosa y mejorar la circulación de la sangre
Un alimento que puede ser sustituido por la carne animal, ya que es imprescindible para obtener proteínas.
La soya o soja es una oleaginosa de la familia de las papilionáceas que procede de la especie Glycine ussuriensis. Este grano y sus subproductos como el aceite y harina se utilizan principalmente para la alimentación, ya que es una proteína de origen vegetal, rico en grasas poliinsaturadas, fibra, vitaminas y minerales que benefician la salud.
“Algunas investigaciones registran su existencia en China hace ya más de 5000 años y su uso como alimento en esa nación se documenta en 2800 a. C., luego de que las religiones orientales prohibieron el consumo de carne animal, por lo que la soja se posicionó como un cultivo imprescindible en Oriente para obtener proteínas. En el siglo XVIII llegó a Europa y a principios del XIX, a Estados Unidos, donde su cultivo adquirió una mayor importancia dentro de los países occidentales”, señala un artículo de la plataforma del Gobierno de México.
Para los expertos del portal Mejor con salud, la soya es un alimento ideal gracias a que, “a diferencia de las proteínas animales, es una alternativa libre de colesterol, grasas saturadas y otros elementos perjudiciales para la salud”. Otro punto a favor de la soya es que es un alimento apto para los intolerantes a la lactosa y puede ser un sustituto de la carne.
Según especialistas la proteína de la soja es ideal para la nutrición de los deportistas o aficionados al fitness. “A pesar de ser una proteína vegetal, es muy completa y su aminograma no tiene mucho que envidiar a las opciones de origen animal”, señaló la fuente citada.
Este alimento es uno de los más nutritivos debido a sus altos niveles de grasas poliinsaturadas, asimismo su aporte de fibra, minerales, vitaminas y bajo contenido de grasa saturada también la hacen ideal para incluirla en una dieta saludable.
La formación de la masa muscular también tiene el aporte de la soja, pues contiene aminoácidos esenciales, que ayudan para cuidar y aumentar la masa muscular. La asimilación de la soja es importante para reducir la degradación de las fibras musculares y también aporta energías para evitar el cansancio luego de la actividad deportiva.
Una combinación de una alimentación con soja y ejercicio puede ayudar a las mujeres a sobrellevar la menopausia con menos molestias. La soja tiene componentes bioactivos que favorecen la salud de la mujer como las isoflavonas reduciendo los principales síntomas como: bochorno, fatiga, sudor nocturno, cambios en el estado de ánimo, oscilaciones del humor, sequedad vaginal y dolores de cabeza.
De acuerdo con el portal Food and Drug Administration (FDA), el consumo de 30 gramos (una onza) de proteína de soja al día como parte de una dieta baja en grasas saturadas y colesterol ayuda a disminuir los riesgos cardiovasculares. Asimismo, la soja mejora la función de los vasos sanguíneos en general y previene la generación de coágulos.
Una de sus preparaciones es “en forma de granos cocidos, harina o a través de proteína texturizada (carne de soja), la cual es utilizada para sustituir la carne”. Por otra parte, los expertos en Tuasaúde aconsejan consumir “una porción de alrededor de 85 gramos de soja cocida, 30 gramos de tofu o 1 vaso de leche de soja a diario”.
Los expertos recomiendan consumir una o dos porciones por día, siempre y cuando sea la versión menos procesada posible. Las mejores opciones son el edamame, tofu, tempeh, miso y la leche de soja. Cabe mencionar que las únicas personas que no deben consumir soja son aquellas alérgicas al producto o los que presentan problemas con la tiroides.
A su vez, los minerales y las isoflavonas de la soya, contribuyen a reducir la pérdida de masa ósea, lo cual significa que su consumo frecuente ayuda a prevenir y a tratar enfermedades degenerativas como la osteoporosis.
Por último, algunos estudios científicos han demostrado que los antioxidantes presentes en la soya, ayudan a prevenir enfermedades crónicas degenerativas como el cáncer, las enfermedades del corazón y la diabetes.