Vida Moderna

Pérdida de memoria: estos son los alimentos que ayudan a combatirla

Si la pérdida de memoria afecta la capacidad para realizar las actividades diarias, es importante consultar a un médico.

13 de diciembre de 2022
Alimentos saludables para el corazón
Una alimentación saludable es clave para prevenir problemas del corazón. | Foto: Getty Images

La pérdida de la memoria es el olvido inusual y puede presentarse por un corto tiempo y luego resolverse (transitorio) o, puede no desaparecer y, dependiendo de la causa, puede empeorar con el tiempo, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Además, explicó que la pérdida de memoria puede resultar de una nueva lesión en el cerebro, la cual es causada por o está presente después de:

  • Tumor cerebral.
  • Tratamientos para el cáncer, como radiación al cerebro, trasplante de médula ósea o quimioterapia.
  • Conmoción o traumatismo craneal.
  • Insuficiencia de oxígeno al cerebro cuando el corazón o la respiración se detienen durante demasiado tiempo.
  • Infección cerebral grave o infección alrededor del cerebro.
  • Una cirugía mayor o una enfermedad grave, incluso cirugía de cerebro.
  • Amnesia global transitoria (pérdida súbita y temporal de la memoria) por una causa incierta.
  • Accidente isquémico transitorio (AIT) o accidente cerebrovascular.
  • Hidrocefalia (acumulación de líquido en el cerebro).
  • Esclerosis múltiple.
  • Demencia.

Algunas veces, la pérdida de la memoria se presenta con problemas de salud mental, tales como:

  • Después de un evento traumático o estresante importante.
  • Trastorno bipolar.
  • Depresión o cualquier otro trastorno mental, como esquizofrenia.

Asimismo, otras causas de la pérdida de la memoria incluyen:

  • Consumo de alcohol o uso de medicamentos con receta médica o sustancias ilícitas.
  • Infecciones del cerebro tales como la enfermedad de Lyme, sífilis o VIH/sida.
  • Abuso de medicamentos tales, como los barbitúrcos o los hipnóticos.
  • TEC (terapia electroconvulsiva) (con mucha frecuencia pérdida de memoria a corto plazo).
  • Epilepsia que no está muy bien controlada.
  • Enfermedad que produce pérdida o daño a las neuronas o al tejido cerebral, como enfermedad de Parkinson, enfermedad de Huntington o esclerosis múltiple.
  • Bajos niveles de nutrientes o de vitaminas importantes tales como, vitamina B1 o B12.

Dicho lo anterior, el portal de salud Clikisalud, de la Fundación Carlos Slim, reveló cinco alimentos que te ayudarán a evitar la pérdida de memoria:

1. Remolacha.

2. Proteína sin grasa.

3. Frutas silvestres.

4. Pescado.

5. Nueces.

De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Por su parte, existen otros consejos para cuidar la memoria, como, por ejemplo:

1. Mantenerse activo mentalmente: Para hacerlo,Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, recomienda hacer crucigramas, jugar bridge, tomar caminos diferentes cuando se conduzca, tocar algún instrumento, entre otros.

2. Organizar las tareas diarias: el escribir las citas, tareas o eventos ayudará a recordar más fácilmente. Además, Mayo Clinic recomienda evitar las distracciones y no hacer demasiadas cosas a la vez.

“Si se concentra en la información que está tratando de retener, es más probable que la recuerde más tarde. También puede ser útil relacionar lo que está tratando de retener con una de sus canciones favoritas u otro concepto familiar”, señaló.

3. Dormir bien: el descanso ayuda a consolidar los recuerdos de modo que se puedan recordar más adelante. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño por día.

4. Hacer ejercicio: las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.