SALUD
Por primera vez, ONU reconoce oficialmente las propiedades medicinales del cannabis
En cuanto al consumo recreativo, este seguirá prohibido en la normativa internacional.
En una votación sin precedentes, llevada a cabo en Viena en la Comisión de Estupefacientes, el órgano ejecutivo sobre políticas de drogas de Naciones Unidas, la organización reconoció oficialmente las propiedades medicinales del cannabis.
Según la información, la mayoría de los 53 Estados de la Comisión han decidido retirar el cannabis y su resina de la Lista IV de la Convención sobre drogas de 1961, lo que significa que se reconoce oficialmente la utilidad médica de esa planta, cuyo consumo recreativo seguirá prohibido en la normativa internacional.
Casi todos los Estados de la Unión Europea, con excepción de Hungría, han sumado una mayoría simple de 27 votos para aprobar el cambio, uno de los más importantes en materia de drogas en las últimas décadas, sin embargo, la mayoría de países de Asia y África se opuso a la decisión.
Por ahora sigue descartado que se avale la legalización del cannabbis con fines recreativos por parte de la ONU. Es de recordar que en marzo de 2019, en el informe anual de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), el órgano encargado de vigilar el cumplimiento de los tratados sobre drogas alertó que “la legalización del cannabis con fines recreativos, como se ha visto en un pequeño número de países, representa no solo una dificultad para la aplicación universal de los tratados, sino también un problema importante para la salud y el bienestar, en particular de los jóvenes”.
En ese momento, la junta censuró a Uruguay y Canadá, los dos Estados que hasta el momento habían legalizado la venta del cannabis para fines recreativos, así como a varios Estados de EE. UU., que también habían dado ese paso.
Ambos países adoptaron esta novedosa legislación argumentando que con la regulación de la venta desinflarían un creciente mercado negro que alimentaba una economía ilegal.
“La aplicación universal y plena de los tratados corre un grave peligro porque algunos Estados parte, como Canadá y Uruguay (así como varios estados de los Estados Unidos), han legalizado el consumo de cannabis con fines no médicos”, señaló el informe en ese momento.
La legalización aumenta la disponibilidad de esta droga y reduce el riesgo percibido y la reprobación social a su consumo, que puede causar desde pérdida de memoria a trastornos psicóticos, recordó la JIFE.
La JIFE no se detuvo ahí y criticó también los programas “mal reglamentados” con cannabis medicinal, y sostuvo que en algunos casos son una antesala a una legalización total de esta sustancia. Estos programas médicos con cannabis expanden el consumo y la disponibilidad de esta droga y suponen un riesgo para la salud, sostuvo e el informe.