Los mejores trucos para combatir la ansiedad de comer cosas dulces

El dulce es uno de los alimentos más agradables y son pocas las personas que se resisten a la tentación de disfrutarlo. En porciones moderadas es el elemento ideal para producir la energía que el organismo requiere cada día, pero cuando se consume en exceso trae graves consecuencias para la salud.

Al consumir azúcar hay dos hormonas que se activan en el cerebro: la serotonina y la dopamina, las cuales dan la sensación de bienestar, razón por la cual muchas personas sobrepasan los límites y no controlan el consumo de este elemento.

Este abuso puede generar consecuencias muy dañinas en el funcionamiento del cuerpo, hecho por el cual, la Organización Mundial de la Salud recomienda reducir el consumo de azúcar a menos del 10% de la ingesta calórica total.

Secretos para moderar el consumo de azúcar

De acuerdo al portal mujerhoy.com, estos son algunos consejos que se pueden tener en cuenta para disminuir el exceso de consumo de azúcar:

Un desayuno rico en proteínas

Los niveles de insulina después de un desayuno azucarado suben muy rápidamente, haciendo que disminuyan los niveles de azúcar en sangre y vuelva a tener antojo de consumir dulce un par de horas después.

Pero si consume un desayuno con una buena porción de proteínas, tendrá energía para la mañana con la ventaja de que no tendrás esos antojos de azúcar, pues los niveles de este elemento en la sangre están estables.

Para conseguirlo, incluya en su desayuno alimentos como los huevos, el yogur griego, un poco de pollo desmechado o queso ricotta.

Priorice su descanso

Según un estudio realizado por la Universidad de Columbia, aquellas personas que no descansan adecuadamente por la noche tienden a comer más productos azucarados durante el día. «Un sueño de mala calidad puede afectar el mecanismo de recompensas en el cerebro, lo que te hace sentir una fuerte atracción por los alimentos azucarados o poco saludables», aseguran.

Para tener un sueño saludable y reparador, se recomienda dormir de siete a ocho horas cada noche, sin ningún tipo de interrupciones y siguiendo, en lo posible, un horario regular.

Dígale no a las tentaciones

Evite comprar esos alimentos que tienen exceso de azúcar, pues si cuando abre la alacena no encuentra esas tentaciones, no las comerá.

Si por alguna razón debe comprar esos alimentos dulces, colóquelos en sitios que no estén a su alcance y ponga a la vista snacks más dulces como pueden ser las frutas, los frutos secos o alguna infusión que contenga dulce natural.

Busque sustitutos naturales

En la naturaleza existen otros alimentos dulces que no contienen azúcares añadidos, como los plátanos, o las fresas. Además, también puede optar por tomar infusiones naturalmente dulces como la canela o la frambuesa.

Evite el estrés

El estrés aumenta la tendencia a estar picando alimentos poco saludables. Por eso se recomienda tratar de llevar una vida más relajada, en donde el ejercicio y la meditación tengan cabida.

Beba bastante agua

Aunque no lo crea, la sed y el hambre a menudo se confunden entre sí. Si no está segura de si tiene hambre o sed, los expertos recomiendan beber un vaso grande de agua y esperar unos minutos.

Si después de un tiempo continúa sintiendo hambre, opte por alimentos no azucarados.