Los jugos que limpian las arterias del corazón

El sistema circulatorio es una compleja red de capilares, vasos sanguíneos y arterias. Estos tubos transportan la sangre oxigenada a través del cuerpo y mantenerlos limpios es determinante para el buen funcionamiento del corazón.

Mientras estos conductos estén libres de obstrucciones a las que se les conoce como placas, la sangre puede fluir libremente, garantizando la buena condición del organismo; sin embargo, el consumo de una alimentación poco saludable puede interrumpir estos procesos.

Las placas en las arterias se desarrollan cuando el colesterol se adhiere a la pared de estas, precisa el portal de salud Healthline. Por esta razón, es indispensable hacerle seguimiento a los niveles de colesterol, pues de no controlarse pueden derivar en padecimientos más complejos como infartos o accidentes cardiovasculares.

La Fundación Española del Corazón define el colesterol como una sustancia grasa natural presente en todas las células del cuerpo humano, necesaria para el normal funcionamiento del mismo; sin embargo, sus excesos van taponando las arterias.

Para tener las arterias limpias también es importante que las personas consuman a diario alimentos que ayuden a reducir la cantidad de triglicéridos en la sangre. Estas sustancias son la forma más común de grasa en el organismo, el cual los almacena y usa para mantener la energía entre comidas.

Cuando se presenta obstrucción de las arterias coronarias se puede producir la enfermedad coronaria, que es causada por un suministro inadecuado de sangre al corazón. En muchos casos, la peor de las consecuencias es la muerte del músculo cardíaco.

Algunos remedios caseros puede ayudar a mantener limpias las arterias y evitar que se formen las mencionadas placas. Los jugos de algunas frutas son una opción saludable y recomendada para cumplir este objetivo, si se consumen en el marco de una dieta saludable y la práctica regular de ejercicio.

1. Pera: Esta fruta tiene propiedades que ayudan a regular la tensión arterial, gracias a que tiene efectos vasodilatadores debido a su contenido en potasio; evita la formación de coágulos y mejora el equilibrio cardiovascular, precisa el portal Mejor con Salud, en una publicación escrita Elena Martínez Blasco.

2. Fresas, arándanos y semillas de chía. Las dos frutas aportan vitamina C y antioxidantes, mientras las semillas de chía ofrecen ácidos grasos que son buenos para destapar las arterias. El sitio web indica que para preparar este jugo se necesita una taza de leche, preferiblemente de almendras o de nuez, una de fresas, media de arándanos, media de semillas de chía y hojas de menta. Se lavan las fresas y los arándanos; se ponen a licuar, añadiendo la leche y luego las semillas de chía, y el resultado se mezcla hasta formar una mezcla homogénea. Se consume de inmediato.

3. Piña con jengibre: Al igual que la pera, la piña es rica en potasio y contribuye a mantener una presión arterial controlada. Para preparar el jugo, según el portal de salud y bienestar Tua Sáude, se puede usar un par de rodajas de piña, un centímetro de raíz de jengibre y un vaso de agua. Se mezclan los ingredientes en la licuadora y, si no se requiere agua, mejor. Se consume esta bebida después de la cena.

4. Aguacate y naranja: Según el portal Salud y Cardiología, el aguacate posee altos niveles de grasas monoinsaturadas. Además, funciona como un alimento que controla la grasa y ayuda a mantener los niveles del colesterol malo en personas que padecen de obesidad. Para preparar este batido se requiere de medio aguacate, un vaso de jugo de naranja, diez arándanos, diez nueces y diez almendras. Se ponen todos los ingredientes en la licuadora y se mezclan hasta que la bebida quede homogénea y ya está lista para consumir, de acuerdo con información del portal Su Médico.

5. Zanahoria y rábano: Ambos ingredientes tienen propiedades antioxidantes que ayudan a reducir las grasas acumuladas en las arterias. Para preparar este jugo se requiere de una taza de agua, una de zanahoria y un cuarto de taza de rábanos. Se lava la zanahoria y se trocea, a los rábanos se les quitan las raíces y las hojas, y se meten en la licuadora, se añade agua, se licúa y estará listo para consumir.