Por este motivo nunca se debería comprar fruta que haya sido cortada

Comprar la fruta cortada puede ser muy práctico para muchas personas, pero no es la opción más saludable, por varias razones, como, por ejemplo:

1. Higiene: cuando se corta la fruta, esta está expuesta a la contaminación, y en especial si la superficie donde se corta, el cuchillo o las manos de las personas que hacen el corte no han sido desinfectadas.

2. Oxidación: una vez que la fruta ha sido cortada se acelera el proceso de oxidación por el oxígeno al que está expuesta, y esto puede cambiar el sabor, la textura, la apariencia y hasta el valor nutricional.

3. Pérdida de nutrientes: La exposición al aire y la luz puede disminuir los nutrientes de la fruta.

4. Calidad sensorial: Cuando la fruta se corta y no se consume inmediatamente, esta pierde su textura crujiente, y tiene a volverse más suave.

5. Economía: El comprar fruta cortada suele ser más costoso que comprar la fruta entera, pues se está pagando por el trabajo y por la envoltura.

Frutas más saludables

La revista Men’s Health reveló que las cinco frutas más saludables para el cuerpo son:

• Frambuesas: Se destaca por su alto contenido en fibra. Asimismo, contiene cantidades importantes de vitamina C. También es apreciable su contenido en niacina, ácido fólico y vitamina E.
• Uvas: Esta fruta posee un alto contenido de antioxidantes y de vitaminas C, D, E y betacaroteno. Sobre el consumo, el portal portugués recomendó la ingesta de dos a tres raciones al día, lo que corresponde a 200 g de uva.

• Guayaba: Es rica en fibras, antioxidantes y otros nutrientes como la vitamina C, A y B.
• Moras: Aportan fibra, vitamina C, vitamina E, folatos, pigmentos naturales y ácidos orgánicos.
• Fresas: Aporta Vitamina C, antocianinas y ácidos orgánicos.

Beneficios dependiendo del color de las frutas

1. Rojos: Ayudan a cuidar el corazón y a prevenir problemas cardíacos.

2. Amarillos y naranjas: Contribuyen en la salud de los ojos y la piel.

3. Blancos: Mejoran la calidad de los huesos y las articulaciones.

4. Morados: Favorecen el cerebro y la salud mental.

5. Verdes: Promueven el funcionamiento de las células.

Adicionalmente, el portal SportAdictos reveló que “al mezclar las frutas correctamente se pueden maximizar sus beneficios”. Por ejemplo, “las frutas ácidas se pueden combinar con las mismas ácidas, neutras o semiácidas y las frutas dulces se pueden mezclar con las mismas dulces, semidulces o neutras”.

No obstante, al igual que con cualquier alimento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades de los alimentos ya nombrados, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

De otro lado, las frutas deben estar acompañadas de una alimentación saludable que incluya menos del 10 % de la ingesta calórica total de azúcares libres, menos del 30 % de la ingesta calórica diaria procedente de grasas y menos de cinco gramos de sal (aproximadamente una cucharadita) al día y la sal debería ser yodada.

Asimismo, es crucial hacer ejercicio, y lo ideal es seguir las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que sugieren realizar actividades físicas aeróbicas moderadas durante al menos 150 a 300 minutos o estas mismas de manera intensa, durante al menos 75 a 150 minutos, o una combinación equivalente de actividades moderadas e intensas a lo largo de la semana.

No obstante, al momento de hacer ejercicio las personas se preguntan cuál es la mejor hora para hacerlo y los expertos aseguran que es una cuestión de preferencia, gusto y horarios, pero lo importante es cumplir con los objetivos diarios.