VIDA MODERNA
¿Por qué es malo dormir con el celular cerca?
Los expertos recomiendan ubicar este dispositivo lejos de la cama.
Dormir es una de las formas en las que el organismo descansa y recupera energía. Según explica el Dr. Merrill Mitler, experto en sueño y neurocientífico del NIH (Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos), el sueño tiene muchos efectos positivos en el cuerpo. “El dormir mantiene todos los aspectos del cuerpo de una forma u otra: el equilibrio energético y molecular, así como también la función intelectual, el estado de alerta y el humor”.
Los expertos recomiendan dormir entre seis y ocho horas al día. Sin embargo, se debe tener en cuenta que cada persona tiene un estilo de vida diferente. No obstante, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que hay algunos rangos generales que varían, según cada edad:
- Recién nacidos: 16-18 horas al día.
- Niños en edad preescolar: 11-12 horas al día.
- Niños en edad escolar: por lo menos diez horas al día.
- Adolescentes: 9-10 horas al día.
- Adultos (incluyendo adultos mayores): 7-8 horas al día.
El celular se ha convertido en uno de los dispositivos más utilizados por las personas. A menudo, se utiliza para programar la alarma y despertarse al día siguiente. Una de las costumbres más comunes consiste en poner el celular debajo de la almohada o a una distancia cercana al cuerpo, para estar atentos al despertador o a una llamada de emergencia.
Los expertos recomiendan ubicar el celular lejos de la cama, pues hasta el momento se han conocido algunos efectos perjudiciales del celular en el organismo. “El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer ha clasificado los campos electromagnéticos producidos por los teléfonos móviles como posiblemente carcinógenos para los seres humanos”, explica la Organización Mundial de la Salud.
Tendencias
De acuerdo con esta entidad, los investigadores continúan estudiando los efectos de los móviles en la función cerebral, la función cognitiva, el sueño, el ritmo cardíaco y la presión arterial. “Hasta la fecha, esos estudios parecen indicar que no hay pruebas fehacientes de que la exposición a campos de radiofrecuencia de nivel inferior a los que provocan el calentamiento de los tejidos tenga efectos perjudiciales para la salud”, señala la OMS.
Peligros del uso excesivo del celular
En la actualidad el celular es utilizado para múltiples propósitos, esto conlleva a que muchas personas utilicen este dispositivo gran parte de su tiempo diariamente. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) menciona en su portal web los daños que puede causar el celular:
- Estado de ánimo: de acuerdo con Joaquín Gutiérrez Soriano, investigador del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, aquellas personas que pasan mucho tiempo en redes sociales tienen posibilidades altas de presentar síntomas de depresión. “Es un fenómeno descrito no solo como biológico, sino como social y cultural”, explica.
- Ansiedad: cuando las personas acostumbran a mantener una rutina diaria en la que la mayoría del tiempo es el celular, se genera una dependencia. Cuando se olvida el dispositivo o se encuentra a una distancia que impide su uso, ocurren episodios de ansiedad. De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México, existen algunos estudios que explican cómo se puede medir esta ansiedad. Esto se puede realizar con respecto a cuántos mensajes se envían, cuántas llamadas se realizan y cuántas veces se revisa la pantalla del celular durante el día.
¿Cómo mejorar los hábitos de sueño?
Para algunas personas, dormir las horas suficientes es complicado debido a que trabajan en oficios nocturnos o en los que hay un cambio constante de turnos. Para esto, Medline Plus señala algunas recomendaciones para mejorar el ciclo del sueño:
- Tomar siestas y aumentar la cantidad de tiempo disponible para dormir.
- Mantener las luces prendidas en su trabajo.
- Limitar los cambios de turno para permitir que su cuerpo se ajuste.
- Consumir cafeína solo al comienzo de su turno.
- Remover las fuentes de sonido y luz durante su descanso diurno (por ejemplo, usar cortinas que bloqueen la luz).