Mascarilla casera: la solución perfecta para cerrar poros abiertos de forma rápida y efectiva

Los poros de la piel tiene como principal función ayudar a la transpiración y resguardar la grasa necesaria para la hidratación de la piel. Sin embargo, en muchas personas estos se obstruyen o incluso se ven infectados, lo que causa una apariencia diferente al hacer ver oscura la piel. Ahora bien, los poros abiertos o dilatados son uno de los problemas más habituales que puede tener la piel. Además de ser antiestéticos, pueden dar una sensación de suciedad, por lo que se debe tener un mayor cuidado en la limpieza del rostro para poder prevenirlos o, en su defecto, cerrarlos.

Estas protuberancias se caracterizan por ser pequeños agujeros que son los encargados de que la piel respire, pero cada poro tiene un folículo piloso y glándulas sebáceas que suelen ser los responsables de la hidratación de la piel. Así las cosas, el portal web Centro Mar Garcia, señala que este problema cutáneo puede aparecer por múltiples motivos, entre ellos, exceso de grasa, contaminación, exposición solar, maquillaje y estrés, pero también existen factores de riesgo que aumentan la probabilidad de tener poros abiertos en el rostro:

Factores internos:

• Genética.
• Cambios hormonales.
• Envejecimiento y pérdida de elasticidad en la piel.
• Mala alimentación.
• Estrés.

Factores externos:

• Exposición solar prolongada.
• Contaminación ambiental.
• No desmaquillarse adecuadamente.
• Falta de hábitos de limpieza e hidratación del rostro.

Para tratar este problema y tener una piel tersa e hidratada, se debe acudir a tratamientos profesionales como los peelings o la microdermoabrasión. Asimismo, existen remedios caseros a base de ingredientes naturales que son ideales para hacer mascarillas y así poder hidratar de forma correcta la piel para que los porros se cierren. De hecho, el portal web Cocina Vital de México, destaca las propiedades de la maicena, que también es conocida como almidón de maíz. Esta es una especie de polvo o harina muy fina que se obtiene gracias a la molienda y el procesamiento de los granos de este vegetal. Asimismo, señala la importancia de las propiedades astringentes de la piel para tener unos poros completamente cerrados y libres de impureza.

Mascarilla para cerrar los poros

Ingredientes

• 2 cucharadas de maicena o harina de maíz
• 1 taza de agua caliente
• 2 cucharadas de miel

Procedimiento:

1. En un recipiente, agregar una cucharada de maicena y miel.
2. Enseguida, calentar un vaso de agua y agregar a la mezcla.
3. Lo ideal es remover todos los ingredientes hasta que formen una pasta.
4. Finalmente, coloca la mascarilla sobre la cara limpia, reforzando las áreas de la frente, la nariz y la barbilla, y dejar reposar durante 15 minutos para luego enjuagar el rostro con agua tibia.

Cuatro poderosos consejos para cerrar los poros completamente

Ahora bien, para cerrar los poros y tener una piel tersa e hidratada, se debe acudir a tratamientos profesionales como los peelings o la microdermoabrasión. Sin embargo, existen mascarillas naturales que permiten hidratar la piel y a la vez ir cerrando poco a poco los poros de la piel. Por ello, el portal Salud 180 da a conocer tres formas fáciles de solucionar este problema cutáneo:

• Limpieza facial: para cualquier procedimiento que implique el rostro, es importante iniciar con una adecuada limpieza facial con el fin de minimizar la apariencia de los poros y arrasar la suciedad que se haya depositado en estos pequeños huecos durante el día.
• Mascarilla: luego de esto, se debe aplicar una mascarilla exfoliante una o dos veces por semana para retirar las células muertas, el exceso de sebo e impurezas que puedan obstruir los poros dilatados.

• Tónicos: al retirar la mascarilla exfoliante, es valioso usar un tónico que mantenga a raya el exceso de grasa en la piel del rostro. Además, este producto ayuda mantener una piel radiante y fresa.
• Hidratación: como paso final, es esencial mantener una buena hidratación de la piel para que los poros no se dilaten más que lo que ya están. La clave está en mantener un nivel adecuado de los aceites naturales para que la producción del sebo no aumente el tamaño y tampoco se obstruyan.