SALUD
Los hábitos comunes que provocan ansiedad
Este sentimiento puede derivar en problemas de salud si se vuelve recurrente.
La ansiedad y el estrés se han vuelto parte de la vida de millones de personas. Es una emoción normal que se experimenta en situaciones en las que el individuo se siente amenazado por diversos factores.
Por ejemplo, una persona puede sentirse ansiosa cuando se enfrenta a un problema difícil en el trabajo, antes de presentar un examen o cuando debe tomar una decisión importante, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Es un sentimiento que es normal si no se presenta en exceso y tampoco es frecuente. Si no es así, se convierte en un tema más complejo, conocido como trastornos de ansiedad, que pueden durar meses y empeorar si no se tratan, asegura la Clínica Universidad de Navarra, de España. Cuando esto sucede, puede comprometer el equilibrio y la salud de las personas.
Hay algunos hábitos que derivan en los problemas de ansiedad, que con el tiempo pueden ocasionar situaciones complejas. Estos son algunos de ellos.
No dormir bien
Según el portal Psicología y Mente, la calidad del sueño es uno de los primeros aspectos de la vida que se resiente a causa del estrés, y a la vez, que las personas no lleven un control adecuado del horario para dormir, favorece la aparición de niveles elevados de ansiedad. Esto puede convertirse en un círculo vicioso, que en ocasiones requiere de acompañamiento médico. Lo ideal, según los expertos, es que los adultos duerman en promedio ocho horas al día y que adicionalmente se tenga una rutina que permita tener un sueño reparador.
Alimentación deficiente
Cuando las personas no se alimentan bien, esto puede verse reflejado en su estado de ánimo, asegura un artículo del portal Mejor con Salud, escrito por el psicólogo Bernardo Peña. La publicación cita un estudio realizado por la Universidad de Aberdeen, el cual concluye que las dietas deficitarias e inadecuadas pueden incrementar el malestar y aumentar el riesgo de sufrir trastornos de ansiedad o depresión.
Sedentarismo
El estilo de vida sedentario potencia la ansiedad, según los expertos. Por un lado, el hecho de no moverse demasiado hace que aumenten las probabilidades de no interactuar demasiado con los demás, y esto favorece la aparición de síntomas de tipo depresivo, precisa Psicología y Mente. A esto se suma que cuando no se hace ejercicio es más probable terminar desarrollando rutinas poco saludables, las cuales ayudan a que suban los niveles de ansiedad.
Consumo de sustancias adictivas
La ingesta de sustancias adictivas está muy relacionada con el desarrollo de estos problemas. También puede convertirse en un círculo vicioso, porque es probable que quienes experimentan más estrés y angustia tengan mayor riesgo de acercarse al mundo de las drogas, mientras que el hábito de consumirlas supone una bomba en sus condiciones emocionales.
Ingesta de cafeína
Según el instituto de investigaciones Mayo Clinic, las bebidas con cafeína pueden hacer que las personas se sientan tensas y nerviosas, además de interferir en el sueño, que como se mencionó anteriormente es clave para superar el estrés y los problemas de ansiedad.
Rodearse de personas negativas
Otro hábito negativo es cuando las personas se rodean de otras que no aportan al bienestar. Es importante crear una red social en la que se pueda confiar, con la que se compartan momentos felices, eso, según los expertos, es sinónimo de salud y bienestar emocional.
“Nuestro cerebro necesita de esas conexiones con personas especiales, esas con las que se pueda hablar, aliviar penas, crear proyectos e ilusionarse”, dice el psicólogo Bernardo Peña en la publicación de Mejor con Salud. Por tanto, es relevante pasar tiempo con amigos enriquecedores, evitando aquellos que quitan la calma y la felicidad.
Cuando una persona considere que está experimentando problemas de ansiedad, es importante consultar al especialista con el fin no solo de terminar las causas detrás del padecimiento, sino de obtener el tratamiento indicado.