Mascarilla casera de papa para acabar con las arrugas

Aunque la estética tenga su gran impacto en lo visual o externo, no es solamente algo que se quede en la imagen. De hecho, el tener una apariencia renovada y agradable será -en gran medida- el reflejo de la manera en que se lleva el estilo de vida. La alimentación o los hábitos saludables influirán.

Además de lo anterior, es clave destacar que el organismo humano es semejante a una máquina en ciertos aspectos. Uno de estos es que mientras más se cuide, más se alarga la vida útil. De la misma manera, la revisión constante ayudará a que se detecten fallas que con el tiempo pueden agravarse.

No obstante, a pesar de todas las medidas que puedan tomarse para mantenerse en óptimas condiciones, la edad será un atenuante natural frente a los cambios físicos que se presentan poco a poco. La piel, el cabello y hasta la figura están destinados a cambiar con el paso de los años.

A cada una de las muestras del avance del tiempo sobre el cuerpo se les conoce como signos del envejecimiento. Entre estos, las más comunes son las arrugas, que son pliegues o exceso en la piel, que a su vez se estira por el trabajo y esfuerzo que ha recibido por décadas.

Sin embargo, a pesar de tratarse de una manifestación natural de la edad, las arrugas suelen causar complejos a más de una persona. Además, en algunos casos estas se acompañan de manchas cutáneas. Para ello hay soluciones, las cuales en su mayoría están enfocadas en el uso de productos 100% naturales.

Aunque no se vayan a eliminar por completo las arrugas, sí pueden suavizarse o prevenirse parcialmente. En ese sentido, uno de los alimentos comprobados con efectos relacionados con lo anterior es la papa.

El tubérculo ampliamente cultivado en las regiones más altas de Colombia es una fuente rica en minerales, vitaminas C, B1, B3, B6 y flavonoides. Todos estos componentes tienen un impacto en la búsqueda por emparejar el tono de la piel y desvanecer las imperfecciones.

A fin de lograr aprovechar tales efectos, existe una alternativa de uso directo, que es una mascarilla de papa. A través de la formación de colágeno y elastina que promueve la papa, la piel podrá volverse más tersa e hidratada por este remedio casero.

Existen tres opciones de realizar esta solución, cada una con ingredientes diferentes pero con resultados similares. La primera, por ejemplo, fue sugerida en la revista Vogue por la especialista en cosmética natural María Violante.

Para esta se necesitará papa rallada y una cucharada de miel. De esta manera, teniendo ambas cosas en un recipiente, se revolverán hasta tener una mezcla uniforme, se aplicará en el rostro, se dejará reposar por 15 minutos y se quitará al enjuagar con agua tibia. Una vez tenga la cara limpia, se sugiere frotar un hielo para cerrar los poros.

Otra alternativa es combinar 1 papa cruda rallada con una tasa de yogur natural y un litro de agua de arroz. Los primeros dos elementos se mezclarán hasta resultar una sustancia homogénea, se aplicará por 25 minutos en el rostro. Finalmente, se retirará la mascarilla con el agua de arroz.

La última versión sugiere utilizar una papa cruda sin cáscara y media taza de leche. La papa se rallará sin cáscara y se exprimirá todo el jugo que contiene con la ayuda de un colador. A ese líquido se le añadirá la leche, se mezclará y se dejará reposar por 5 minutos. Se pondrá en el rostro por 20 minutos y se retirará con agua. Se recomienda repetir el procedimiento diariamente antes de ir a dormir.