Vida Moderna
Piel de porcelana: así se puede preparar un bótox casero
La piel es uno de los órganos en los que más pueden notarse los cambios por el envejecimiento.
De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la piel es el órgano más grande del cuerpo y cumple las siguientes funciones:
- Mantiene los fluidos corporales dentro del cuerpo, previniendo la deshidratación.
- Protege contra las bacterias y virus que pueden causar infecciones.
- Ayuda a percibir el mundo externo, si hace frío o calor, si está húmedo o seco.
- Regula la temperatura del cuerpo.
- Elabora vitamina D cuando recibe sol.
No obstante, existen situaciones, cremas u otras razones que pueden irritar, obstruir o inflamar la piel y, pueden causar síntomas como enrojecimiento, hinchazón, ardor y picazón.
Además, con el paso del tiempo la piel se empieza a arrugar y, las arrugas son pliegues en la piel que pueden ser particularmente notorias alrededor de los ojos, la boca y en el cuello, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Por ello, para cuidar la piel, y en especial la del rostro, La Verdad reveló un bótox casero y para prepararlo hay que hervir un vaso de agua con dos cucharadas de clavo de olor y para mejores beneficios se puede agregar un sobre de té verde y un té de manzanilla. Después, cuando la bebida hierva, se deja reposar por 20 minutos para finalmente, aplicarlo en el rostro y dejarlo actuar durante toda la noche para que la bien absorba los antioxidantes de los ingredientes y así se estimule la producción de colágeno.
De todos modos, antes de aplicar alguna mascarilla en el rostro se debe realizar una prueba de alergia o se debe consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Por su parte, la piel, por ser el órgano más grande, requiere de otros cuidados como, por ejemplo:
1. Proteger la piel del sol: limitar el tiempo que se pasa al sol, especialmente al mediodía, y usar siempre ropa protectora, como sombreros de ala ancha, camisas de manga larga y gafas de sol. Se debe elegir un producto para el cuidado de la piel con un factor de protección solar (SPF), pues la American Academy of Dermatology (Academia Estadounidense de Dermatología) recomienda usar un protector solar de amplio espectro con SPF de 30 o más.
2. Tratar la piel con suavidad y para hacerlo es importante:
- Limitar la duración del baño. El agua caliente y las duchas o baños prolongados eliminan los aceites naturales de la piel y lo mejor es usar agua tibia en lugar de agua caliente. Evitar los jabones fuertes. Los jabones y detergentes fuertes pueden eliminar los aceites naturales de la piel.
- Evitar los jabones fuertes. Los jabones y detergentes fuertes pueden eliminar los aceites naturales de la piel.
- Secarse con golpecitos. Después del baño lo idea es secarse la piel suavemente con una toalla dando pequeños toques para que quede algo de humedad en la piel.
3. No fumar: Fumar puede acelerar el proceso de envejecimiento normal de la piel, lo que contribuye a la formación de arrugas y a otros cambios en el aspecto del rostro, ya que:
- La nicotina hace que los vasos sanguíneos se achiquen, lo que reduce el flujo de oxígeno y los nutrientes a las células de la piel.
- Una serie de sustancias químicas desencadenan eventos moleculares que cambian o dañan estructuras que son necesarias para la salud y elasticidad de la piel.
- Entrecerrar los ojos o fruncir los labios en forma repetitiva contribuye a la aparición de líneas alrededor de la boca y los ojos.
- El calor y el humo no inhalado pueden secar y dañar la superficie de la piel.