Piel
Las mascarillas caseras son efectivas para mejorar las condiciones de la piel. Foto: Thinkstock | Foto: Thinkstock

BIENESTAR

Piel de porcelana: así se pueden preparar mascarillas para la piel con ingredientes que hay en la cocina

Para mantener una piel joven se requiere de mucha hidratación y el consumo de una alimentación equilibrada.

22 de febrero de 2022

La exposición a la luz solar, los cambios en el clima y la polución ambiental son agentes nocivos para la piel. Por esta razón, es importante revisarla de forma permanente y tomar diversas medidas para su cuidado.

Para mantener una piel sana e hidratada, una de las mejores maneras es beber suficiente agua a lo largo del día, pues el cuerpo necesita reponer los líquidos que pierde, por lo que la recomendación es tomar entre dos y tres litros diariamente. El agua ayuda a que el organismo funcione bien, pues dos tercios del mismo son precisamente agua.

Este hábito evitará que la piel pierda elasticidad y flexibilidad de forma prematura, logrando así prevenir el envejecimiento y la aparición de imperfecciones en el cuerpo como las arrugas y las estrías. La ingesta permanente de agua debe complementarse con una dieta que incluya nutrientes buenos para la dermis como la vitamina C, los antioxidantes y el omega 3.

Zanahoria

Las mascarillas de zanahoria pueden resultar ideales para eliminar las arrugas, según el portal Salud 180. Para elaborar una de ellas se requiere de dos zanahorias y una clara de huevo. Se ponen a cocinar las zanahorias, y cuando ya estén blandas se les retira el agua y se trituran. Se agrega la clara de huevo y se revuelve hasta formar una pasta homogénea.

Otra manera de preparar una mascarilla de zanahoria es con aguacate. Se necesita, además de dos zanahorias, medio aguacate, una yema de huevo y una cucharada de miel. Se cocinan las zanahorias, se agrega el aguacate y se tritura hasta formar un puré. Luego se adiciona la cucharada de miel, la yema de huevo y se revuelve perfectamente.

Cualquiera de las dos mascarillas se aplican sobre el rostro con la yema de los dedos, se dejan actuar durante 30 minutos y luego se enjuaga la cara con agua tibia.

Papaya

Si se tiene una piel apagada y sin brillo, un producto que se puede usar es la papaya. Un artículo de la revista Glamour de México indica que para preparar esta mascarilla se juntan una taza de puré de papaya, una cucharada de miel y una clara de huevo batida, se mezclan todos los ingredientes perfectamente y esta pasta se aplica en la cara. Se deja reposar por 15 minutos y luego se lava perfectamente con agua tibia. Esta mascarilla es perfecta para exfoliar las células muertas.

Azúcar

Para decir adiós a las células muertas y a las impurezas acumuladas sobre la superficie de la piel, con el azúcar se puede crear un exfoliante casero. Se humedece el rostro y luego se aplica con movimientos circulares una cucharada de azúcar, se deja actuar durante unos 20 minutos y se retira con suficiente agua, precisa el portal Ok Diario.

Pepino y yogur

Esta es una de las mejores mascarillas para suavizar e hidratar la piel. Para prepararla se requiere de un pepino, el cual se pela y se introduce en la licuadora junto con el yogur hasta formar una pasta. Cuando esté lista, se extiende sobre el rostro, evitando el contorno de los ojos. Se deja que actúe 20 minutos y se enjuaga con agua fría para cerrar los poros.

Yogur y avena

Tanto la avena como el yogur poseen propiedades ideales para hidratar y suavizar la piel. Para elaborar esta mascarilla se mezclan tres cucharadas de cada ingrediente, hasta conseguir una pasta homogénea. Se aplica sobre el rostro seco con movimientos circulares, se deja actuar durante 15 minutos y luego se enjuaga con agua tibia, y se seca la piel con suaves toques con una toalla de algodón.

Miel y huevo

La miel es rica en minerales, vitaminas y aminoácidos, lo cual le da grandes propiedades purificantes y calmantes a la piel, además de ayudar a eliminar impurezas. Se requiere de una clara de huevo, una cucharada de miel, media cucharada de jugo de limón y una cucharada de yogur. Se mezclan todos los ingredientes hasta tener una pasta homogénea y se aplica. Una vez que seque, se enjuaga con agua fría.