Los hábitos más frecuentes que dañan la vida útil de la ropa

¿A quién no le ha pasado que compra una prenda y se daña en cuestión de meses? La durabilidad de la ropa puede depender de múltiples factores; algunos fuera del control de las personas, como la calidad de la tela con la que son elaboradas, mientras que otros pueden controlarse, como la forma en que se lavan.

Para que los jeans, faldas, camisas y demás ‘pintas’ que se tienen en el closet se conserven como nuevas, es necesario tener algunos cuidados y evitar ciertos errores, los cuales pueden facilitar que la prenda pierda su color, se deshilache, se rompa o que se manche.

La primera regla de oro es aprender a diferenciar los tipos de ropa y telas que se tienen en el armario, pues no es lo mismo la manera en que se deben tratar los vestidos de baño, los brasieres, las pantis, los calzoncillos y otras piezas interiores a como se deben cuidar los prendas que se usan externamente, como los pantalones y las camisas.

Así lo explican desde varios blogs conocedores en el tema, quienes han señalado algunos de los errores más comunes que cometen las personas al momento de cuidar su ropa. El primer error es una de las causas más frecuentes por las que se dañan las prendas de vestir y es el lavado.

La sección de estilo y vida del portal Información de España explica que, en ocasiones, se pasa por alto el efecto que puede tener lavar una prenda sensible en la lavadora. Aunque es una aliada que facilita el trabajo y permite tener la ropa limpia en cuestión de minutos, lo cierto es que no siempre es la mejor opción si lo que se quiere es preservar ciertas piezas delicadas.

Por ejemplo, los bikinis, vestidos de baño enteros y la ropa íntima se deberían lavar mejor a mano, para así evitar que se dañen o que se deteriore el caucho que permite su elasticidad, indican desde el portal. Además, es una forma de garantizar que el lavado sea minucioso y así prevenir la acumulación de mugre y bacterias en una prenda que entra en contacto directo con la piel y zonas de cuidado, como los genitales.

En esa misma línea, desde la revista especializada en moda y belleza Vogue indican que otro de los errores que se cometen es ignorar las etiquetas de las prendas, pues en ellas se indican la manera adecuada para lavar, secar, planchar, guardar y cuidar las prendas de vestir. Seguir al pie de la letra estas instrucciones puede ahorrarle un disgusto a más de uno, evitando que su camisa favorita pierda su color.

Un tercer error es guardar las prendas de cuero dobladas, ya que de esta forma solo se provocará que las marcas de los dobleces se noten siempre o hasta llegar a cuartarse, más si las prendas no se utilicen constantemente y permanecen en el closet por un buen tiempo. Ahora, por el mismo material, como resaltan los expertos, es difícil planchar una prenda de cuero sin dañarla, por lo que se sugiere acudir a una tintorería para que puedan tratar la prenda como es debido y disminuir las arrugas.

Finalmente, desde el portal de recomendaciones para la casa Hogarmanía mencionan que organizar el closet correctamente importa más de lo que se cree. Como se mencionó anteriormente, está claro que no todas las prendas deben ir dobladas, porque pueden dañarse fácilmente; pero tampoco como para tener toda la ropa guindada. La decisión se toma teniendo en cuenta el material de las prendas, pues camisetas, pijamas, sudaderas, por mencionar algunas, pueden doblarse sin problema.