Vida Moderna
Los mejores alimentos para aumentar las defensas durante los días fríos
Las temperaturas bajas son un enemigo para el organismo, por lo que se requiere redoblar esfuerzos para impedir cualquier enfermedad.
Con la llegada del Fenómeno del Niño, las lluvias son más frecuentes de lo esperado y, por consiguiente, la temperatura se modificará. Principalmente, en los climas fríos se requiere doblar los cuidados para mantener las defensas fuertes.
Durante esta época del año, el organismo debe estar protegido ante enfermedades respiratorias, las cuales se propagan con mayor facilidad en ambientes de bajas temperaturas. Para ello, la clave para fortalecer las defensas y ser lo más inmune posible es la alimentación, desde el tipo de alimentos como las proporciones ingeridas; junto a la actividad física.
Si se pasa desapercibido el invierno, el cuerpo estará vulnerable contra el ambiente, lo cual lo hace propenso a padecer catarros, gripes, bronquitis, faringitis, amigdalitis, entre otras patologías. Del mismo modo, no abrigarse o estar en contacto frecuente con los vientos helados, el cuerpo no soportará el cambio de temperatura y los efectos negativos harán su aparición.
Medline Plus explica que uno de los alimentos importantes para el cuerpo son los cítricos, debido a que cuentan con un alto contenido de vitamina C, presente por ejemplo en las toronjas, naranjas, mandarinas y limón. La fruta se puede consumir en gajos o siendo exprimidas recientemente sin necesidad de agregado de azúcar. Igualmente, se aconseja saborear de las frutas de estación en forma natural.
Otros alimentos fundamentales son las hortalizas, especialmente las que son ricas en vitaminas A y C. Entre estas, se destacan la zanahoria, zapallo, calabaza, acelgas, espinaca, brócoli, coliflor, repollo, ajo, cebolla, zucchini y berenjena. Una buena opción para el almuerzo y la cena es incluir sopas (caldos) u hortalizas cocinadas como ensalada. Las denominadas hortalizas aliáceas tienen propiedades mucolíticas y antisépticas que trabajan contra los gérmenes.
Otra recomendación es cocinar en casa, para que la comida sea casera y así evitar los envasados y producciones ultraprocesadas. Este tipo de alimentos contienen altos niveles de grasa, sodio y azúcares añadidos. En ese orden de ideas, las tres comidas del día deben ser hechas desde hogar, acompañadas principalmente con porciones equilibradas de ensalada fresca (aportan vitaminas, minerales y fibra).
En caso de querer alimentarse con guiso, sea con carne magra u otra opción, la recomendación es consumirla, pero con el acompañamiento de ensaladas que tengan legumbres, arvejas y lentejas, dado que estos productos son fuentes de fibra, minerales y vitaminas. En la misma línea, hay que evitar, hasta donde se pueda, la ingesta de embutidos y ser moderados con el agregado de sal, grasas y aceites.
Además, Mejor con Salud explica que en la alimentación las frutas ‘de invierno’ son ricas en vitamina C, el cual es un antioxidante natural que protege a las células de radicales libres, ayuda al funcionamiento del sistema inmunológico y mejora la absorción del hierro.
Del mismo modo, la leche fortificada es un producto que debe estar en la alimentación para hacerle frente a los estragos del invierno, debido a que es un alimento que reemplaza la cantidad de rayos solares que no hay durante este periodo, por lo que cumple la función de ser un suplemento natural de vitamina D.
Igualmente, hay que mantener una buena hidratación. Se sugiere que por día, se ingieran dos litros de agua, junto con infusiones calientes de té, mate y café, siempre y cuando se conserven en cantidades moderadas sin azúcar. Frente a la actividad física, se indica que debe hacerse al menos 60 minutos diarios para gozar de una buena salud en la época invernal.